-¡Oh por Dios!- exclamé gracias a la hermosa sensación del clímax.Mi novio dió unos empujones más para luego dejarse caer en mi espalda desnuda, aferró sus manos a mi cintura y me apoyé en el mesón de la cocina para poder mantenerme en pie.
-vine a desayunar y terminé siendo el aperitivo- dije tratando de recomponerme.
Eddie rió en voz baja y yo me dí la vuelta para verlo mejor, una sonrisa de maldad radiaba en su rostro. Jugué con su cabello notando que por fín se lo estaba dejando crecer; amaba los rizos que se formaban en su cabello corto, pero mi fetiche era verle con la melena de nuevo.
-culpa al ambiente del hotel que escogiste, no sé que tiene, pero dan ganas de follar- se excusó Eddie.
-¿Ah, sí?- me crucé de brazos divertida- ¿no era más fácil decir que morías por follar?.
-no, así no sería tan divertido- dijo Eddie acercándome de la cintura.
Eddie plantó un pequeño beso en mis labios y luego me miró con deseo, me dí por vencida y me lancé sedienta a por sus labios de nuevo; la calentura del beso había llegado tan lejos, que ya me encontraba sobre el mesón con Eddie entre mis piernas. De repente el teléfono comenzó a sonar, traté de ignorarlo y continuar en lo mío, pero me fue imposible.
-Nicole, ¡ignora el teléfono por el amor de Dios!- dijo Eddie al darse cuenta de mis intenciones.
-puede ser de máxima importancia para mí- dije y me separé de él.
Eddie puso los ojos en blanco disgustado y me dejó ir, corrí hasta la habitación y me tiré en la cama para contestar el teléfono.
-¿Hola?- respondí rápidamente.
-he estado llamándote desde hace media hora, ¡¿Por qué no contestas?!- la voz enfadada de Alex me tomó por sorpresa.
-lo siento... Estaba haciendo el desayuno- dije y reí internamente.
-¿Y tú desde cuándo preparas el desayuno?- preguntó Alex extrañada.
-desde siempre, ¿y ahora que sucede?, Interrumpes mi desayuno- traté de cambiar el tema.
-¿en qué hotel estás hospedada?.
-en el Chateau Marmont, ¿Te animaste a venir?- pregunté emocionada.
-¿de verdad creías que me iba a perder la oportunidad de ir a Los Angeles para los Grammy?, ¿De verdad me crees tan tonta?- respondió Alex emocionada.
-me decepcionaría si no vinieras, no es tu estilo- dije tratando de esconder mi emoción- ¿en cuanto tiempo estarás aquí?.
-en unas horas, ¿cómo se siente Eddie al respecto?- preguntó Alex temerosa.
-ya sabes cómo es él, detesta esos eventos, pero ésta vez me invitaron a mí y el susodicho quiso venir conmigo- sonreí levemente- a propósito, tengo colgar, estaba en medio de algo cuando llamaste- recordé.
-nunca aprendiste a mentir- dijo Alex.
-¿Qué?...
-no te preocupes niña mala, sigue intercambiando fluidos con tu novio, te llamaré más tarde- dijo Alex riendo.
Alex colgó y me dejó con la palabra en la boca, tiré el teléfono y rápidamente caminé a la cocina en busca de Eddie, miré por todas partes, pero ya no se encontraba ahí; el sonido del agua caer y un leve canto que provenían del baño hicieron que me dirigiera hacia él.
-¿Vedder?- dije abriendo lentamente la puerta.
Abrí completamente la puerta y me encontré a Eddie lavando su cabello con los ojos cerrados, mientras que murmuraba una canción.
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Del amor y otras desgracias
Roman d'amourEl amor no solía ser una prioridad para la joven diseñadora Nicole Navarro, hasta que decide sumergirse en una relación amorosa con su mejor amigo, quién terminaría siendo una de las leyendas del grunge y una de las voces más poderosas del rock. Per...