Haré que me necesites.
•••Trato de convencerme-inútilmente-que hice lo correcto, que nada sucederá. Mi sentido cuerdo me grita que regrese por donde vine, pero mirando calles abajo, esa idea se desecha apenas surge en mi cabeza. Parecía una broma de mal gusto el querer irme cuando insistí por varios minutos en acompañarlo, poniendo excusas absurdas y mis asidios sacándolo de su poca paciencia.
La oscuridad es alarmante, y me provoca unas inmensas ganas de llorar del miedo, el olor a basura era cada vez más intenso conforme avanzamos y las arcadas y muecas de asco salen sin mi permiso. Sabía que Guryong no era la parte más cuidada del país, pero realmente verlo en las condiciones nada sanitarias me hace querer llorar como niña pequeña y más sabiendo que mis sospechas eran ciertas, Jungkook vivía aquí.
Apresuro el paso, al ver que, nuevamente me estaba quedando atrás. Tenía una idea de lo furioso que se encontraba Jungkook, su paso acelerado y mirada gacha me lo confirmaba. Incluso antes de tomar el autobús que nos deja a unas cuántas calles, el rotundo disgusto de mi presencia, parecía irritarlo.
Tomo con más fuerza mi bolso, disgustada con mis propias decisiones. Quería taparme la nariz para dejar de oler el desagradable hedor de comida descompuesta y otras cosas que no pretendo averiguar. Pero no quería dar otro motivo a Jungkook para enojarse.
Comparando las pequeñas casas, algunas hechas por láminas o madera, o claro, unas pocas con cemento. La casa de Taehyung era una clara demostración de todo lo que les hacía falta a las personas que vivían en Guryong.
Se detiene abruptamente, soltando un suspiro tembloroso se quita la gorra de su suéter con la mano libre, dejándome ver su rostro ahora mas sereno pero que sin duda reflejaba el miedo y la duda. Su otra mano que sostiene la bolsa de plástico, en la que contiene comida, es apretada con fuerza; tal pareciera que a él tampoco le faltaba mucho para largarse a llorar y se lo quiero otorgar a la vergüenza. Incluso el lindo rubor en sus mejillas, me daba un incentivo más, a mi conclusión.
Relajando mi postura y ocultando cualquier rastro de desagrado, le doy mi mejor sonrisa. Si tal vez sea una perra en algunas ocasiones, pero Jeon Jungkook me ha demostrado que no necesita en su vida más mierda y menos a una persona con esas características. Tal vez, al final, Jungkook va a conocer a la verdad Bae.
-¿Estas segura?-pregunta removiéndose en su lugar, suelto un bufido.
-Esto no es nada Jeon-declaro segura, siempre fuí una buena mentirosa, claramente esto es mucho para mí. Taehyung siempre me había dicho con, quizá, orgullo lo buena que era para aquello, y justo en esta etapa de mi vida, por una vez, no se equivoco-, vamos, me estoy congelando.
Nuevamente deja salir un suspiro, este sin en cambio, lleno de resignación. Me mira con minuciosidad, en busca, a lo que yo imagino, algún rastro de incomodidad o vacilación. Al no encontrarlas, reanuda el paso, esta vez, más tranquilo y a mi ritmo. No faltaba mucho para detenernos nuevamente, pero esta vez a lo que parecía con pequeña vecindad, con casas un poco sucias y destartaladas. Un pequeño camino estrecho es por donde empieza andar Jungkook, con bastante destreza y agilidad, yo sin en cambio, chocó con pequeños botes y cubetas que se encuentran en el camino.
Se para enfrente de una pequeña casa, que para mi fortuna, es de cemento, el techo de pequeñas laminas y la puerta de madera. Bien, esto es más de lo que me imagene, un poco descuidada, pero que a comparación con las restantes, la casa de Jungkook estaba a lo que clasifico, pasable.
Abre la puerta sin más, sin necesidad de alguna clase de seguridad, en esos instantes, claramente quedó un poco incrédula ante la falta de seguridad, pero luego caigo en cuenta, que todos aquí, deben tener lo mismo o incluso menos.
-Llegue Mae-anuncia si bien apenas abre la puerta, una pequeña sale de alguna parte, con una sonrisa bonita y brillante, trata de llegar a Jungkook. Y es que ahí está la cuestión y que tardó unos minutos al darme cuenta, la hermana de Jungkook no puede ver.
Me trago el nudo que empieza a formarse en mi garganta, mis ojos empiezan a picar y ahora las ganas de irme se hacen tremendas.
-La señora Jun se acaba de ir-aclara antes de que su hermano pregunté por la otra persona, a lo que yo supongo, cuida de ella mientras Jungkook está en la escuela-, ¿y tu cita?
Suelto una risilla sin querer, ganandome una mirada fulminante por parte de mi cita. La niña al escucharme, abre su boquita en una o, llenándome de calidez y ternura, era tan parecida a Jungkook que me dan ganas de colocarlos juntos y tomarles una foto.
El pelinegro se aclara la garganta, claramente nervioso y avergonzado, pasando una mano por su cabello, toma a su hermana entre su brazos levantándola.
-Te dije que no era una cita, era una salida de amigos Mae-la riñe con suavidad, la niña suelta una risa bastante fuerte para su pequeño cuerpo, tendría tal vez, unos siete años-, y ella está aquí.
Me tomo el atrevimiento de tomar una de las manos de la niña, estrechándola con la mía. Era una dulzura.
-Soy Bae Nahee, mucho gusto Mae-la saludo con una sonrisa a pesar de que no puede verme, sus ojos se achican al sonreírme de regreso.
-Es la primera vez que mi hermano trae a alguien a casa-no me sorprende la verdad, pero me mantengo eso para mí-, debes ser muy bonita, ¿puedo tocar tu cara?
Su pregunta inocente me hace carcajear, al contrario de Jungkook que parecía explotar de los nervios.
-Mae eso no...
-No importa Jeon, puede hacerlo-le interrumpo, dejando mi bolso en el suelo, me acerco más a ella hasta poder tomar sus dos manos y ponerlas sobre mi rostro. Sus dedos empiezan a tantear todo mi rostro y parte de mi cabello, causando cosquillas cuando toca ciertas zonas.
-Tu novia es muy bonita Kookie-añade con dulzura y un deje de aceptación.
El comentario de su hermana terminó por hacer que las mejillas de Jungkook se prendieran de un rojo vivo. Sin duda, haré que Jungkook me necesite, por que incluso ahora puedo afirmar, que necesita a alguien con el que apoyarse para no sentirse perdido y solo.
•••
Lloro de la emoción, hace 8 días les agradecía por los 7k, y ahora ya son 11k. En verdad no sé cómo agradecerle tanto amor que le tienen al fic. Solo les puedo decir, que ya se viene lo que muchas quieren o tal vez no.
Nuevamente, si hay alguna falta de ortografía, dejenla en los comentarios.
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Friendship rules | kth,jjk (Rules #1)
FanfictionUn juego donde el primero en confesar su amor pierde y Bae Nahee sabe que ella no será la primera en caer. •Heterosexual •Lenguaje vulgar. •No se aceptan copias o adaptaciones. •Los errores ortográficos serán arreglados pronto.