Capítulo 12

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Sasuke y yo caminábamos tranquilos por la calles de Konoha, teníamos que ir a comprar algunas cosas para la casa, me detuve de golpe haciendo que Sasuke también se detuviera.

--¡Sucia omega! ¡Recoge tus cosas y lárgate de mi casa!-- gritó un alfa, lanzando a una mujer, quien tenía la cara llena de golpes y heridas por todo el cuerpo.

--¡Por favor no me corra! ¡no tengo a dónde ir! ¡Se lo suplico por favor! --dijo la chica llorando, desesperada, se puso de rodillas-- Perdóneme por favor...

--¡Te lo mereces por ladrona! Te llevarás a tu hermana, no estoy para mantener a inútiles, no las quiero volver a ver-- el hombre saco a una niña como de 5 años, para después cerrarles la puerta en la cara.

--Nii-san... ¿estas bién?-- preguntó con su dulce voz la pequeña mientras tocaba delicadamente la mejilla lastimada de su hermana.

--Sí, no te preocupes, Shi-chan--dijo la chica sonriendo con lágrimas en los ojos-- De-descuida todo estará bi-bién, lo prometo--dijo la chica mientras abrazaba a su pequeña hermanita, yo no podía creerlo quería ayudarla pero una mano me detuvo.

--Naruto ya vámonos, no es nuestro asunto--dijo Sasuke mirándome serio y empezando a caminar jalandome con él, como si nada, miré alrededor y vi que aunque había mucha gente ni una ayudaba a la chica, ¿Por qué? ¿Por qué no la ayudan? ¿Por qué es una omega? todos pasaban de largo sin siquiera darle una mirada, nada... como si no fuera nada... No somos objetos para que nos traten así... somos personas.

Sasuke seguía agarrándome de la mano, caminando rápido, sin darme cuenta habíamos llegado al mercado, estaba muy lleno, muchas personas caminaban. Yo me solté bruscamente y parandome en medio de toda esa gente, las personas pasaban empujándome, vi a Sasuke los que pasaban por su lado mantenían distancia. Fruncí el ceño y mire a los ojos a Sasuke que también me miraba con el ceño fruncido.

--Vamos Naruto, camina, que estorbas.

- ¿Por qué?... ¡¿Por qué no la ayudaste?! no viste como estaba, ¡no es justo! ¡Ninguna persona se merece ese trató!--grité enojado y lágrimas de impotencia se acumularon en mis ojos, llamando la atención de las personas que pasaban.

-- Naruto cálmate, estas llamando la atención, ya vámonos--me ordenó Sasuke mirandome seriamente, la gente que pasaba ahi nos veía disimuladamente, a mi no me importó que me vieran.

--¿Por qué nadie hace algo? ¡esto no es justo! ¿Qué hemos hecho para merecer este trato?--dije impotente llorando--No es justo, este mundo está mal, ¡no somos objetos para que nos traten asi, somos personas igual que ustedes!-- algunos omegas que tenían la mirada baja la levantaron y me miraban sorprendidos y con un poco de miedo, y los alfas que estaban con ellos fruncian el ceño y me miraban con disgusto empezando a murmurar.

~Como se atreve a compararnos con los inútiles de los omegas~
~Deberían darle su lección~
~El joven Uchiha no lo ha educado como se debe~
~El Uchiha no sabe como educar a su omega~

Sasuke escuchó a la perfección cada murmuró sobre él, dándole un golpe bajo a su orgullo, llenandolo de irá mientras escuchaba más murmuros sobre él, siendo estos diciéndole como un incompetente.

Solo se escuchó un sonido sordo, haciendo callar los murmuros, el rubio estaba en el piso tocándose la parte afectada, incrédulo, no pudiendo creerlo. El azabache agarró bruscamente del brazo al rubio y se fue del lugar, dejando a los expectantes por una parte mal y por otra parte satisfechos, no hace falta decir quienes estaban satisfechos ¿o sí?

El pelinegro entró azotando la puerta mientras aún sostenía fuertemente del brazo al rubio. Sus feromonas se desprendían incontrolablemente  cargadas de enojo.

-- ¿Estás consiente lo que acabas de hacer? ¡¿Sabes la estupidez que acabas de cometer?!-- gritó Sasuke con ira, furioso aventó a Naruto al piso, al rubio se le cristalizaron los ojos y lo miró con miedo--Naruto yo nunca quise golpearte, pero tú me obligas a hacer esto.

--Eres igual a los demás... ¡Tú mismo viste como la maltrataba! ¡Es inhumano como nos tratan!-- dijo el rubio con coraje elevando la mirada cristalizada, con su cuerpo temblando--¿Por qué? ¿P-por qué no podemos tratarnos como personas?--dijo ya no aguantando las lágrimas y dejándolas salir, mientras el azabache lo miraba indiferente. Eso hizo sollozar más al rubio, no reconocía al pelinegro frente a él.

--Naruto, Naruto-- el azabache suspiró cansado--Pensé que ya lo habías comprendido, tú, un omega, Mi omega, sólo naciste para complacerme y darme hijos, sin mi no eres nada. Solo sirves para eso, solo sirven para eso--el azabache camino hasta las escaleras y antes de subir-- Métetelo en la cabeza y deja de pensar en estupideces... cosas que nunca pasarán... Quiero la cena lo más antes posible-- Se fue dejando al rubio en el pisó.

--Sasuke... ¿Qué pasó contigo? ¿Podrá algún día cambiar esta aldea? ¿Podré algun día hacer la diferencia?--habló a la nada, parándose del suelo y comenzar a caminar hacia la cocina, mientras se limpiaba las lágrimas.

Después de media hora el ojinegro bajo al comedor y se sentó en una silla, frente al rubio, quién tenía la mirada baja, el azabache notó que la mejilla del rubio estaba muy roja e un poco inflamada, gracias al golpe. Se sintió culpable pero solo fueron unos segundos para luego comer como si nada.Después de todo así se debe de tratar a un omega ¿no? Naruto tenía que aprender a respetarlo y obedecerle quiera o no.

~Si yo mismo no puedo protegerme ¿Como pienso proteger a los demás?, soy patético ¿Debería rendirme? ¡No!, ¡No! No puedo hacerlo, tengo que luchar para cumplir mi meta y demostrar de lo que soy capaz~
      
 

Hokage-sama [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora