Yoongi's Boy |Yoonmin|

Final

A qué no se esperaban que esté fuera el final 😋

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Los ojos de Baekyun no dejaban de mirar a Yoongi, le analizaban cada acción mientras mi hombre revisaba algunas cosas con Wooyoung sobre el equipo.

—Aún no puedo creer que mi bebé está con un criminal —dice por milésima en la semana que hemos pasado con ellos. Bebo de la taza de té que me ofreció unos minutos atrás y me río—¿Cómo has acabado así, Jiminie? Teniendo tantos buenos pretendientes —aún no lo acepta por completo, pero yo sé que lo hará.

—Comprendo que para la ley no es el mejor hombre —comienzo a hablar—Pero es uno de verdad como persona, me trata muy bien y a los demás de su equipo —me encojo de hombros—A veces incluso hasta olvido que es un ladrón —busco la mirada de mi padre y lo veo muy estresado.

Entiendo que su preocupación va más allá sobre Yoongi, teme por mí y la vida que tendremos mi bebé junto a él. En parte es su deber como padre y me alegra que sea así, es un acto de amor y protección. Le importo.

—Voy a estar bien, Yoongi daría la vida por mí. No va a permitir que nada malo nos pase —le aseguro, eso llama su atención lo suficiente como para dirigirme la mirada. Me mira con desconfianza.

—Dile eso a la bala que tiene en el hombro —suspiro.

—Fue por mí —le confieso—Recibió esa bala por protegerme —y antes de que tenga su ataque, lo detengo—Papá, tienes que confiar en mí esta vez. Si yo digo que voy a estar bien, es porque lo voy a estar. Yoongi cuidará de nosotros.

Baekyun niega con la cabeza levemente mientras vuelve a posar la mirada en Yoongi.

—Respóndeme una cosa —habla tranquilo, entrecerrando los ojos cuando el sol brilla con intensidad sobre nosotros en el jardín—¿Él te ama como tú lo amas a él? ¿Te es fiel? —lo miro confiando con una sonrisa.

—Sabes que sí, soy el único en su vida y así será por un largo tiempo —él parpadea lento, se masajea la sien.

—¿Por cuánto tiempo?

Le sonrío bobamente.

—Para siempre.

Esa respuesta lo dejó sin una.

No puedo asegurar que lo aceptará en uno o dos días, puede tomarle incluso años para conciliar la idea de con quien decidí formar mi vida. Y junto a Yoongi, estaremos esperando hasta ese día.

—Con cuidado, vamos a tiempo —le digo con gracia a Yoongi mientras él conduce hasta mi segunda cita con mi médico. A él no le hace ni una pizca de gracia haberse perdido la primera, pero ahora está muy nervioso por llevarme.

—Lo siento es sólo que... —se detiene en una luz roja—Ya quiero saber cómo está —me acerco a él y me recargo en su hombro cómo puedo desde mi asiento.

—Yo sé que todo estará bien, y con suerte, en unos meses más podremos saber que será —eso parece iluminarle el alma, me mira con sus ojos brillando en emoción. Lo cual me enternece.

—Quiero una parejita, para empezar —me carcajeo en respuesta y le doy unas palmadas en el muslo más cercano.

—Más despacio, tigre. Tendrás que dejarme descansar —sus manos toman las mías y me las besa repetidamente.

—El tiempo que quieras y necesites, amor —la luz se pasa a verde en el mismo instante que conectamos miradas. Un auto detrás nos pita para que avancemos. Yoongi rueda los ojos antes de volver a tomar el volante—No te pongas histérica, placas UXV179YZ.