Salí de la habitación en la que me encontraba leyendo al escuchar una risa estruendosa resonar por toda la casa. Sabiendo que Taeyong y yo estábamos solos, me extrañó.
Caminé hasta el salón, siguiendo su adorable risa, para encontrármelo tirado en el sofá y con el teléfono en sus manos.
Seguramente se caería si seguía revolviéndose de aquella manera.
–¿Qué pasa? Parece que hubiera una docena de personas en casa armando todo este jaleo.
Se aclaró la garganta y se pasó la mano por el pelo en un patético intento de peinarlo un poco.
–Oh, lo siento mucho– contestó suavemente–. Es que he recibido una foto muy graciosa.
–¿Puedo ver?
Me senté a su lado en el gran sofá, intrigada por aquello que le había causado una reacción tan brutal.
Asintió, aguantándose otra risotada, y me enseñó una foto de un bebé comiendo una tarta con las manos.
–¿Cómo has conseguido esa foto?
–Me la ha mandado tu madre, obviamente.
–¿¡Hablas con mi madre!?
–Claro... ¿No debería?
Me quedé en silencio. Claro que podía hablar con mi madre si quería... Pero había sido algo incómodo enterarme de aquella manera.
–Venga, no te enfades. Mira lo adorable que sales. Con la boquita llena de chocolate y esos ojos grandes y redondos. Es como si miraras así a la cámara porque te había pillado infraganti. Eras tan pequeñita y preciosa... Mira, mira... Es tan tierno...
–Ya vale– dije levantándome de allí avergonzada porque dijera aquellas cosas–. Para por favor.
Cogió mi muñeca cuando quise irme y me atrajo más cerca de él antes de acunar mi cara entre sus manos.
-Sigues siendo pequeñita y preciosa. De eso no hay duda.
__________________________
Hey, -Wolf_Jeno-, aquí tienes uno rapidito. Sólo para ahorrar fuerzas para el siguiente, que te va a encantar.
ESTÁS LEYENDO
NCT One Shots
FanfictionDonde me imagino cosas que pasarían con los chicos de NCT y las escribo para todos los NCTzens (y otr@s).