Atrapada en South Park.

¡Libre!

Dedicado a Creepergirlrex~ ¡Disfrutalo! ;o)

Se dice que la libertad es sólo un estado mental en el que una persona no siente ningún tipo de carga, y que ese estado mental se debe al egoísmo de una persona. Egoísmo al no querer depender de nadie más y no tener la necesidad ni obligación de proteger a nadie.

Rose creía ser una persona libre. A sus 9 años de edad decidió que no necesitaría de nadie, y se dedicó de lleno a eso. Ya no necesitó sentimentalmente de nadie, así que las constantes mudanzas formaron parte de su vida y ya no sufrió de despedidas absurdas, también aprendió a cuidarse de ella misma, al grado de que si fuera legal vivir sola a tan corta edad ella podría hacerlo, de no ser por la pereza tipíca de ella. No necesitó de nadie desde entonces, ni si quiera cuando su madre se olvidó de ella en el super mercado, pues ella regresó sola en autobús, con el frasco de cafe y otro de mermelada que su madre olvidó comprar.

Así pues, cada vez que ella tenía algún problema en la escuela ella podía resolverlo; lo mismo cuando quería algún juguete nuevo no tenía que pedirlo, siempre se las arregló para conseguirselo por si misma, así que sus regalos de navidad consistían en pasteles o ropa.

Pero de entre todos los juguetes que ella se compró el que más le obsesionó, y más trabajo le costó conseguir, fué su preciada estatuilla de Makoto Tachibana. Pasó dos meses trabajando en la pastelería que su mamá tenía en ese entonces, y durante esos dos largos meses, no se dió el gusto de comprarse frituras, se perdió varios prometedores estrenos en el cine, no compró ningún videojuego ó album digital, tuvo que releer varios libros, y el final de temporada de cada serie se veía cada vez más lejano y con menos importancia.

Pero lo más tortuoso de todo, fué la espera; Por ser un producto japonés, la entrega tardaría, pero por si fuera poco, las condiciones climaticas atrasaron el correo aereo, y Rose casi gastó sus ahorros. Y no sólo era la estatuilla.

Rose encontró una oferta, que ni de loca hubiera dejado escapar.

El DvD que incluía ambas temporadas, un CD con los soundtracks y canciones, ambos tomos de la novela ligera en la que estaba basada, un póster y la estatuilla que el comprador quisiera. Por $300 dólares.

Obviamente buscó más ofertas, pero tan sólo el DvD salía en esa cantidad, así que hizo la compra, de la cual no se arrepintió, o al menos hasta que se mudó a South Park.

El día que el camión de mudanza llegó, no dejó que absolutamente nadie tocara las cosas que ella compró, de lo cual solo se excluía su ropa, calzado y muebles; Libros, DVD's, CD's, Posters, juguetes y estatuillas las llevaría ella en sus maletas. Le molestaba ser tan celosa con esas cosas, pues había roto sus propios principios.

Todo aquel que tiene algo que proteger termina perdiendo.

Y no se equivocó. Cuidó tan celosamente de esa estatuilla para que al final un mimado gordinflón lo mandara a la hoguera.

—¿Estás segura? Aún podemos pensar en algo y salvar tu estatuilla— Gregory intentó convencerla por millonesima vez, cuando se acercaban al parque. Los demás chicos se ofrecieron a acompañarla, como una especie de apoyo moral, incluso Mysterion se había quitado el disfraz y era de nuevo Kenneth McCormick.

—Segura— Rose estaba verdaderamente enojada al dejar que ellos la rescataran, pero sabía que no podía ni debía reclamarles, así que a parte de eso, no aceptaría su ayuda más y les devolvería el favor, sí ó sí. Y eso incluía esa situación.

—Puedo yo sola. Vayanse si quieren.—

* * * * * * * *

La realidad traicionaba fácilmente a la gente y la empujaba en cualquier dirección, a veces, empujaba a las personas al fondo de la desesperación. No se podía confiar en ella por que en cualquier momento podría pasar algo.