C'EST MA FAUTE (EUNSAN)

11

-Realmente no se que hacer.

-Descuida, hiciste lo mejor de ti y por él.

-¡Agh! El hijo de Lee es tan aferrado y tan tonto, no encuentro la manera de hacerlo mío para traerlo a usted...mi jefe el señor Park.

-Agradezco que mi apellido sea muy común y nadie sospecha de mí, pero no me llames así en público. Tengo un plan B pero te incluye a ti, así que lo que tendrás que hacer es continuar con el plan tratando de seguir las órdenes del señor Lee. Quiero a su hijo, cueste lo que cueste.

Con acento malicioso comenzó a reír como un maniático descarado con sus altas ganas de que se hiciera lo que él dijera.

-Agh...Eun...-Gimió de la forma más sexy para aquel pelinegro.

Sintiéndose totalmente feliz de que al fin estaban teniendo sus actos sexuales de la forma donde ambos se satisfacían.
Demostrando su amor uno al otro en aquella cama.

Los gemidos de SanHa ya no eran de dolor ni de sufrimiento simplemente los disfrutaba de igual forma oír los jadeos de su novio y de sentir aquellas tantas cosas que hacían en su interior o con su propio cuerpo.

-Te amo...-susurró al sentir aquellas grandiosas sensaciones de una eyaculación creando un orgasmo perfecto para ambos relajando ambos cuerpos por la excitación que habían sentido.

-¿Logré hacerte ver que el sexo es maravilloso?.

-Por supuesto que sí, pero EunWoo no hicimos sexo, es amor. De esta manera demostré que verdaderamente te amo y mucho. No dejaré que ninguna persona toque mi cuerpo a excepción de ti.

-Y así será cariño, solo yo puedo tocarte, eres solamente mío.

Dicho aquello renunciaron a sus tareas escolares y prefirieron dormir como aquellos canes quedándose en su abotonamiento humano.

Era tarde y ellos querían seguir y seguir durmiendo, sin que hubiere un amanecer, ambos fallaron respecto a sus empleos pues ninguno de los se había presentado debido a sus altas ganas de aparearse juntos que prefirieron ignorar hasta sus comidas.

Al amanecer del día siguiente SanHa fue el primero en abrir sus ojos pues sintió un fuerte dolor en su zona baja.
Con un quejido se tocó aquella parte recordando lo que habían hecho, sonrió pues le había gustado pero él creía que el dolor solo era al inicio no al final.

-Buan día amor, ¿Tan temprano y ya estás masturbandote?.-Habló riendo aquel que dormía con el sujeto rubio mientras se acercaba a él abrazandolo.-Lo hago por ti, si quieres...

-¡No! ¡No! No hacía eso, solo desperté con un dolor ahí. ¿Es porque me diste muy fuerte?.-EunWoo al escuchar aquello soltó una carcajada por lo que acaba de oír pero sinceramente le había encantado la inocencia y ternura de su novio.

-Es normal cariño, te dolió porque no está acostumbrado tu cuerpo y fue tu primera vez.

-¿Ya no me dolerá?.

El mayor seguía sonriendo por lo que besó la comisura de los labios de su novio y se puso de pie dirigiéndose a su maleta y sacar un ungüento.

-Toma, colócalo sobre tu zona adolorida y verás que se te calmará el dolor.

SanHa asintió a pesar de que sintiera extraño que aquel sujeto tuviera aquel tipo de ungüento, pues no tenía apariencia de ser un gran busca pleito o algo por el estilo con el cual merezca ganarse un golpe para utilizar su pomada.

Al menor no le importó la presencia del mayor y comenzó a untarlo soltando algunos gemidos lo cual EunWoo solo lo miraba mordiendo sus propios labios pues por una parte le parecía hermoso la escena frente a él.