-Alex, Necesito fumar- dije nerviosa- La espera me está matando.-¡Que no carajo!, debes dejar eso atrás y más si esta cosa sale positiva- dijo Alex señalando la prueba de embarazo con seriedad.
Sí, mi vida apestaba a fracaso y a desolación. Ha pasado una semana desde que ocurrieron esa serie de eventos desafortunados en mi vida, creí al principio que el vómito era parte de la reacción a la asquerosidad que era ver a mi ahora ex novio con una puta; pero resultaron ser síntomas de embarazo, ¡soy toda una suertuda!.
-debí tirarle la papelera en la cara- susurré.
-¿Que papelera?- preguntó Alex sin entender.
-una papelera que estaba a un lado de la habitación, debí haberle tirado la papelera en su puta cara...- dije quedándome poco a poco sin respiración.
Me tapé la boca para ahogar un pequeño llanto. Esta Nicole estaba cegada por el dolor y la angustia que le causaba saber que había sido traicionada por la persona que más amaba en el mundo, aún no me lo creía.
-¡no, no y no!- exclamó Alex acercándose a mí- ya hablamos de que llorar es para perdedores y tú eres una...
-campeona- completé la frase con la voz entrecortada.
-¡eso es!- dijo Alex orgullosa- un gilipollas no merece tus lágrimas- aclaró con ira en la voz.
Asentí y aunque quise ignorar el dolor, las lágrimas nublaron mi vista haciéndome llorar como una orgullosa perdedora. Alex suspiró y se agachó para tratar de consolarme; de repente el reloj que habíamos colocado como alarma comenzó a retumbar avisando que ya podíamos ver el resultado de la prueba. Alex y yo nos miramos con preocupación, me levanté del retrete y apagué la fastidiosa alarma sin querer ver la prueba de embarazo que estaba a un lado del reloj.
-no puedo verla, mírala tú- dije con un hilo de voz mientras que miraba a Alex.
Alex asintió no muy segura, pero igual caminó hasta el mesón dónde estaba el aparato; Alex levantó la prueba y la miró con temor, luego tragó saliva y me devolvió una mirada de incomodidad.
-¿Alex?- pregunté esperando ansiosamente su respuesta.
-Amiga... - dijo ella acercándose -salió positiva- susurró.
Lo ví venir.
-Dios...- cerré los ojos con cansancio.
Miré la prueba para asegurarme de qué Alex estaba en lo cierto y efectivamente la prueba daba positiva.
Alex acarició mi espalda tratando de reconfortarme, pero ya nada podía hacer que me sintiera mejor.-será mejor que te sientes- dijo Alex llevándome hacia el retrete.
Me senté con dificultad, sintiendo un enorme vacío en mi interior que perforaba mi estómago y mi pecho; quería ignorarlo, quería olvidar a Eddie y seguir adelante, pero me sentía aferrada a él, sentía que le pertenecía de alguna forma. Todo me recordaba a él y a su nada esperada infidelidad, pero ahora tendría que cargar con algo mayor que eso; con nuestro bebé.
-no quería que esto sucediera así- susurré mirando al suelo con desconcierto.
-¿a qué te refieres?- preguntó Alex confundida.
No respondí nada y dejé que Alex hiciera sus deducciones. Después de unos segundos de silencio Alex me miró como si hubiera entendido a lo que me refería, es decir, ella estaba espantada.
-No me digas qué... Te dejaste embarazar a propósito- dijo Alex con la voz quebradiza.
Asentí con la culpa sobre mis hombros y la decepción en el rostro, Alex tomó una buena bocanada de aire y se cruzó de brazos con incomodidad.
ESTÁS LEYENDO
Del amor y otras desgracias
RomanceEl amor no solía ser una prioridad para la joven diseñadora Nicole Navarro, hasta que decide sumergirse en una relación amorosa con su mejor amigo, quién terminaría siendo una de las leyendas del grunge y una de las voces más poderosas del rock. Per...