Capítulo 26: Deseos peligrosos

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Alrededor de nosotros hay una decena de personas haciendo diferentes cosas. Unos con las luces, otros con las cámaras, otros con la escenografía y vestuario, se siente como estar a la orilla de una celebridad. Hoy es la sesión de fotos de Liam para su artículo en Forbes y además de eso tiene una conferencia de prensa antes del almuerzo. Todo está casi listo en una sala de conferencias que la revista reservó especialmente para él. Estoy sentado en una silla mientras espero que llegue. Después de un rato aparece y al dar la vuelta lo miro caminar elegante, fresco, guapo, inmaculado y gloriosamente atractivo y un placer sin fin a la vista de las personas que estamos observándolo. Lleva puesta una camisa blanca abierta desde la parte superior de su pecho y sobresale ligeramente su vello corporal; Solamente recuerdo la primera vez que lo hicimos en su apartamento secreto y pase mi lengua sobre él desde su abdomen hasta su cuello. Sus pantalones grises y sus zapatos negros brillantemente lustrados, su pelo peinado hacia atrás, siempre con volumen y sedoso y ni hablar de su barba perfectamente cortada y esos hipnotizantés ojos verdes, todo en él se ve perfecto. Doy un suspiro enamoradizo mientras se acerca hacia mí.

— ¿Cómo me veo? — me pregunta.

Como esculpido por los dioses del olimpo.

— Te ves bien. Pareces estar nervioso, ¿Es tu primera sesión?

— No lo es, he hecho muchas pero esta es la más importante, es para Forbes, una de las revistas más importantes del mundo — dice, con voz quebradiza. Noto como su mandíbula tiembla de los nervios.

Lo tomo discretamente de la mano y la acaricio con mi pulgar mientras mis dedos están pegados a su palma.

— Estarás genial, confía en mí — le digo y le guiño el ojo.

Sonríe de oreja a oreja y me guiña el ojo también.

Empieza la acción.

Se posa frente a las cámaras como todo un profesional y cambia de pose entre cada parpadeo con el flash. Esta espectacular. No puedo evitar sonreír cuando lo miro, jamás terminare de entender como este chico me domina de esta manera. Liz esta junto al camarógrafo coordinando todo y Katherine observa sentada en una esquina. Liam se mueve con tanta naturalidad y hasta parece estar cómodo, nada parecido como hacer algunos minutos cuando casi se derrumbaba del susto. Es todo un modelo nato y como no, con ese cuerpo y esa cara tan bien parecida, no me sorprendería que decidieran darle la portada en vez de un par de páginas.

Pasan casi 2 horas y finalmente termina la sesión.

Camina hacia mí con un expresión un poco exhausta y se sienta a mi lado.

— Estuviste increíble, Liam.

— Gracias. Es más cansado de lo que parece. — se limpia el sudor de la frente con un pañuelo y recuesta su cabeza hacia atrás intentando descansar.

— Todavía tienes la conferencia de prensa en dos horas. — le digo. Se golpea la frente con la mano y arruga los ojos. — Mierda, cierto!

Se acerca a mi odio y empieza a susrrarme.

— Cuando todo esto termine, esta noche, quiero que vallamos a mi habitación, quiero que me tires a la cama, que me quites la ropa poco a poco mientras me acaricias, que me empieces a besar todo el cuerpo, quiero tocarte y meter mi dedos en donde pueda y luego te quiero encima de mi toda la noche.

Sus eróticas palabras hacen que se me pongan los pelos de punta y me estremezco. Su mazo comienza a colarse sobre mi avanzando suavemente hasta el área de la cremallera de mi pantalón. Mi respiración esta agitada, tanto que tengo que salir a tomar aire al pasillo para esconder mi visible excitación.

Encantado por tu miradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora