Me di media vuelta y me fui. Me di media vuelta y me fui. ¡ME DI MEDIA MALDITA VUELTA Y ME FUI! ¡En serio! Es que deberían ponerme un cartel que diga " cuidado, se advierte de grandes grados de cobardía combinadas con bipolaridad" o "loca de mierda suelta" para simplificarlo.
Habían llegado Landon y Polo a saludarlo, y yo me limite a mirarlos durante unos segundos antes de darme cuenta que debía "aprovechar la oportunidad". Me escabullí silenciosamente detrás de Ares y marche a toda prisa hacia mi habitación, supongo que Holland ya se dio cuenta de mi falta de seguridad en todo lo que hago. Maravilloso.
Cuando llegue, me puse a hacer la tarea. Sí. La tarea. Esa cosa extraña que solo hago cuando estoy aburrida y me acuerdo de ella, porque para qué están esos recreos largos ¿No? Bueno exactamente eso fue lo que hice... Por cinco minutos.
No dejaba de darle vueltas a lo que me había dicho el maravilloso chico de ojos azules como la profundidad del océano. Tiene lindos ojos por si no se notó y les tengo un especial cariño a ellos, sin mencionar a sus pecas que parecen tener un carácter varonil y de niño al mismo tiempo. Dios... Estoy encantada con él, yo lo sé, él lo sabe y mis ecuaciones de matemática también lo saben, aparte de saber que tendré una cruz mañana claro está. Pero el punto es que no sé que carajos responderle y por eso me he ocultado en mi cueva favorita hasta el momento.
Mi Batisophicueva es extraordinaria cuando la necesitas. Lo sé, nombre súper original ni lo digan. Tal vez debería arrastrar a ese batichico a mi batisophicueva para hacer baticosas y dejarme de batimarearme sin batinecesidad. Ya me calmo...
El suelo de mi habitación casi que tiene un agujero de lo rapida y repetida que es mi caminata justo por el mismo lugar. Siento como si las paredes de pronto me dejarán sin oxígeno puro, así que abro las ventanas y me recuesto en el alfeizar. Respiro hondo y exhalo como si me fuera la vida en ello, aunque parece que me hiperventilo en vez de tranquilizarme.
Decido que es momento de sacar a relucir las maravillosas pastillas de "dopaje", como yo les llamo, para que me ayuden a estabilizarme. Son emociones demasiado fuertes para un solo día, entre los remordimientos y las ganas de más mi mente se vuelve loca, agregándole las obligaciones y el poco tiempo de decisión... Mi mente es un caos creado por pollitos hambrientos que pían y corren. Suena mejor en mi cabeza, lo aseguro.
Recorro la corta distancia que me separa del pequeño baño y abro el espejo para sacar lo que hay detrás, un pastillero color blanco se encuentra impoluto en el tercer estante. Tan lejos de mi vista como he podido colocarlo. Marca los días pero eso ya no me sirve al haber pasado esa etapa, según yo. Abro uno de los compartimientos y saco una pastilla, la divido en dos y me coloco una en la boca, tomo un buche de agua de canilla y ya está. Eso es todo.
Miro mi vestimenta y observo que mi blusa esta totalmente descolocada, los botones superiores ya no están abrochados, mi falda cae un poco por mi cadera y otra parte se enrolla. Mi pelo es una mierda de haberlo manoseado entre Ares y yo. Sé que esto lo he hecho yo, no salí tan mal de aquel pasillo.
Noto que mis labios están más rojos y desquebrajados de lo que acostumbran ser. En ese momento, mi celular suena, insistente. Me obligo a apartar los ojos de mi cuerpo reflejado en el espejo y le agradezco a quien sea que le esté llamando, que me haya hecho apartarme de allí.
Correteo para atender la llamada y leo quién es "Padre loro", es Ander. Atiendo casi inmediatamente.
-¿Lorita?
-¿Padre Loro reportándose? Que extraño de su parte... Parecía que ya no querías hablar con tu mejor amiga- me quejo mientras busco una goma para el cabello.
-Sabes que estuve ocupado, Lorita. Pero ya llegué a tu rescate así que... Descarga- ríe a varios kilómetros de distancia.
Me preparo para hablarle de todo lo que ha pasado esta semana y las anteriores a detalle, pero sin embargo no tengo nada para decir. Sé que es mentira, tengo un montón de cosas en la cabeza pero me cuesta tanto saber por donde empezar que al final parce que no tengo nada. Me bloqueo.
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OXÍGENO PARA MÍ ©
Fiksi RemajaSer una más jamás me ha resultado bien, siempre me he sentido por fuera del mundo en el que viven los más cercanos a mí. Me he sentido invadida, agobiada y perdida, durante tanto tiempo... que simplemente esos sentimientos me consumen las energías p...