Capítulo 20

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La armadura le quedaba grande

Se suponía que debería ajustarse al cuerpo del portador, pero por lo que parecía, en el suyo no era verdad tal caso.

Fue cierto que el tamaño del traje se encogió de una forma increible, pero aún así no era lo suficiente como para ajustarse a su pequeño cuerpo y no quedará holgado. Podría haberse conformado con únicamente eso, pero las partes de metal de su armadura era otra historia.

Se había emocionado bastante cuando descubrió que junto al León verde se encontrase cerca un armario, el cual contenía el traje del Paladín Verde. Pero tras haberlo cogido y colocado se dio cuenta que tenía un problema con el hecho de que su tamaño era demasiado pequeño incluso para una armadura que cumplía hasta cierto modo los criterios de adaptarse a cualquier tipo de cuerpo.

La única teoría que se le ocurrió fue el de que no estaba hecho para niños tan pequeños como ella.

Un suspiro escapó de su boca mientras en lo profundo de su garganta de produjo un gruñido cansado.

Si iba a ir en contra de esos alienígenas malos por lo menos la armadura le protejeria, a pesar de lo grande que le quedaba.

Recuperando su determinación se puso en frente del León y este abrió la boca mientras se agachaba para que entrase. De inmediato se encontró con la sala de control, las luces del interior se iluminaba con un brillo verdoso que la invitaban a acercarse a la silla y sentarse en ella. Sin dudarlo mucho con unos cuantos saltos emocionados hizo aquello. Rió brevemente al sentir como la adrenalina empezaba a hundir en su cuerpo, agradeció enormemente que pudiese llegar a los controles y no tener tantos problemas como con su traje.

Dio una pequeña vista por encima del tablero antes de colocar sus manos en los contorles principales.

Se asustó cuando de repente el León empezó a moverse y a flotar sobre el suelo, no puedo evitar pegar un gritillo por ello. Pero de inmediato se acostumbro a la sensación como si se encontrará en una atracción. De alguna en el fondo de su mente una rara sensación se hizo presente, le era extrañamente familiar . Pero decidió ignorarlo por el momento.

Ahora mismo se encontraba en lo que parecía ser un hangar, frente a ella una puerta de titanio de doble capa y fibra de carbon gigantesca del tamaño suficiente como para que saliera el leon se encontraba impidiendo su paso. Estaría bloqueada, y podría hackear con algo de dificultad para que se abriera.

¿Pero en donde se quedaría su salida épica?

Sin dudarlo un segundo más, con una sonrisa en sus labios, empujó los controles hacia delante para que avanzaran.

Lo único que consiguió fue una abolladura en la puerta y que casi chocara su cabeza contra el panel. Se quedó quieta, aun aturdida. Por supuesto que no conseguiria abrirla con un sólo golpe. La puerta estaba hecha específicamente para impedir que se abriera sin permiso ante el exterior del espacio o un ataque de un Imperio alienígena.

Sabía que no se abriría fácilmente.

Pero juraba sobre su madre que la derribaria para conseguir una entrada epica.

Por lo tanto, después de 5 golpes más y con la suerte de no chocar contra el tablero, consiguió derribar la puerta. Una sonrisa de costado y la mirada entrecerada de autorgullo apareció en su rostro por su logro.

Tras derrumbar la puerta, lo primero que visualizo fue el exterior de la Gurnicion.

Tiro de los controles hacia su dirección cuando se dio cuenta que un grupo de personas se encontraban frente suya, logró esquivarlos por muy poco, pero suspiro de alivio cuando vio que nadie salió lastimado.

En el intento de vuelo hacia arriba se le hacía extrañamente complicada, se tambaleaba de vez en cuando sinquerer hacia los lados. El controlar a una máquina tan grande y legendario como el León verde de Voltron se le escapba de las manos, no era como manejar a mando distancia un coche de jugete o conducir un coche real, -algo que experimentó gracias a su tío Matt, lo cual produjo que chica da el coche contra una farola y posteriormente su madre los castigará a ambos- era algo totalmente distinto. 

Trato de aferrarse fielmente a sus pocos conocimientos sobre el vuelo, ya que también era algo que la fascinado y estudiado con esmero, pero sólo sabía los conceptos básicos, los cuales eran suficientes para que no cayese y chocara contra la tierra.

Sin su permiso una incomunicación de únicamente audio se abrió en la cabina del León.

La voz grave de un hombre se hizo presente —'Aquí hablando desde la Coalicion militar internacional Galaxy Garrison. Reportese paladín verde.'

Cuando la reconocieron como la paladín verde, no puedo evitar que sus mejillas se calentaran, una pequeña arrogancia creció en su pecho.

Aquí Kella reportandose— contestó.

—'¿¡KELLA!?'— una voz femenina que se le hizo familiar grito

—¿Verónica? Hey! Como estas?— pregunto como si nada

—'Se puede saber que haces allí'— regaño en la otra línea

Bueno, es que me aburría mucho, así que decidí ir a pasear, me encontré con el León Verde y decidí montar en él

—'Se supondria que deberías estar con Erick'— la menor iba a contestar a eso cuando el ruido en la comunicación de lo que parecía ser una puerta que se abría bruscamente la distrajo — 'VERONICA, ¡¡Kella escapo!!'— la voz del cadete Erick se hizo presente

Hey Erick! ¿Que tal?— un grito se escuchó del otro lado

—'Niña, vuelve de inmediato a la base, es peligroso que estés allí afuera' —hablo nuevamente el hombre grave en la otra linea, algunos murmuros se hicieron presentes

La menor medito un momento antes de hablar —No— respondió.

—'Kella, esto es serio, n-o'-— alguien interrumpió a Verónica por la otra lines, el sonido de movimientos la desconcerto —'Tu nombre es Kella ¿verdad?'— la voz de una mujer desconocida completamente distinta se hizo presente

Ella asintió, después de unos segundos se dio cuenta de que no la podían ver, por lo cual hablo —si

—'Bien Kella, puedo ver que montar en un león espacial pueda ser divertido, pero,' —tomo una breve pausa— 'esto es muy peligroso. Mi hija estuvo luchando contra los Galra, y cuando la perdí fue el peor sentimiento de mi vida, tu madre se sentirá igual si te pierde Kella. Alienígenas malos han venido, y no durarán un segundo en dispararte, aún si eres sólo una niña. Así que debes de volver para que te protejamos'

Lo siento señora, no puedo hacerlo — antes de que puedieran decir algo hablo de nuevo —Si vuelvo, entonces, ¿Quien los protejeria? Capturaron a los paladines— soltó un suspiro — Se que soy una niña, pero si puedo hacer algo lo haré. Pero si vuelvo y me quedo de brazos cruzados no habrá esperanza para la humanidad, por eso, por favor, por favor, déjenme ayudarlos — suplicó

Una discuesion breve sobre la moral y las leyes se hizo presente antes de que un suspiro general se produciera y hablarán otra vez —'Bien Kella, puedes ayudarnos, pero siempre y cuando escuches todo lo que te mandemos ¿entendido?'— respondió la mujer

—¡Si!— exclamó— Muchas gracias señora

La risa de la mujer se hizo presente — 'Soy Colleen Holt, puedes llamarme Colleen'





































~~•Sin corregir•~
1209 palabras
Publicado
17:53- 6 de junio 2019
Mistery

Tranquilos, sigo viva xd

Un pequeño secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora