Estar encerrado en mi cuarto me estaba matando, era como si el oxígeno no fuera sano y estar aquí tampoco, como un mosco encerrado con un araña gigante, volando intentado sobrevivir y mis alas en este caso eran Brais y Dereck. Con quienes estaba en este momento.
— El celular no es todo en la vida Dorian — Brais era un tanto hippie, amaba la naturaleza y esas mierdas, por eso mismo mi adicción al teléfono lo frustraba.
— En realidad si tengo toda mi vida ahí — ganarme no sería fácil, ví una serie de abogados con 124 capítulos.
— Brais tiene razón — genial, ahora el fuck boy perfecto estaba en mi contra.
— Ninguno de ustedes tiene razón — dije levantandome de la cama para salir del tribunal. — Y yo me declaro inocente — les guiñe un ojo y salí de la habitación dejándolos solos.
Han pasado dos días desde el trato con Brais y la verdad era que aún no sabía bien como saber si Dereck era gay, si se tratara de esteriotipos definitivamente no sería gay, pero hay algo en él que me dice que si, ¿instinto gay? Tal vez, ¿Su manera de ver a Brais? Me parece mejor opción.
— ¡Hey! ¡Imbécil! ¿Te quedarás todo el día ahí o puedo bajar? — amo la sutileza de mi hermana.
— Adelante — me hice a un lado — Cara de renacuajo — susurré cuando estaba bajando pero si me escuchó.
— ¿Qué dijiste adoptado? — preguntó acercándose a mí.
— Al menos fui planeado — sonreí con malicia.
— Tus argumentos parecen de niño de primaria.
— Tu trasero parece de niña de primaria — su boca hizo un circulo.
Sin decir más, desapareció de mi vista.
— Así que ofendiendo el trasero de tu hermana he — Harry había aparecido de la nada detrás de mi, por la nada me refiero a mi trasero plano.
— No creo que eso te importe — sonreí — ¿Por qué no buscas algún gay a quien molestar? homofóbico de mierda — intenté pasar por su lado pero me detuvo.
— ¿Qué crees que hago? — sus ojos mostraban tanta seguridad que en ese instante deseaba reventarle las pelotas.
— Eres tan imbécil que siento miedo de que me contagies — ahora sí pasé por su lado.
— ¡Es genial que lo gay no se contagie! — escuché a lo lejos cuando entré a la habitación de Dereck.
— ¿Huyendo de Harry? — preguntó Dereck cerrado el libro entre sus manos.
— Algo así — alcé los hombros.
— Llevas tres días así Dorian, no creo que sea sano — se levantó para abrir la ventana, tiene un trasero enorme que jamás había visto.
— He huido de los homofóbicos por diecisiete años Dereck, puedo por dos meses — guiñe un ojo pero no me di cuenta de lo pendejo que fui diciendo eso.
— ¿Eres gay? — preguntó con más atención de lo normal.
Me quedé pensando, había dos opciones, podía negarlo y quemarme yo solo con lo caliente que me hacía sentir Harry, o podía decirle que si y podría contarle lo sexy que es Harry mientras quiere asesinarme. Aunque si termimara siendo un estúpido como Harry mi verano estaría realmente arruinado y me quedaría con un solo amigo hippie. Pero existía la mínima probabilidad de que si fuera gay y consiguiera una cita para Brais. Voto por la segunda opción.
— Si — solté con un suspiro — Pero no se lo digas a nadie, mucho menos a Harry.
— ¿Estás en el clóset? — estaba nervioso por su actitud pero era muy difícil de descifrar.
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¿Otro gay?
RomancePara Dorian Fernsby su vida entera era su teléfono, internet y llamadas. Por ello se había separado totalmente de su familia y por eso mismo su padre ha organizado unas vacaciones en una cabaña fuera de la ciudad, sin internet, sin llamadas. Rober...