THE RED KEY (MIDNIGHT RED)

21.- Que comience el juego

6 AM.

-Emily, saca tu culo de ahí.-Refunfuñó Eric al otro lado de la puerta.

Me levanté en cuanto lo escuché. No iba a abrirle la puerta, ya que estaba notoriamente enfadado por no haber compartido mi plan con él. Tampoco me dio tiempo, lo hice sin pensar, y tal vez sea esto lo que nos lleve a la ruina o a la misma muerte, pero si no arriesgo, me quedaré con la duda. Prefería morir enfrentándome al enemigo, antes que morir por cobarde con los brazos cruzados.

-¿No me abres?-Dijo aún más molesto.

-Si vas a gritarme, me parece un poco inútil abrirte para acabar discutiendo. Es lo que menos necesitamos ahora mismo.-Dije, haciendo como si todo esto fuera obvio.

-Lo que me parece inútil es que vayas a irte con él.-Bajó el tono.-Y que me dejes solo.

-Estaré bien.-Y sabía que ni yo misma había sonado convincente. Mucho menos para él.

-Dime lo que tengo que hacer. Porque no voy a dejar que saques a las chicas tú sola. Vas a morir y yo no habré hecho nada. No me parece justo, Miller.

-Ya dije que si alguien caía iba a ser yo. A mí me parece justo morir por tres personas en las que se incluyen a nuestras hermanas y a mi mejor amiga. No es una tontería.

-Cuéntame lo que piensas hacer.

-Por ahora, me esperan a las ocho en el Ayuntamiento de Virginia.

-Genial...-Dijo irónico.-A las siete y media te quiero en la puta puerta.-Y supe que esas palabras nos dolieron a los dos. Y que tal vez, esta fuera nuestra despedida.

Ahora mismo, me daba igual Secharia. O tal vez vez sólo quería aparentar eso ante los demás. No tenía muchas esperanzas de que mi plan saliera según lo previsto, pero al menos lo iba a intentar.

A las siete y media fui en busca de Secharia para que me llevara al Ayutamiento de Virginia, donde después de casi ocho meses vería a mi padre, ahora sabiendo toda la verdad y sus negocios. O al menos, la verdad que me había contado Eric.

Bajé las escaleras, pidiéndole a Dios que nada malo me pasara a mí ni a ninguno de mis seres queridos. Y entonces me acordé de mi pobre madre, que seguro que no estaba enterada del asunto.

En la puerta del hotel, me esperaba un Eric más que enfadado, dolido, triste. ¿De verdad confiaba tan poco en mí?

''Tu plan es un poco suicida, ¿no crees?''

Cállate, Emily, no es momento de echarse atrás.

Me subí al coche con Eric y con mi maleta, la cual pesaba más que una manada de ñúes.

La carretera estaba tranquila, aún era temprano para que Virginia se llenara de coches y gente estresada y malhumorada. Pero Eric era la excepción que confirmaba la dichosa regla. Estaba que echaba humo, literalmente, ya que fumaba por la ansiedad que yo sabía que sentía en casos de extrema delicadeza y peligro.

Siempre le obligaba a apagarlo cuando éramos adolescentes y estaba conmigo en el patio de casa. Ahora es mayor y no soy nadie para decirle tal cosa. Y menos hoy.

La triste realidad era que yo también tenía asumida mi muerte. Lo que me asustaba era pensar en la forma en la que me matarían.

En media hora totalmente silenciosa, llegamos al Ayuntamiento. Y cuando Eric aparcó en una calle de al lado, recibí un mensaje de mi ''querido'' padre:

''Cariño, ya te veo, baja del coche. No tengas miedo, nadie va a hacerte nada''

Me despedí de Eric como supe, pero no me fui sin decirle que le quería y que me esperara.

-Miller.-Me giré.-No dejes que te maten fácilmente, y si vas a morir, asegúrate de que las chicas llegan vivas a nuestro hotel. Te quiero.-Me besó con fuerza y me abrió la puerta para que saliera. Se colocó sus gafas de sol y yo salí decidida de aquel coche.

Que comience el juego.

Vi el coche que Nick me mencionó en el mensaje. Cristales tintados, negro entero. El conductor bajó la ventanilla, me miró de arriba abajo y me hizo una señal para que me montara en el coche.

Hice exactamente lo que me pidió. Me monté en el coche y no había más que dos guardias y el conductor.

-¿Dónde está mi padre?-Pregunté con rudeza.

-No te impacientes.

Lo voy a dejar aquí mientras pienso y escribo tranquilamente el final y veo si hay segunda temporada. Espero que os guste y que poco a poco, toda la gente que me leía antes, me vuelva a leer. Sabemos que MNR ya no es el grupo de moda y que habrá poca gente que entre a Wattpad para buscar fics de ellos, pero yo estoy contenta con la novela y espero lo mismo de vosotrxs. Un beso, A xx.