Con sed de ti.

Capítulo 5

Narrador omnisciente
-Sabe lo que le falta señor para tener los poderes que le heredó su madre - decía uno de los súbditos más leales a la causa.

El azabache que traía cientos de voces en la cabeza, lograba concentrarse en una décima lo que decía su compañero de las sombras más fiel.

-¿Por qué a ella? Habiendo millones de chicas en este absurdo planeta -murmuraba con cierto enojo, tirando su copa.

-Por que ella fue marcada, por el demonio mayor hace tiempo, su hermano, amo Marshall - el azabache mirada por el ventanal de aquella casa, que ya se estaba convirtiendo en su hogar - y como él no completo el rito, lo debe terminar usted para tener los poderes de su madre.

Recordando  aquella chiquilla pelirroja, hacía tiempo que no la veía, años, 4 para ser preciso, las miles de voces en su cabeza gritaban "mátala" "acaba con el trabajo" mientras que el sabor de sus labios seguía vivo en sus labios.

Irónico la volvió a marcar con ese terrible sello hace 4 años y ella lo marcó a él con sus labios, hasta entonces, Marshall ha tenido esa sensación, que ninguna de las mujeres con las que ha estado en este tiempo le ha logrado quitar.

-Solanche - murmuraba una y otra vez sentándose en el sillón con cierto pesar, se reía de su propia suerte. Ese beso que lo marcó, ni siquiera era para él, era para Kylie - tendré que terminar el trabajo de mi hermano - mirando la daga que estaba arriba de la chimenea.

Narra Solanche

Se percibía la tensión en el ambiente, todos estaban hostiles, yo no podía con la presión, me di la vuelta dispuesta a irme, pero sentí los brazos de Dimitri detenerme.

-Tienes que checar esa calificación, Ma Rouge -me refugié en sus brazos, nada más hostil que checar las calificaciones finales en el tablero - Tu puedes - dándome un beso, mientras le daba mis cosas.

Suspiro, era la última calificación para ser libre de tercer año y poder decir "ya voy al último año de la carrera" me hice paso entre todos mis compañeros, observar la lista de las matrículas con las calificaciones, me produjo náuseas, ver a todos llorando o angustiados, muy pocos estaban sonriendo.

Hasta que vi mi matrícula, corrobore una vez más que se tratara de la mía, antes de observar mi calificación, sonreí al ver ese 7.

-Lo hice- murmuro en los brazos de Dimitri - la pase.

-Ahora si podrás ir con tus hermanos y decirles que estás en el último año de tu carrera, Ma Rouge.

Tomamos el último vuelo para llegar en la mediodía a mi casa... no se como le voy a explicar a Dimitri, que mi familia son hombres lobo.

Había vuelto a casa después de 4 años, suspiro y tomo la mano de Dimitri, estampas en la sala de espera de llegadas internacionales.

-Te ves nerviosa Sol, tranquila, es tu familia - con una sonrisa dándome un beso en la frente, lo abrace.

En eso escucha como carraspean la garganta, me separo de Dimitri para ver a mis hermanos, estos 4 año les habían sentado muy bien, tenían un aspecto más maduro, me separé y fui directo a abrazar a Sander y Aaron.

-Hermanos - susurro y cierro los ojos - realmente los extrañe -unas lágrimas rodaron por mis mejillas, Aaron me abrazo, seguida de Sander.

-Nosotros también te extrañamos - hablo Aaron al separarse, podría jurar que vi su mirada cristalina, en eso ve a Dimitri - ¿así que tú debes ser...?

-Dimitri Ritchie-extendió su mano - Soy el novio de Sol.

-Así que tu eres el famoso Dimitri, un gusto conocerte al fin -decía dándole la mano, mi hermano Sander- Soy Sander, San para los amigos, aquí él
que tiene la cara de enojado, es Aaron, no le hagas caso.

En eso Aaron esboza una sonrisa y suspira - un gusto Dimitri, soy Aaron Morgan.

Eso no fue tan difícil como pensé, una vez en la camioneta estábamos como en los viejos tiempos, Aaron conduciendo, Sander a su lado. Sonreía al ver a Dimitri viendo por la ventana como niño pequeño.

Al llegar a la casa vi algo que me sorprendió, en la sala estaba el cuadro de los tres lobos, mi hermanos y mi loba.

-No eres la única que se le da el dibujo Sol- me decía Sander y al ver su firma en el recuadro inferior, él la había pintado.

Sonreí al ver esto, al mismo tiempo que me conmovió - es perfecta Sander - murmuro con una sonrisa.

-Anden vayan a descansar, tuvieron muchas horas de vuelo - decía Aaron cerrando la puerta junto con mi novio- en la noche tenemos fiesta, será sorpresa para la manada.

-¿la manada? - con curiosidad decía Dimitri.

-Así le llaman mis hermanos a la familia - tomándolo de la mano, llevándolo al segundo piso, antes de que a Aaron se le escape otra cosa- Vamos a descansar Dimitri - dándole un beso.

-¡Tú novio dormirá en el cuarto de huéspedes! - escuche gritar a Aaron, suspiro y Dimitri me besa con una sonrisa.

-¡De acuerdo! - Grite y le acarició las mejillas a Dimitri, me había acostumbrado a dormir con él.

Después de mostrarle a Dimitri el cuarto de huéspedes y que él prometió venirme a visitarme en la noche. Entre a mi cuarto y observé cada detalle de ella, estaba igual a como la había dejado hace 4 años.

Observe las fotos y me encontré una con Kyile, hacía tiempo que él ya no ocupaba lugar en mi mente.

Estaba lista para volver a este mundo, aunque sea solo el mes que esté aquí,