Toda la verdad

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Heru: Vale, gracias igualmente.

El científico acabó la llamada para luego dejar de manera algo brusca el celular en la mesa.

Heru: Cherry tampoco tiene BF18 ni nada que se le parezca lo máximo posible, no se donde más buscar.

Se acomodó en el respaldo de su silla y miraba al techo mientras la silla se movía parcialmente a los lados. Heiji estaba muy pensativo, pero aun así intentó entrar en la conversación.

Heiji: ¿No hay ninguna otra forma de conseguirlo?

Heru: No es tan fácil como comprar por internet y ya, en un día te llega a casa. Es un compuesto no muy utilizado, laboratorios pequeños no lo tienen, yo justamente no lo tengo por que no me llegó cuando comencé con las investigaciones.

Un sonoro suspiro salió de la boca de Heiji.

Heiji: ¿Esto es todo? ¿Hemos llegado hasta aquí?

Pasaron cinco segundos contados antes de recibir una contestación.

Heru: Tal vez no, tal vez aun hay algo.

Mientras pensaba, miraba la pantalla de su ordenador.

Heru: ¿Tienes ganas de volver a infiltrarte?

Ahora Heiji prestaba más atención a Heru y este, cada vez estaba más centrado en su computador.

Heiji: ¿En qué estas pensando?

Heru: Puedo registrar algunos archivos, encontrar el compuesto en uno de los almacenes de la organización.

El silencio también entró en la conversación.

Heru: Aunque podríamos no tener tan buena suerte como la anterior vez.

Heiji: Tu plan, si he entendido bien, es robarle a una enorme organización, un compuesto.

Heru: Una muy grande organización, pero no se me ocurre otra cosa.

Heiji: Será divertido.

Soltó una curiosa risa de lado, buscándole la gracia a algo que, más bien, debería darles miedo.

Con Heru buscando, Heiji fue a sentarse en el único sofá del salón, había algo que le carcomía la mente.

Debía contarle la verdad a Ran, la decisión podía no ser la mejor, pero necesitaba la ayuda de Ran y seguramente más adelante también, además, no podía seguir ocultándole las circunstancias de su amigo, llegaría el momento en que ella querría saberlo, en que no aceptaría cualquier excusa y en el hipotético caso de que la búsqueda del último componente no salga bien Ran era la última esperanza para continuar. Debía hacerlo.

Seguía cavilando sobre sus opciones, el tiempo se volvió irrelevante para el joven. En un momento dado, cuando más o menos había tomado la decisión, llamó a Ran quien segundos después salió, Hattori le hizo señas para que cerrara la puerta de la habitación.

Ran: ¿Esta todo bien?
Intentaba mantener la calma.

Heiji: . . . Debo contarte algo.

¿Como comenzaba?¿Por donde debía empezar a hablar?¿Cuanta información debía revelar?¿Estaba seguro de lo que hacía?

Ran: ¿Heiji? Me estás preocupando ¿Qué pasa?
La joven cada vez ocultaba menos su nerviosismo al ver al joven sentado, mirándola seriamente sin pronunciar palabra.

Heiji: Tal vez, es mejor, que, te sientes.
Los nervios de Heiji también se hacían notar.

Ran: Me quedaré de pie ¿Vas a hablar?
Era difícil saber si tenía nervios o si comenzaba a estar enfadada.

El Detective Conan:Un caso preocupanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora