Encantado por tu mirada

Capítulo 2: Su Mirada

A la mañana siguiente, me despierto muy temprano, ya había amanecido. Con mis ojos entrecerrados me meto a la ducha para luego vestirme y tomar mi mochila. Bajo al bar del hotel para buscar algo de desayunar. Estando allá, me sorprendo al ver a Liam en una de las mesas disfrutando de un café y unas rosquillas. Le miro de reojo, esta bañado, se ve fresco, casi casi reluciente, Impecable, se me hace raro no ver su actitud de fiestero ebrio que conocí ayer. Esta con los codos contra la mesa y las manos en el rostro. Compro un café y un pastelillo de manzana y me acerco a él para saber si su sentido amistoso y amable había sido efecto de los tragos o no.

— Hola, que tal?

Me mira fijamente intentando recordarme para luego desvelar una sonrisa cautivante.

— Mmm....eres Tyler verdad? — dice dudoso.

— Si, ese mismo.

Me observa sugerentemente a que me siente junto a él. Arrastró la silla y me siento.

— Oye, lamento... si lucí como un idiota ayer, no tengo buena suerte con el alcohol — sonríe burlándose de si mismo.

Desprende un delicioso aroma a perfume, parece un poco cansado. De repente suena su teléfono, se levanta de la mesa y me dice que aguarde un segundo. Lo observo de espaldas mientras habla. Tiene ambos brazos llenos de tatuajes, en el derecho tiene el retrato de un joven vestido de marinero y por encima otro con la palabra ''Rocco'', también una águila pintada en rojo con sus alas abiertas, un rostro femenino seguía por su antebrazo hasta su muñeca y se pueden distinguir algunas estrellas regadas por su otro brazo. Es musculoso y su piel es maravillosamente blanca y la adornan algunos lunares y pecas, su cabello luce tan bien peinado, con una chaqueta de cuero negra, unos vaqueros y botas negras y ya ni hablar de sus ojos tan extravagantes y atractivos que me dejaron pasmado al verlos por primera vez ayer. ¿Por qué parece que lo estoy analizando? Tengo que admitir que es encantadoramente guapo y amigable.

Termina de hablar, yo ya acabe con mi café y tengo solamente 10 minutos para llegar a mí entrevista a algunas calles de mi hotel así que me levanto de prisa para irme.

— Ya te vas? — me pregunta al verme tomar mis cosas y levantarme de la silla.

— Sí, tengo una entrevista para la escuela y voy algo tarde.

— Donde es?

— En la academia de artes visuales.

— Si quieres puedo llevarte, voy por ese lado.

Primero me invita a una fiesta a solo minutos de haberme conocido y ahora se ofrece a llevarme ¿Qué se ha creído este tipo?. No puedo negarme pues por estar admirando sus extremidades cubiertas de tinta el tiempo se me fue. Acepto. Caminamos hasta el estacionamiento y me señalo su auto, un Cadillac negro de la vieja escuela, con un largo capo y un diseño que parece haber sido sacado de alguna película de los 70's. Nos montamos y de camino a mi destino me empieza a meter plática.

— Entraras a la academia? — pregunta curioso.

— Eso intento, hago fotografía y también diseño, principalmente publicidad. — le contesto intentando parecer interesante.

No puedo evitar sentir su mirada a mi costado así que intento mirar al frente porque sé que si me giro no poder dejar de ver sus verdosos ojos.

— Espero que tengas suerte — dijo con empatía. Me lanza una sonrisa amigable y sus ojos se iluminaban con la luz del sol que pasa atreves el vidrio del auto.

No puedo negarlo, es encantador; Desde hace años que no admito mentalmente eso por alguna persona pero creo que hasta los ciegos, con el simple hecho de tocar su rostro y sentir sus delicadas facciones se darían cuenta de su belleza. ¿Me atraía? Un poco ¿Me importaba? No lo creo. ¿Haría algo al respecto? Definitivamente no.

Enciende el radio y empieza a sonar ''Jailhouse Rock'' del indiscutible Rey del rock n roll ''Elvis presley'', curiosamente esa es mi canción favorita desde que tenía 6 años cuando la escuché por primera vez en el auto de padre camino a pescar a las afueras de la ciudad. Empiezo a tararear la letra, el también, sube el volumen y empezamos a cantarla a todo pulmón, me dice que es su canción favorita de la vida, me quedo sorprendido de la curiosa situación.

Cuando finalmente llegamos, choque los puños y me deseo buena suerte con una media sonrisa y su mirada estival. Ya es tarde, entro corriendo directo a la dirección tratando de no resbalar en el encerado y puro piso bajo mis pies. Entro con un tiempo justo 8:00 am. Tardo como 1 hora ahí dentro, preguntas y más preguntas, hasta que me dicen unas palabras para nada alentadoras, ''Lo llamaremos luego'', mis sueños y esperanzas colapsaron como las torres gemelas que esta gran ciudad vio morir, una comparación cruel pero por demás acertada.

Vuelvo al edificio, me quito la ropa, y me meto a la bañera, un baño caliente despejara mi mente del estrés. Meto la cabeza bajo el agua, las imágenes de Liam, sus tatuajes que me habían fascinado a pesar de que irónicamente no soy fan de ellos, su barbar perfectamente cortada y alineada y que decir de sus cautivantes ojos verdes se colaron entre mis pensamientos. ¿La razón? No la tengo clara pero la relacionaba al hecho de que ha sido tan amable conmigo que siento que podríamos llegar a ser buenos amigos hasta que empiezo a tonarlo a un lado más sexual. Mí hasta ahora oculto lado gay o bisexual ha salido a relucir en mis pensamientos. 

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