38. TODO ES HASTA UN DÍA.

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JIMMY

regrese a la prisión, quitaron las esposas de mis manos y caminé directamente hasta el area libre y encendí un cigarillo mientras estaba detenido en la esquina. No me gustaba tener mucho amigos pero ese grupo que me habia mostrado JJ me miraban fijamente como si estuvieran esperando una respuesta.

Luego Octavio se acercó a mi, poniéndose frente a mi de una forma desafiante.

— El jefe va a follarte. — Comento moviendo su dedo de una forma vurgal.

No respondí mas que con dejar salir el humo del cigarillo, mientras el se alejaba. JJ volvió a acercarse a mi.

— ¿Qué me dices, hombre? — Preguntó.

— Ni siquiera recuerdo cual fue tu propuesta. — Respondí.

— Odiamos al mismo hombre, y todos queremos cobrarle una parte. He escuchado que eres un favorito, así que unirnos no nos haria mal. — Dijo, a lo que yo continuaba mirando a los oficiales que se paseaban por el pateo.

— Ahora estoy pensando retirme de esto.— Respondí recordando lo que le dije a Enmanuel.

— Eso no será muy facil, van a creer que estas débil y van a joderte. — Comentó para luego darme dos palmas por el hombro. — Sabes quien soy, puedes buscarme cuando desees.

En ese momento salí del area libre para caminar hasta el baño, y en el momento en el que entré sentí que entraron detrás de mi, cuando me giré para ver sentí el golpe sorpresivo en mi rostro que me hizó chocar contra la pared, intenté irme contra quien me habia golpeado que ni siquiera me habia dado cuenta quien era, pero alguien mas me sostuvo por detras, y sentí que me patearon la pierna. En ese momento me dí cuenta que eran un grupo.

me cubrí el rostro con los brazos como los boxeadores, pero era difícil con un grupo de personas, intenté defenderme pero sentí que me tomaron por el pelo fuertemente para pegarme contra la pared y hacer que mi nariz sangrara.

— Bienvenido a la puta prisión, perra. — Dijo uno de ellos riendo justo a mi oido.

me giré de frente con toda la fuerza que podía tener y sentí como una bofetada aterrizó en mi rostro creando un sonido molesto y un tremendo ardor en mi mejilla, y me encontré con la sonrisa de Jeison. De repente un oficial entró al baño y ellos se separon de mi y hicieron creer que estaban haciendo distintas cosas como orinar o mirarse en el espejo, yo solo dí la espalda para que el oficial no pudiera verme, pero yo no era uno mas del montón.

Limpié la sangre que salía de mi nariz con mi mano derecha, e intentaba calmar mi rabia.

— Sr. Holly ¿Pasa algo? — Me gire de frente a el.

— NO. NADA. — respondí y me gire para salir el lugar pero el oficial me detuvo.

— ¿Seguro que esta bien? — Preguntó a lo que lo mire fijo.

— Si. Gracias. — Terminé de salir del lugar.

Los escuché reír.

'' Vamos, Jimmy no mires atrás, no vuelvas atrás, vete. EL MOMENTO NO ES AHORA, NO ES AHORA, NO ES AHORA, NO ES AHORA''.

Mis piernas me forzaban a devolverme pero mi cerebro no. Así que solo volví a mi habituación, y tomé asiento. Recordé el rostro de Enmanuel con esos ojos caídos, pero lo sentía en lo mas profundo de mi porque no iba a cumplir con lo que le había dicho.

Tome lapicero y papel.

''Se que hoy mismo nos vimos, que te dije que me retiraría de todo, que haría lo que tu desearas... pero lo siento amor, no podré hacerlo. Voy a fallarte, Y lo siento, mucho, mucho, mucho. Tal vez no regrese a casa al tiempo que estaba pautado, pero no importa, te amo de todas formas y quiero que seas feliz.

¿Seguro Que Eres El Jefe? (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora