Yoongi's Boy |Yoonmin|

Por tu bien

Yoongi y yo estamos parados en el sótano, estar aquí de nuevo me da escalofríos, recuerdo a Isabella, fue el encuentro más cercano que tuve a una muerte.

Wooyoung y Hoya son los que nos traen ambos cuerpos. Hacen que se arrodillen enfrente de nosotros. Yoongi los mira con furia, los rostros están cubiertos por bolsas. Él camina hacia ellos y se las quita de un golpe.

Mónica y Sabrina nos miran asustadas, sus manos están amarradas detrás de sus espaldas. Se ven mal. Su maquillaje está corrido y su cabello es un desastre.

A nuestro alrededor están varios del equipo. Todos las miran con recelo.

—Yoongi, ¿qué haces? ¿Qué significa esto? —lloriquea Sabrina mientras mi hombre se aleja para estar a mi lado una vez más. Yo pongo una mano en mi vientre al mirarlas con los ojos entrecerrados.

—Tienen una sola oportunidad para decirme porque diablos hicieron lo que hicieron o si no, mis hombres se van a divertir mucho con ustedes —señala con sus manos a todos los que están parados a su lado. Alice les sonríe y levanta el bate que sostiene en su mano derecha para posarla en su hombro.

Akira se coloca unos anillos puntiagudos mientras sonríe felizmente. Dan se truena los dedos, y Luke saca el filo de su navaja. Ambas mujeres se juntan en busca de protección cuando los ven.

—¿Hacer qué? —solloza Mónica, sus ojos le suplican a Yoongi por piedad. Pero no la van a encontrar hoy.

Wooyoung que está detrás de Mónica le da un golpe en la cabeza gruñendo.

—Tratar de envenenar a mi hermano —le brama tomando sus cabellos para obligarla a mirar a Yoongi. Ella tiene el miedo puro reflejado en sus ojos cuando se topan con los de mi hombre.

—Nosotras no fuimos —difiere Sabrina al instante. Yoongi sólo le da un vistazo a Alice, dándole permiso a darle un golpe con el bate en la espalda de Sabrina. Ella jadea en sorpresa y luego gruñe de dolor al recibir el golpe. No cae, simplemente se encorva en su lugar mientras grita sorprendida de que sí le hayan dado un golpe.

—Respuesta incorrecta, perra —le escupe antes de volver a su lugar. La mira con las cejas muy juntas, Alice parece muy enojada.

—Se los voy a preguntar una vez más —vuelve a hablar Yoongi, está vez más despacio, haciendo una pausa en cada palabra. Se inclina un poco hacia ellas— ¿Por qué mierda querían envenenar a Jimin? —gruñe entre dientes. Mónica mira a su madre con preocupación, sus llantos es lo único que se puede escuchar.

—Que no fuimos nosotras —balbucea Mónica sin dejar de mirar a su madre. Entonces yo soy quien le da permiso a Aarón de actuar. Él se acerca a Mónica con un taser, levanta la mano hasta la altura del cuello de Mónica, ella está desprevenida, no lo ve venir. Aaron lo enciende en la piel de ella, Mónica grita en dolor pero eso no impide que él presione más el aparato contra su piel. Ella se aparta como puede.

—Me estoy hartando, está es su última oportunidad, díganme, ¿por qué querían lastimar a mi novio? —doy un vistazo a todos los que están allí. Todos miran con odio a las dos mujeres arrodilladas ante nosotros.

—¡¿No crees que es patético?! —explota por fin Sabrina, furiosa. Grita entre dientes mientras mira fiera a Yoongi. Él y yo apretamos los labios cuando habla—Un hombre como tú debería estar con una mujer que esté a su altura.

Yo me río. Cuantas veces he escuchado cosas parecidas.

—¿Cómo su hija? —digo con sorna. Sabrina me mira recelosa.

—Tiene derecho. Conoce a Yoongi desde joven, ella fue su primer amor —no me inmuto ante eso. Pero Yoongi salta contra ella. Yo sé que eso no es verdad.