La Sirvienta De Un Príncipe ¿Pequeño?

Capítulo 1

•Un caballero•
• ¿Y entrando en silencio?•

Sonando mis pasos al subir unas escaleras para así, llegar a una estación de tren. Cansada de lo mismo, suspiré.

Cuando llegué, me senté en uno de los asientos para esperar la llegada de mi esperado tren.

Moví mis pies separandolos y juntandolos, una y otra vez...

El viento movia mi cabello largo y castaño.

Y mi atención fue capturada por la gran cantidad de gente...

Todos esperando la llegada del tren y sin querer ni saber, ellos hacian el mismo movimiento: Primero miraban sus relojes y luego volvian a ver hacia la ventana donde se podía ver al tren llegar.

Se me hacía divertido ver sus repetidos movimientos así que di una pequeña risa, luego poco tiempo despues respire hondo y volví a ver hacía la ventana «La lluvia cada vez es mas fuerte....» Dije en mi silencio.

Inconscientemente volví a ver el lugar donde la gran cantidad de gente estaban esperando el tren para poder seguir viendo a las personas pero por sorpresa, ya no estaban, abrí y cerré mis ojos, me levanté rápidamente al darme cuenta que ellos estaban subiendo al tren.

— ¡Aah! Esperen! -dije recogiendo mis cosas- ¡Genial, genial! -continúe diciendo con sarcasmo.

Ya con todas mis cosas en mi mano, corrí, entre y me senté...

***

Pasando unas cuantas horas, caí dormida y pobre la persona que se sento a mi lado, porque he terminado recostada en el y para el colmo, babeando dormida en su hombro.

Aquella persona al sentir la humedad, con asco empujaba mi cabeza alejándola de su hombro, logrando así, despertarme.

Bostece con toda la calma del mundo y pregunte «¿Que sucede?» mirandome con desagrado esa persona, se levanto y se pasó a otro asiento.

Cuando desperte totalmente, me di cuenta de lo que hice mientras dormia, entonces me limpie con un pañuelo y avergonzada le hice señas de mi arrepentimiento a aquella persona, sin embargo, parecía que el no quería prestarme atención.

«Que vergüenza» Seguía diciendo en mi silencio y suspire frustrada.

Para distraerme, volví a ver la ventana y me quede mirando a un joven hacerme una reverencia, como si fuera normal volví a ver hacia otra parte, sin tomarle importancia.

Después me detuve un momento y como todo un clásico, volví a ver hacia la ventana buscando a aquél chico pero, no había nada, claro posiblemente fue mi imaginación y si fue real púes, como el tren esta en movimiento, ya debe haberse quedado atras, seguro...

***

Horas después, ya en otra estacion, caminaba con la cabeza mirando al suelo; con la imagen del joven en mi mente.

Luego...

Al escuchar mi nombre, levante mi cabeza y me acerque a la persona que me había llamado, aquella persona era mi Tía, el cual su nombre era Celia.