[Dorian]
Quise evitar sentir un escalofrío en cuanto más cerca estábamos de la ciudad.
— ¿Estás bien? — me preguntó Paige.
— Si, estoy nervioso — confesé.
— ¿Por qué? — preguntó.
— Ustedes son las únicas personas que saben que soy gay, tengo nervios de decirle a Sydney o William — jugué con las cintas de mi short.
— No tengas miedo, sé que no soy la indicada para decirlo — comenzó a susurrar por miedo a que mis padres escucharan — Pero tú tienes alguien por quién hacerlo, alguien que te da fuerza, yo sé que puedes — Paige parecía otra persona.
Papá se detuvo y me asusté pues creí que algo había pasado en el camino o al auto.
— Antes de llegar a casa quería hablar un poco con ustedes — dijo papá girandose en su auto.
— No hemos hecho nada — dijo Paige al instante
— Lo sé, lo que quiero decir es que bueno, sé bien que ellos obligué a venir, sobre todo a ti Dorian, pero como les dije antes de irnos esto fue para lograr un lazo entre nosotros, a veces no nos entendemos de la mejor manera pero siempre voy a intentarlo, lo prometo — papá parecía sincero.
— Creeme papá, que nunca me había sentido tan seguro con ustedes que cómo fue este verano, de verdad me ayudaron como no tienen una idea — no pide evitar abrazarlo.
— Estamos a dos calles de la casa y espero que llegando ahí todo esto no cambie y que lo que aprendimos nos siga todo el tiempo — encendió en auto de nuevo.
Avanzamos más últimas calles antes de llegar a casa, parecía bastante extraño y diferente volver ahí, parecía que había desaparecido por años cuando solo habían sido dos meses.
Hugo comenzó a removerse en su asiento al oler nuestro hogar tan cerca.
Cuando llegamos había dos personas afuera de nuestra casa y me incorporé para poder ver mejor.
Entonces me di cuenta que eran William y Sydney quienes sostenían un cartel enorme con un "Bienvenido".
Bajé del auto y la sonrisa de Sydney me recibió enormemente, abracé a ambos más de lo que quería, hasta ese momento fue en el que me di cuenta lo mucho que los había extrañado y el como su presencia me hacía sentir relajado al instante.
— ¡Parecieron años! — exclamó Sydney.
— ¡Lo mismo pensé! — le dije aún sin soltarlos.
Una vez que nos separamos noté con más atención el cartel, las letras estaban del todo chuecas y de distintos tamaños, también olía a pintura para uñas. Sonreí pues solo ellos podrían hacer eso por mí.
— ¿Cómo sobreviviste? — preguntó Sydney — ¿Había animales salvajes?
Solté una carcajada.
— Nada de eso — seguí riendo — En realidad fue muy divertido.
— ¿Qué? Te afectó demasiado — los tres reímos.
William parecía más callado de lo normal y me preocupó un poco.
— ¿Por qué tan callado? — le pregunté.
— No estoy callado — respondió — Hace un chingo de calor — comenzó a lanzarse aire con sus propias manos.
— Pueden ir por algo de comer Dorian, yo dejo tus maletas arriba — me dijo papá.
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¿Otro gay?
RomancePara Dorian Fernsby su vida entera era su teléfono, internet y llamadas. Por ello se había separado totalmente de su familia y por eso mismo su padre ha organizado unas vacaciones en una cabaña fuera de la ciudad, sin internet, sin llamadas. Rober...