THE RED KEY (MIDNIGHT RED)

Tiroteo en París (Parte ll. Final)

‘’Eric, estoy en la Torre Eiffel. Hay unos diez guardias, creo que son de mi padre, no han dejado de mirarme’’

‘’Corre’’

‘’¿Qué?’’

‘’EMILY CORRE. VETE DE AHÍ YA SI NO QUIERES MORIR JODER’’

Colgué y corrí con todas mis fuerzas. Alguien me seguía, y sabía que todo acababa aquí. Estaba llorando, no podía correr más. ¿Qué había hecho? Yo no quería esto. No quiero estar aquí.  Algo me rozó el brazo, y ahí dejé de correr. Aunque nadie me seguía ya.

No puedo respirar. Me mareo. Mis pulmones arden, al igual que mis rodillas. Mis ojos duelen, seguro que están rojos de tanto llorar. Estoy tirada en la sombra de una casa abandonada, a pocas calles de la nuestra y sangrando. Me habían disparado, aunque la bala sólo me rozó el brazo, por lo que supongo que sólo tendré que ir al hospital a que me pongan cuatro puntos. ‘’Llamando: Secharia’’

‘’Eric’’

‘’Emily’’

‘’¿Qué pasa?’’

‘’¿Estás bien?’’

‘’¿Tú que crees?’’

‘’¿Estás llorando?’’

‘’No sé, dímelo tú’’

‘’Estás llorando’’

‘’Qué novedad, ¿no? La misma imbécil y débil de 16 años llorando a todas horas’’

‘’Eres una de las personas más fuertes que conozco’’

‘’Eso no cambia nada’’

‘’Eso lo cambia todo’’

‘’Eso no cambia que me hayan disparado y esté tirada en una casa abandonada’’

‘’¿¡QUÉ?!’’

‘’Ya voy a casa. Espérame’’

Y colgué. No quería escuchar ni una sóla mentira más. Me acababan de disparar, por el amor de Dios. Y cómo dolía. Aunque no sabía si lo que me dolía era el brazo o el corazón. ‘’Otra vez llorando. Me cago en Dios’’

Abrí la puerta de casa como pude, ya que tenía el brazo derecho totalmente dormido.

-Emily.-Dijo con voz ronca. Le sonreí, ya no sabía ni lo que hacía.

Caí al suelo por el dolor, no podía más. Este había sido el peor día de mi vida. Creo que Eric llamó a una ambulancia. Tampoco era para tanto, ¿no?

-Emily, te han disparado. Veo la bala desde aquí.-Y yo creyendo que sólo me había ‘’rozado’’.

DOS  SEMANAS DESPUÉS.

Volvía a casa, sola. Aún tenía el brazo herido, me tuvieron que operar. Esta última semana en especial, había sido dura. Habíamos vuelto a llamar a Ari para contarle que me dispararon, para preguntarle qué había hecho papá, y cómo estaba ella. La última pregunta la respondió llorando. Y cada vez que la oía llorar, me replanteaba el hecho de estar aquí con mi secuestrador. Eric últimamente estaba algo distante, aunque no dejaba de cuidarme. Ha estado unos días fuera, otra vez. Aunque esta vez me ha dicho su propósito: Buscar a mi padre. Lo hubiera detenido, y de hecho lo intenté un par de veces, pero hasta esta mañana he estado postrada en una cama de hospital. Mis palabras no bastaron para que se quedara a mi lado, y eso me dolía. Me mataba el hecho de que me dijera cosas tan bonitas a veces y que luego no pudiera estar conmigo cuando le necesitaba. Pero total, con él siempre pasaba. Aunque esté a tu lado, parece como si no lo  estuviera. Aunque visto así, parecía que yo necesitaba mucho apoyo y amor. Nada de eso, yo me bastaba conmigo misma. Hasta que volvió después de tres años y medio sin vernos. Aún no habíamos hablado de lo que me dijo antes de irme de casa y que me dispararan, aunque tampoco hacía falta. Sólo quería olvidar esas palabras, y lo peor es que no podía. No podía quitarme de la cabeza todo eso, y es que es de locos mudarte a Francia con un chico que según él, tu padre es un mafioso asesino, pero eh, que él te secuestró. Supongo que él tampoco habrá sido un ángel desde la última vez que le vi. De hecho, no lo es.

Hola!!! Siento haber tardado. Mis notas han sido desastrosas y he estado toda la Navidad aislada. Como recompensa, hoy subo tres capítulos:) 

-Andrea xx