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18. mala espina.

Terminé de escribirle el mensaje a Olivia, diciéndole que después le iba a contar todo lo que había ocurrido en la cena. Porque sí, había aceptado venir después de tantas insistencias por parte de Mateo sumándole pucheros a las mismas, guarde el celular en mí bolsillo y me puse las manos en los bolsillos de mí campera, todavía los chicos no habían llegado o por lo menos los más cercanos a mí.

Miré por el escaparate de la pizzería a la gente comiendo y charlando al igual que riendo y tomando de algún tipo de vino o cerveza ya que la mayoría de la clientela era mayor.

Una risita me hizo dejar de prestar atención para darme la vuelta encontrandome con el ojiazul, quién me estaba mirando con una sonrisa de oreja a oreja, cosa que me contagió.

—¿De que te reís?—pregunté mirandolo demasiado contenta, Valentín era un chico que me transmitía mucha paz y buena vibra apesar de no haber hablado mucho con el, era lo que sentía cada vez que estaba cerca y sin dudas era capaz de alegrarme el día. Me acerque a él para depositar un sonoro beso en su cachete y lo volví a mirar—¿Todo bien?

—De como mirabas a la gente, re concentradita. Estabas tierna, no sé—se encogió de hombros con una sonrisa todavía y luego de eso le dio una mirada rápida al restaurante—Bien, ¿Y vos? ¿Los chicos no llegaron?

Me encogí de hombros e hice una mueca, que por lo que se ve eso le causó gracia a Valentín, porque soltó una gran carcajada y no dude ni dos segundos en unirme ya que tenía una risa muy contagiosa. Hasta que en una de esas el castaño se dejó de reír, cosa que me dejó bastante descolocada por su cambio de semblante pero luego se eso, me hizo una señal con los ojos y me di la vuelta encontrandome a la parejita, quién venía hablando y riéndose además de agarrados de la mano.

—Tu mejor amiga—anunció el castaño y me giré para mirarlo con cara de corto haciendolo reír, para luego acercarse a mí y abrazarme por los hombros—Sabes que te jodo Lolita, vos sos mejor.

Sonreí como tonta al escuchar como me había llamado y me giré para mirarlo y sonreírle sin mostrar los dientes.

La pareja se acercó hasta nosotros y el primero en saludarme fue Mateo con un beso en el cachete y como de costumbre, me revolvió el pelo para luego saludar a Valentín y ahora la que me vino a saludar fue la rubia, quién estaba con un jean tiro alto y un top.

—¡Hola Loli, un gusto, soy Cata o Cati cómo quieras!—me saludó bastante exaltada la chica además de que tenía una voz bastante irritante.

¿Loli? Perdón ¿Qué?

¿Quién se creía que era para decirme así? Solamente lo hacía gente muy cercana o a gente que se lo permitía.

—Lola para vos—corregí, ignoró mí comentario y se acercó para darme un beso baboso en el cachete provocando una mueca por mí parte—Y ni Cata ni Cati, para mí sos Catalina.

—¡Sos re linda Loli!—acotó otra vez exaltada y antes de que pudiera corregirla de nuevo, el brazo de Valentín rodeo mis hombros y me atrajo hacia el.

—Te la robo un cachito Cata, le tengo que contar algo—habló el castaño y ella le sonrió para después asentir e irse con Mateo adentro del restaurante, donde ya estaban algunos de los chicos—¿Te podes relajar? De acá a la china se te nota que te cae para el orto, sos muy demostrativa con tus caritas me parece a mí, eh.

Lo miré y estaba con una sonrisa divertida, me mordí el labio porque hasta diciendo que tenía cara de orto me encantaba y me encantaba la forma en la que la decía, ya que lo decía con la mejor onda del mundo.

—Mi parte favorita fue cuando te dijo Loli, si te hubieras visto la cara, eras un meme—continuó el ojiazul, me reí un poco y le di un empujón—Dale una oportunidad, aunque tenga voz de pito pero de eso no tiene la culpa ella, che.

No, tiene la culpa de existir.

—No es eso, me da mala espina porque las personas que tienen un carácter así son las peores, son de esas que van re de amiguitas y te la clavan por la espalda, pero si es lo que elegio Mateo...—argumenté encogiéndome de hombros—Y bueno, en parte su voz también tiene que ver, me da un cringe.

El ojiazul se rió por mí comentario y después de estar hablando por un rato más, obviamente tranquilizandome y animándome también me preparé física y mentalmente para aguantar a aquella flaca por un par de horas.

Ni bien entramos al restaurante, me acerqué a cada uno de los chicos para saludarlos con un beso en el cachete y luego busqué un sitio para sentarme justamente entre Valentín, quién ya se había sentado y estaba charlando con algunos chicos y al lado de Mateo, cosa que agradecí internamente porque no quería estar al lado de Catalina.

—Voy al baño.

Agarré mí mochila, ya que tenía el neceser de maquillaje y un par de cosas más, además de que me estaba por venir y quería estar al tanto. Entre en un cubículo e hice mis necesidades para después salir y lavarme las manos, me asusté cuando sentí una presencia detrás mío, levanté la vista para mirarla a través del espejo; Catalina.

—Vos y yo vamos a aclarar un par de cosas, ahora.








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se las dejo picandOOOOO
No me odien porfa ahre.

sale un chape entre Valen y Lola AHRE PEDOFILO pero ustedes que dicen (?)

que sepan que metí a unidos en el concurso de wattys2019 no sé si hice bien pero por lo menos lo intente, la esperanza es lo último que se pierde (?)

Diganme que opinan de la novela, les gusta? Cambiarían algo..?💗

unidos ; truenoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora