Cap. 46

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Narra Jaehyun.

El sábado por la noche recorrí la casa de la fraternidad con los ojos un millón de veces, pero no la vi por ninguna parte. Está aquí, pero no vino. Aunque está aquí, en California. Mi ______ ha vuelto a California. Y estoy empleando hasta la última gota de mi autoestima para no ir corriendo hasta su residencia como si me ardiera el culo. Porque, como dijo Rosé, probablemente acabaría empotrándola contra la pared y eso no puede ser bueno.

Estoy en clase de Literatura, me tiembla la pierna y mis ojos vuelven a recorrer la clase. No puedo evitarlo. No apareció antes de marcharse. Quiero que lo sepa. Necesito verla. Se abre la puerta y entra Chan. Cruza la clase y se sienta a mi lado.

-Ya viene.

Asiento y clavo los ojos en la puerta. Si ya viene debería estar aquí en... Ya. Ya está aquí. Rosé tiene el brazo entrelazado con el suyo, pero _______ sonríe. Es una sonrisa débil y me odio a mi mismo por ello. Me agarro con fuerza del escritorio y aprieto los dientes. Chan me da una patada. La melena de ______ le oculta el rostro y no puedo verle la cara. Ella se sienta sin establecer contacto visual conmigo. En realidad no ha dirigido la mirada hacia esta zona en ningún momento y no puedo fingir que no me duele porque sí, me hace daño.

La miro durante toda la clase en lugar de prestar atención. ¿Cómo voy a concentrarme en algo que no sea ella? ______ es lo único que existe para míen este momento. Lo único que existe es todo lo que podría y debería haber entre nosotros. Cuando termina la clase me abro camino hacia su mesa y las alcanzo cuando se marchan. Chan niega con la cabeza, pero me da igual. Tengo que hablar con ella.

-Rosie. -Le hago un gesto con la cabeza y luego miro a la persona a la que he venido a buscar en realidad. -_______.

Ella mira hacia delante pegándose un libro al pecho.

-Jaehyun-dice en voz baja.

-¿Qué tal por Brooklyn?

-Pues... bien, gracias. ¿Cómo estás?

-Estoy... -Capto la mirada de advertencia que me lanza Rosé -Supongo que estoy bien.

Ella asiente con suavidad.

-Tengo que...

-Claro. -Les abro la puerta de la clase y me dan ganas de arrancarla de las bisagras. -Nos vemos luego.

-Sí, nos vemos. -susurra, y se marcha a toda prisa. Rodé me mira mal y me señala con el dedo.

-Era lo último que necesitaba -sisea.

-Necesitaba verla, Rosie. -La miro a los ojos y se le enternece la mirada. -Necesitaba hablar con ella. Está... Está bien, ¿verdad?

Suspira y se le relaja todo el cuerpo. -No sé qué pretendes que te diga, Jae. Pero si te hace sentir mejor, sí, está bien.

-¿Y si no me hace sentir mejor?

Aprieto los dientes. -En ese caso sigue estando bien.

Se da media vuelta y corre tras _______.
Se me escapa un sonido de incredulidad y enfado. Chan agarra la puerta para impedir que la cierre de un portazo y me lanza una mirada penetrante. Pues sí, todo lo que tiene que ver con _______ me vuelve un poco loco. Evito la cafetería como a la peste porque sé que ella estará allí. Verla ha sido más doloroso de lo que creía. Y en vez de ir como hago normalmente, vuelvo a la casa de la fraternidad. Dejo la mochila en el suelo y me tumbo en la cama entrelazando las manos detrás de la cabeza.

Tenía grandes planes para conseguir que hablara conmigo. Estaba decidido a lograr que me escuchara y que comprendiera que la quiero, pero entonces... La veo y todo eso desaparece porque ya no quiero hablar con ella.

Quiero agarrarla. Quiero abrazarla y acariciarle el pelo. Quiero besarle las comisuras de los ojos y no soltarla jamás. Porque es mía. Maldita sea, Kim _______es mía. Y punto. Es mía y siempre lo será.

Ella siempre será mía y yo siempre seré suyo.

El Juego del Amor |Jaehyun NCT & Tú|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora