PARALYZED 《Kookmin》

#5

Allí estaban aquellos ojos azules mirándome atentamente una vez más, allí estaba Jungkook, ese estúpido robot, sentado en el césped mientras yo me sumergía en el agua de la piscina, sabía perfectamente que no era un humano pero no por eso dejaba de ponerme nervioso con su presencia, con su actitud extremadamente amable, lo que me hizo preguntarme el porque papá lo desactivo en primer lugar.   

—Jungkook te haré una pregunta -dije nadando hacía el orilla recargando mis antebrazos en la cerámica, quedando cerca de el-

—  Puedo responder lo que sea, fui programado para responder a humanos -fue su respuesta, entonces decidí continuar-

— ¿Por qué te desactivo mi padre? ¿hace cuanto fue eso? mmm... ¿en qué se basó para crearte? -pregunté, dudando en si continuar haciendo más preguntas-

—¿Solo eso? -preguntó una vez termine de hablar-

—Si, solo eso, por ahora...

— El Señor Park creó el primer prototipo hace hace 35 años -comenzó, mentalmente calcule la edad que tendría mi padre en 1984, me sorprendió darme cuenta que mi padre tenía 23 años en ese tiempo,justo mi misma edad- mi finalización fue 3 años después, en 1987, pero dos años después tuvo que desactivarme ya que los seres humanos al parecer no estaban preparados para tal avance en la ciencia, quisieron experimentar conmigo, usarme como un arma debido a la ausencia de sentimientos en mi, pero el Señor Park no estuvo de acuerdo y decidió desactivarme, ocultándome de aquellos que buscaban utilizarme... -hizó una pausa, lo cual aproveché para intentar comprender toda esa información, ahora comprendía la reacción de padre- y sobre mi apariencia o en que se basaron en crearme, eso solo lo puede responder mi creador, yo desconozco la razón

— Tu... ¿hubieras permitido que experimentaran contigo? ¿aún sabiendo lo doloroso que sería? lo que los seres humanos son capaces de hacer puede llegar a ser realmente aterrador... 

— Yo no siento dolor, hubiera aceptado la decisión que el Señor Park tomara, el decidió protegerme aún cuando lo amenazaron con quitarle todo en lo que había trabajado durante años, le ofrecieron dinero, riquezas con las que cualquier humano soñaría -guardó silencio por unos segundos, esos hermosos ojos dirigiéndose hacía mi- Jimin-ssi... ¿por qué hizo algo así? no es razonable que me escogiera 

Guardé silenció sin saber que responder, ciertamente no tenía la respuesta a aquello, lo que me hizo darme cuenta de lo mucho que desconocía de mi propio padre.

Y así,sin más palabras entre nosotros fue como pasó el resto de la tarde.

Para cuando anocheció, mamá se encontraba algo demasiado estresada, corriendo de aquí y allá, asegurándose de que cada lugar de la casa luciera impecable para la cena, por lo que en cuanto nos vio a Jungkook y a mi completamente desordenados,nos mando a base de empujones a cambiarnos de ropa, mamá había acogido a Jungkook bastante rápido, lo trataba como si fuera su hijo, podría jurar que a veces lo trataba mejor que a mi, incluso parecía olvidar que el era un robot, a pesar de que papá se lo había explicado ella no lucía para nada sorprendida, el sorprendido fui yo, cuando Jungkook se presentó ante ella y mi madre solo había atinado a llorar aferrándose al cuerpo del robot.

—Puedo ayudarte con eso si quieres -dijó una vez más Jungkook, luciendo extremadamente cómodo sentado en mi cama vestido con aquel traje azul ciñéndose perfectamente a su cuerpo, mientra observaba mis intentos de atar mi corbata-

— Por décima vez, Jungkook, puedo hacerlo solo -lo cierto es que llevaba incluso más de diez intentos, o el nudo quedaba mal, o una parte quedaba más larga que la otra, estaba seguro que si continuaba intentando la corbata quedaría incluso más arrugada de lo que ya estaba, además de que podía escuchar voces en el piso de abajo, era claro que los invitados comenzaban a llegar y eso significaba que tendríamos que bajar a saludar- está bien... ayúdame