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Una semana sucedió después de aquel acontecimiento, DongMin no había vuelto a verlo, pues había tenido exámenes y tenía que estudiar para sus estudios, de la misma forma tenía algunos pendientes en el trabajo de su padre, no era cosa grande, pues eran simples cosas; como llevar algunos paquetes con contenido ilegal a otras partes de la ciudad, dejar listas de planes a la empresa, entre otras cosas.

Ahora mismo se encontraba caminando por el centro de la ciudad cuando se encontró a un sonriente sujeto junto a alguien que reconoció fácilmente.

-¡EunWoo! ¡Hey viejo amigo! ¿Qué tal te recibe la vida?

-¿JinJin? No te reconocí con tu nuevo look.

-MyungJun me recomendó usar rubio en mi cabello ¿te gusta? Se que te gustan los rubios.-Habló riendo pero este solo negó.

-Me gustan los rubios que se llamen Yoon SanHa no alguien como tú.

-¡hey! Mi JinWoo es bellísimo así, por cierto debes tener cuidado con SanHa he visto que se junta mucho con un sujeto, no recuerdo bien su nombre pero tenía el cabello castaño, una vez fui a visitarlo y no me atendió, sus padres me dijeron que había salido al cinema con aquel sujeto.

-Lo sé, amo a SanHa pero solo somos amigos, trataré de olvidar mi amor por él y dejaré que sea feliz con la persona que él quiera.

Sabía que dolía escuchar esas palabras por parte de MyungJun pero no pudo decir nada así que solo ocultó su dolor y prefirió verse lo más tranquilo posible.

-Pues si lo quieres olvidar enamórate de alguien más.

Este asintió para luego despedirse diciendo que tenía prisa en llegar a su destino, pero realmente se había sentido un poco incómodo al escuchar que tenía que volver a enamorarse de alguien más, Eunwoo sabía perfectamente que SanHa volvería a él por lo cual tenía que aprender a no enamorarse y pensar en su tercer intento en llegar al corazón de su querido.

Ahora lo que le esperaba al menor era una cita sorpresa, ¿cómo es una cita sorpresa? Pues el chico llega con su presa y le invita a salir sin avisarle con tiempo a su chico invitado.

Quedaba una cuadra más para llegar a casa de este solamente tenía que cruzar la calle y listo.
Al estar en medio del camino observó como alguien más se estacionada frente a la casa del rubio y de la misma forma se acercaba a la puerta con un ramo de pocos flores. Eso le dió fortaleza y Eunwoo corrió hasta llegar a donde estaba este y de la misma forma tocó del timbre.

-¡Min! Y... ¿Tú que haces aquí?

-Buen día señor Yoon. ¿Ésta su hijo en casa?. - Habló el pelinegro tratando de asomarse al interior de la casa.

-Yo también quiero ver a su hijo, SanHa y yo vamos a salir.

Habló de forma presumida dejando boquiabierto al sujeto que había preguntado primero por SanHa.

-Lo siento, él está de compras con su otro padre ¿no se los dijo?.

Los chicos no supieron que decir, ambos habían fallado en sus planes pero ahí mismo podías sentir el odio de estos dos así que el señor Yoon cerró la puerta diciendo que si gustaban esperar tenían que hacerlo fuera.

Los dos soltaron un bufido pesado y se miraron con inquina.

-Entonces, ¿crees que por traer unas cuatro rosas cortadas de algún jardín SanHa aceptará salir contigo?.

-Si, no necesita tener muchas pues comenzarán a marchitarse tan rápido que no podrá disfrutarlas.-MinHyuk sabía que por fin había conocido al pretendiente de SanHa así que trataría de hacerlo sentir terriblemente mal, lo que sucedió es que no conocía el nombre de este, en cambio si así fuera algo malo hubiera pasado.
Y viceversa.

C'EST MA FAUTE (EUNSAN) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora