"LA MARCA - SEGUNDA TEMPORADA"

Capítulo 31: "La decisión: Renuncio a las dos"

Un hombre gris tomaba en sus brazos a una peli roja mientras la miraba con nostalgia, al tiempo que esta de manera inconsciente decía con voz entrecortada: Mi familia, quiero a mi familia, ya no me atormentes más, ya no me confundas más, no me hagas sentir cosas extrañas, no me hagas sentir cosas extrañas.

Mami, dijo Milka, mientras caminaba tras su supuesto padre al lugar donde este llevaba a su madre.

No te preocupes, se pondrá bien, ¿podrías ir por un recipiente de agua y un pañuelo hija?, dijo Jiren mirando a la niña pelinegra.

Sí, papi, dijo Milka, antes de echar a correr en busca de lo que el hombre gris le solicito.

¡Padre¡ qué lindo suena ser llamado así, yo soy tú padre, aunque no lleves mi sangre, yo soy tú padre y Milk, mi pareja, pensaba Jiren, al tiempo que unas palabras venían a su mente.

No vengo en plan de pelea, he traído a mis hijos conmigo para que veas que Milk tiene una familia, una familia que la está esperando a ella y a Milka, nos has hecho mucho daño, has separado a una familia por culpa de tu egoísmo, si en verdad amas a Milk, déjala libre, dile la verdad, dile quien eres tú realmente, yo cuidare del hijo que ella espera como si fuera mío, si gustas hasta te permito que lo veas, pues después de todo será tú hijo, pero deja que Milk y Milka vengan con nosotros, que seamos esa familia que un día fuimos

No, no, no quiero perderlas, no quiero perderlas, ustedes son mi familia, esa familia que perdí, él tiene a sus hijos, él los tiene a ellos, pensaba Jiren mientras entraba a una habitación con la pelinegra en sus brazos.

En tanto:

Fuera de la casa el apuesto hombre de cabello alborotado junto a sus dos hijos, trataban de destruir la barrera que les impedía llegar a la casa donde estaban las personas que ellos buscaban.

Es imposible, dijo Goten, mientras respiraba agitadamente.

No podemos desistir hermano, respondió Gohan dirigiendo su mirada a su padre que seguía lanzando sus mejores ataques a la barrera con la finalidad de destruirla.

Sí, tienes razón, dijo Goten, volviendo a unirse al mismo propósito: Destruir la barrera que les impedía llegar junto a sus familiares.

¡Gracias hijo¡ dijo Gokú, mientras pensaba: Mi princesita, espero y no sea nada grave lo que tengas.

Dentro de la casa:

Una niña pelinegra se acercaba al lugar donde estaba su supuesto padre con un pequeño recipiente en la mano.

Aquí está papi, dijo Milka.

¡Gracias Mía¡ respondió Jiren tomando un pañuelo que estaba en el recipiente e exprimiéndolo para sacarle toda el agua, luego con ello lo paso por el rostro de la pelinegra.

¿Por qué haces eso papi?, ¿acaso mami tiene fiebre?, pregunto Milka con preocupación en su voz.

Si Mía, tú mamá tiene algo de calentura, pero no es nada grave....., decía Jiren cuando la pelinegra empezó a moverse en la cama mientras balbuceaba.

Yo no tengo nada que hablar contigo

¿Vinculo?, ¿Que vinculo?

Jiren miraba desconcertado a la joven de cabello rojizo mientras pensaba: Es imposible, ella no puede estar recordando su pasado, no puede, de seguro la fiebre la está haciendo delirar, si eso debe ser, pensaba el hombre gris mientras la pelinegra seguía hablando en sus sueños.