25
-¡Prefiero estar en una guerra! – se escuchó en toda la habitación, hasta el pasillo el grito lleno de ira de Sango.
-Oh no, claro que no Sango. Te aseguro que es mucho mejor estar aquí...- la voz de Kagome resonó en la habitación después del grito de la castaña.
-¡Kagome, oh por todos los dioses! ¡Estás aquí! – Sango como si no sintiera nada se reincorporo y corrió hacía ella tomándola de los brazos atrayéndola hacía ella misma - ¿Cuándo llegaste?
-Hace unos minutos – sonrió Kagome recibiendo la bienvenida de su amiga. A su lado un peli plata con su expresión demostraba lo enormemente feliz que estaba.
-¿Fuiste tú quien hizo que me cambiaran de habitación?
-Por supuesto, a penas caigo aquí y me entero que estás embarazada, a punto de dar a luz y... ¡En una habitación con el peor número existente!
-Lo sé, hice un escándalo pero no lo tomaron en cuenta – con un puchero dijo – Gracias y me alegra que estés aquí, justo para lo bueno... - con una mueca termino su frase y es que otra contracción se avecinaba -¡Miroku diles que ya quiero pujar!
-Es... ¿Así de feo? – susurro Kagome a Sango al ver correr a Miroku fuera de la habitación.
-Ni te imaginas... ya te tocará.
-¿He? – con sorpresa Kagome la miro y antes de seguir preguntándole la doctora a cargo hizo presencia.
-Muy bien Sango, déjame revisarte – la simpática doctora la recuesta en la cama de hospital y con un guante en la mano abre las piernas de Sango, en ese momento, Inuyasha da la espalda y mira hacía la pared con un poco de incomodidad – Bien, la sala de parto está lista, llamaré a enfermeros que te prepararan... ¿Entrarás sola o...?
-¡Por supuesto que no! Miroku vendrá arrastras – lo señalo a su lado y lo miro fulminante obligándolo a responder.
-Sí, yo iré ¡Y no porque me estén obligando! – aclaro avergonzado – Inuyasha, amigo ¿Te quedarás, cierto? - con expresión aterrada le pregunto a su amigo peli plata.
-Claro, hasta que nazca mi sobrino – tranquilizo Inuyasha volteándose y tomando a Kagome de la mano.
-Que reconfortante tener a ambos aquí...
°°°
-¿Cómo la pasaste todo esté tiempo Inuyasha? – sentados en la sala de espera inicio la charla.
-Contigo tengo que ser honesto – entrelazo sus dedos con los de Kagome – Las primeras semanas se hicieron eternas, no dormía, no pensaba claramente... me aleje de todos. Estaba deprimido, ni siquiera te habías despedido de mí... no sabía si tomarme esto como un abandono tuyo – sonrió con tristeza mirando el piso blanco de la clínica – Después Sango me aclaro un poco el donde estabas tú y probablemente que hacías. Eso me calmo un poco, solo un poco cariño – Kagome lo escuchaba con atención, no quería interrumpir el relato de su peli plata – Luego mi hermano se apareció en la empresa y me dijo lo que mis papás tiempo atrás le habían dicho: que desaparecerían y que demorarían n regresar.
-¿Tú hermano?
-Sí, él ya sabía todo sobre las deidades existentes y me dijo que esperará... que regresarías. Creo que desde allí acepte que tardarías en volver, pero que lo harías... y así fue cariño – le sonrió mirándola desde abajo.
-Regrese para estar contigo... ¿Aún puedo hacerlo? – con temor pregunto.
-Claro que sí, estuve esperando por ti mí ángel – Inuyasha se sentó bien y la abrazo por su cintura acercándola a él y haciendo que se mirarán fijamente y de muy cerca.
-Ex...ángel. Ya no tengo mi perla Inuyasha, pero mis poderes tardarán unos días en desaparecer por completo – graciosa sonrió.
-Entonces, te amo mi ex ángel – acercó sus labios a los suyos lentamente sosteniéndola por el mentón.
-Y yo te amo a ti, mi humano – ella corto la poca distancia juntando sus labios en un tan anhelado beso. Uno necesitado por ambos, de sentirse cerca, unidos y que sus cuerpos reaccionasen a la caricia excitante que sus labios provocaban al tocarse.
-¿Y tú, que hiciste?
-Heee... luche contra el ángel oscuro y vencí – sonrió con gracia.
-Cool – y ambos se carcajearon.
-Pero sobre todo te extrañe – le rodeo con sus delgados brazos demostrando en acción sus palabras.
°°°
Próximo capítulo ULTIMO y LARGO mis queridos lectores <3
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Ángel
FanficInuxKag (¬¬) Kagome, ángel del reino celestial aprendiz de la gran sabia Kaede. Ese es su nombre o al menos lo era en el reino celestial, porque ahora en el reino humano solo es Kagome. Fue lanzada por la frontera que divide ambos reinos, humano y c...