C'EST MA FAUTE (EUNSAN)

12

SanHa realmente estaba tan asustado que no le importó el dinero y prefirió irse a casa pues EunWoo aún no le contestaban las llamadas, sin embargo en cuanto abrió la puerta de la entrada al departamento, ni tuvo el tiempo suficiente para quitarse sus zapatos exteriores y entró de esta forma estando asustado, pero se calmó al encontrarse a su pareja allí en la mesa con un lindo mantel blanco y un florero en medio.

-SanHa...te preparaba la cena.

-¿Cena? ¿Qué cena? ¡EunWoo! Estuve llamando a tu teléfono y no contestabas, me preocupaste mucho.

-¿Ah...si? ¿Qué pasó?.

-¿¡Qué paso!? Nada...¡Me asaltaron! De nuevo llegaron a asaltar el sitio y tú ahí muy despreocupado, creí que me amabas y que de verdad te interesabas en mi.-Realmente estaba tan molesto pues hablaba tan rápido y en un tono alto con molestia debido a que realmente expresaba lo que estaba sintiendo.

-Y si lo hago, me importas mucho por eso quiero esta cena contigo.-Respondió con naturalidad y sin decir mucho pues no quería levantar sospechas de ninguna manera.

-EunWoo, me asusté, ví el arma amenazandome frente a mí.-Los llantos comenzaban pues SanHa ya estaba en eso, dejando caer algunas lágrimas pues se sentía realmente descepcionado de su novio quien no aparentaba interés al tema.

-Tranquilo.

-¡Tranquilo! ¿Cómo quieres que este tanquil...? EunWoo... ¿De dónde sacaste eso?.-Si, en efecto SanHa estaba totalmente alterado, sin embargo al ver aquella enorme cantidad de dinero sus ojos se abrieron totalmente sorprendido.

-Primero mira el desorden que hicieron tus zapatos, en segundo fue lo que gané con mi padre.

-¿Ganaste? ¿Qué hiciste?.-Realmente estaba confundido, sabía que su novio era de familia rica y adinerada pero no creía que fuera a llegar a casa con grandes cantidades, se preguntaba mientras retiraba sus zapatos exteriores y se acercaba donde su novio estaba.

-Nada, solamente le hice un favor y como a él le encantó me premió de esta manera, así que tú dime ¿A dónde vamos? ¿Cómo lo gastamos?.

-EunWoo, no todo el dinero que te den lo tienes gastar, con eso podemos ahorrar un poco y conseguirnos una casa.

-Tienes razón. De acuerdo cariño entonces eso haré, con esto podemos comprar una pequeña ¿No te gustaría que tú y yo vivamos en una casita? Así ambos estaríamos juntos como lo estamos aquí.

-EunWoo, solamente guarda el dinero no lo necesitamos y no tengo hambre, iré a visitar a mis padres.-Realmente se sentía tan mal con la gran descepción que se llevó de su novio al ver que no le brindaba ni un poco de atención debido al tema del asalto.

El mayor comprendió que no había hecho su trabajo bien como novio, así que soltó un suspiro y dejó todo el dinero en el cajón donde SanHa guarda su ropa entregando todo aquello a su amado dándose cuenta de su gran equivocación.

No quiso seguir a su novio pues quería darle un poco de privacidad respecto al tema así que decidió recoger todo su preparativo, pues no lo utilizaría después de todo.
Se dió una larga ducha y después se recostó en la cama comenzando a charlar con JinJin su único amigo y compañero de la vida que tenía cerca.

El peli verde hablaba contento pues con aquel dinero estaba invitando a salir a MyungJun a un lujoso restaurante de la ciudad. Mientras que EunWoo había recibido una basta soledad en su departamento.

SanHa al estar con su familia no les contó que había discutido con su novio y solo continuó aparentando que todo iba bien.

-Hijo, algo está mal, lo veo en tus ojos.

-Ya te dije que todo bien.-Dicho aquello sonrió falsamente y como siempre no pudo ocultar su rostro triste y terminó hablando, provocando que uno de los padres de SanHa se enfadarán aún más con la pareja de este, pues nadie haría llorar a su hijo.

-Idiota, ese idiota me va a escuchar ¿Cree que con dinero lo arreglará?.

-Calma amor, y Sanie por favor vuelve con nosotros.-Mencionó su padre comprensivo y amoroso colocando su mano en el muslo de su hijo provocando que a este sintiera extraño y prefiria retirar la mano de allí.-Sanie... e...eres no puede ser, eres un bebé ¿Ese idiota te violó? No eres virgen ¿Cierto?.-Aquel mismo padre se asustó y casi lloraba pues le costaba que su hijo pudiera perder la virginidad teniendo aquel rostro de niño pequeño.

Pero su otro padre se molestó más cuando escuchó aquellas palabras, simplemente le habían enfurecer como aquel personaje de Marvel.

-Padres, es mi cuerpo ¿Si? Ustedes ya hicieron mucho por mí, ahora yo puedo hacer lo que quiera conmigo mismo. Y esos es todo, ya me retiró.-No le gustaba y jamás le gusto hablar de ello a sus padres por lo que sintiéndose incómodo se puso de pie caminando rumbo a la puerta de entrada.

-Pero hijo... ¿Estás conciente de que puedes quedar embarazado?.

Embarazo, jamás lo pensó SanHa en el momento que demostraba su amor hacia EunWoo y realmente lo que menos quería en esos momentos donde este estaba molesto era un bebé, pero supuso que al ser la primera vez no ocurriría nada de nada, por lo que simplemente lo dejó pasar, no usaron protección pero tampoco sintió necesidad de usarlo se sentía totalmente seguro que todo estaba yendo bien.

Caminó de forma solitaria como aquel nombre del juego de cartas donde solamente contigo mismo logras una victoria y así de aquella misma manera SanHa iría en busca de la suya, pues el hecho de hablar con sus padres le hicieron ver que si tenía la razón pero no debía de enojarse para tanto, aprendió en aquella visita que tenía que ser paciente si quería compartir techo con alguien más.

Al llegar no aviso y no dijo absolutamente nada, ningún ruido transmitió. Pero si escuchó uno.

-SanHa...

Fue lo único que soltó EunWoo vestido de buenas telas y un bello ramo de rosas en sus manos mirando a SanHa quien recién llegaba.
El mayor aprendió su lección debido a aquella llamada telefónica que tuvo con su aliado.

-Por favor perdóname, SanHa te amo. Y si fui un estúpido ridículo perdóname, solo pensé en lo material pero no en lo sentimental, ni en lo más importante que es nuestro amor. Sin usar aquel dinero, te invito a cenar comida profesional en un restaurante.

-Yo... Realmente no sé qué decirte, es que...¡Agh! Te amo peor fuiste estúpido en aquel momento, si me prometes que jamás lo volverás a hacer te perdonaré.

-De acuerdo, juro por mi madre que nunca veré por el dinero, pues primero es mi pareja la persona que más amo en este mundo.

Tal vez exageró, pero sabía que SanHa así lo prefería y de aquella manera con ahorros guardados ambos disfrutaron de una bella cita en algún famoso restaurante de precio regular que fuera accesible a ellos y aún estuviera abierto a esas horas.

A veces las peleas no son tan grandes, es más gigante los problemas que pasan por tu mente al momento de molestarte, pero realmente no lo es, solo hay que buscar una solución y un momento de charla para que su discusión deje de existir y pueda convertirse en un suave y delicado beso o en una cita como nuestros protagonistas participaban en hacer.