SOLD OMEGA | Larry Stylinson [A.U]

Capítulo 13:

Capítulo 13:

La vida se había convertido en una montaña rusa de emociones, a veces no podía soportar tanto tiempo ahí y terminaba sumido en un fuerte llanto que desconcertaba tanto al alfa, podía sentir su tristeza, podía oler su tristeza y era tan lamentable que una persona tan joven estuviera tan mal, otras veces podía escuchar montones de objetos ser lanzados a todos los lados de aquella habitación que se encontraba la mayor parte del tiempo cerrada, pero todo ello acompañada de maldiciones, ¿Cómo podía tener esa vida? ¿Cómo podía tener un odio tan profundo por una persona? Realmente no entendía.

La parte más triste era que no tenía a otro lugar donde ir, debía renunciar y acceder a quedarse en aquel lugar, quizá las cosas podrían ser peor; sin embargo siempre tenía espacio y no era sometido a los golpes he insultos.

-Eres un desgraciado Louis, me das asco- lo tomó del cabello

-Papá por favor, detente- susurró con ojos cristalizados

-¡Por tu culpa lo he perdido todo!- gruñó -desde que llegaste a mi vida no has sido más que una molestia- lo lanzó fuertemente al suelo

-Pero yo...

-¡CÁLLATE!- gritó pateándolo en el estómago -¡NO QUIERO OÍR NUEVAMENTE TU VOZ, TU DEBERÍAS ESTAR MUERTO Y NO ELLA!- su corazón se partió en millones de pedazos

-¿¡Para qué!? ¿¡PARA QUE PUDIERAS SEGUIR GOLPEÁNDOLA BASTARDO!?- las palabras simplemente salían de su boca

-Oh créeme que sin no hubieras nacido, las cosas serían fantásticas.

Y empezó la peor escena que una persona se podía imaginar, con tan sólo dieciséis años estaba siendo golpeado casi hasta la muerte a los cuales intentaba resistir, una y otra vez, ya ni siquiera dolían sus golpes, lo que más lo hería eran aquellas horribles palabras que habían quedado marcadas para siempre, había estado viviendo en el infierno y su única salida la había encontrado por medio de la quiebra en la cual había entrado toda una empresa, realmente se sentía tan avergonzado por la clase de padre que había tenido.

Se miró en el espejo como lo había hecho cientos de veces en el pasado, no podía creer que la persona frente al espejo fuera él, tenía enormes ojeras y podía ver alguna que otra cicatriz que le había dejado su padre en el rostro.

-¿Louis?- tocaron suavemente la puerta -Yo...debo irme, ¿te encuentras bien?- Preguntó preocupado

-Si- susurró, obviamente no lo habían escuchado

-Debo irme, por favor sal- aclaró su garganta -Puedes decirle a tu amigo que venga, ¿si?- Insistió

-Solo déjame solo.

-Claro, Uhm...espero que tengas un buen día.

[...]

No había podido concentrarse en su trabajo y es que no podía sacarse de su mente lo que había sucedido hace quizás unas dos horas, así es, todo había sido un mal sueño donde los gritos eran algo reales, pero no podía dejar de pensar en todo el daño que le había causado el único hombre que debió de haberlo protegido, lo lamentaba demasiado por él, pero ya no tenía razones para temerle a algún alfa, Harry no permitiría que nadie le volviese a tocar un solo pelo, ya había sufrido lo suficiente como para permitírselo más veces.

-¿Me llamabas?- Preguntó la mujer sonriente

-Si, claro- Asintió -necesitaba hablar contigo- murmuró pasando su mirada por ella

-¿Todo está bien?- se encogió de hombros desinteresado -Bueno suéltalo todo, no sueles llamarme a menos de que sea una emergencia. Te has olvidado de tu mamá- sonrió, era una mujer tan encantadora

-Es Louis.

-Oh, ¿está bien?- Asintió algo distraído -y entonces...¿cuál es el problema?

-Es distanciado, es melancólico, es...- suspiró -no lo sé.

-Entiendo, debe ser difícil todo esto y mucho más para él- se encogió de hombros -no sabes cuándo ha sufrido realmente, no sabes cuantas golpizas e insultos recibió por su padre y bueno, no lo sabrás hasta que él te lo diga- Asintió

-¿Qué grado de maldad tenía esa persona como para hacerle daño a un ser tan inocente?

-¿Qué tal si dejas de darle tantas vueltas al asunto y lo ayudas? Si en verdad quieres hacerlo, encontrarás la forma.

Sería difícil y eso lo tenía claro desde el momento en el que este se encerró en su nueva habitación para no tener que verle la cara a la persona que le había tendido la mano y la rechazó completamente, pero eso no significaba que debía rendirse porque desde el principio había tenido claro que su capricho fuera de lo común, sería difícil de conseguir, además tampoco era un objeto, pero había llamado su atención desde el primer segundo en el lo vio, desde el primer segundo en que lo respiró.

-¿Como haces para ganarte el corazón de un Omega que fue maltratado por la persona que debió protegerlo?- Preguntó

-Con paciencia Harry, con mucha paciencia- sonrió -él no entenderá ahora lo que pretendes hacer, tú solo quieres ayudarlo a sanar las heridas del pasado. Créeme, será muy difícil.

-Pero...

-Se que no tienes malas intenciones, pero lo viste el primer día que viniste- se encogió de hombros -se puso mal cuando te vio porque en su mundo él cree que todos los alfas serán igual a su papá, cree que lo vas a lastimar- Miró con lastima a la mujer

-Es increible.

-Lo se, ten paciencia y ya verás como la cosas resultan entre ustedes dos.

-¿Y si no resultan?

-Tendría que ser un tonto como para no reconocer entre quién quiere lastimarlo y quien no- sonrió dulcemente -y soy tu mamá, las cosas se darán a su debido tiempo- se encogió de hombros

En casa todo iba mejor ya que había tomado la palabra de Harry y terminó por llamar a Zayn -Quién ahora era como un hermano mayor-, había sacado su lado sobreprotector con el joven omega, lo había obligado a tomarse un baño y llenar su estómago con algo de comida, no podía permitirse que terminara enfermándose gravemente por el simple hecho de no querer salir de su habitación, se estaba comportando como un tonto, pero es que Zayn jamás podría entender su dolor.

-Está mañana he soñado con él- susurró aferrándose a su pecho

-Está bien cariño- acarició su cabello húmedo con tanta suavidad -y cuéntame, ¿Qué sucedió en ese sueño?- suspiró triste

-Mas que un sueño, fue un horrible recuerdo de la cruda realidad- sus ojos se cristalizaron -había dejado de soñar con él hasta que vine a esta casa, oh Zayn, no sabes lo mal que me siento.

-Comprendo, este no es tu lugar, no es tu hogar.

-¿Y si yo...?- su voz se quebró -¿y si yo nunca he tenido un hogar?- sus mejillas se humedecieron

-Te ayudaré a encontrar uno- tragó duro, lloraría en ese instante junto a él si no tuviera que hacerse el fuerte -pero debes aceptar la ayuda- lo miró a los ojos con tristeza

-¿Ayuda de quién?

-¿Como que de quién?- Rió -de Harry, Louis Harry quiere ayudarte, estoy seguro que él no te hará daño y si lo hace...pues si lo hace tú te iras conmigo.