˚₊· ͟͟͞͞➳❥ 𝑯𝒐𝒔𝒑𝒊𝒕𝒂𝒍 𝑷𝒔𝒊𝒒𝒖𝒊𝒂𝒕𝒓𝒊𝒄𝒐ੈ✩‧₊˚

☆36☆

Luego de un tiempo. El azabache regresó y notó como el menor se encontraba durmiendo sobre la mesa, suspiro con cansancio y se sentó junto a éste para esperar a que despertara, Reaper y Geno se levantaron de su lugar y se fueron de ahí. Caminaban por los pasillos sin un destino específico, simplemente caminaban.

—¿Por qué tan pensativo?— preguntó de repente el de cabellos oscuros.

—¿Hmmn?— se limitó a decir.

—Te estaba hablando y... solo te mantenías mirando al frente— dijo deteniendo su caminar al igual que el Albino.

—Ah... perdón— murmuró indiferente.

—¿Pasa algo contigo Geno?— preguntó por el repentino cambio de actitud que notó en el menor.

—No— musitó volviendo a caminar. Pero esta vez se dirigía hacia el patio. El mayor optó por seguirlo sin preguntar nada.

Al llegar el albino se dirigió hasta un árbol y se sentó a los pies de este, la sombra que éste le proporcionaba era lo suficientemente para que el sol no le tocara la piel. El de cabellos oscuros se quedó parado unos pasos frente a él, notando como el menor se recostaba y cerraba los ojos.

—¿Va a dormir?— se preguntó a sí mismo observando al albino.

El menor abrió un ojo estando aún recostado e hizo una mueca de molesta al ver que el mayor seguía de pie mirándolo.

—¿No te vas a sentar o algo?— preguntó abriendo ambos ojos y mirándolo —¿O solo se te quedarás ahí parado?— añadió volviendo a cerrar los ojos.

El de cabellos oscuros soltó una bocanada de aire con resignación y se acercó al albino para sentarse a su lado.

—¿Qué le pasaba a Ink?— preguntó.

—No lo sé, estaba hablando solo y eso— murmuró acomodando su espalda en el tronco, para poder ver al mayor.

—¿Eso?— dijo con duda —¿De qué hablaba?

—Eh...— balbuceó para si mismo, no tenía pensado decirle que hablaba de él ya que no sabía con exactitud a lo que se refería —No lo sé. Estaba hablando solo— volvió a decir cerrando los ojos.

El mayor se quedó por varios segundos admirando el perfil del albino, detallaba con la mirada cada parte de su rostro, lo porcelana que era esta, las pequeñas mechas rojas de cabello que caían en su rostro, le gustaba cómo está hacían juego con la bufanda de él; inconscientemente se acerco a él y depositó un pequeño beso en la mejilla del Albino haciendo que éste abriera los ojos y se alejara repentinamente con un pequeño sonrojo.

—¡¿Qu- por qué?!— musitó llevando su mano a la mejilla.

—No lo sé— dijo con una pequeña sonrisa.

—¿Cómo que no lo sabes?— gritó exasperado sonrojándose aún más.

—¿Curiosidad?— musitó ladeando la cabeza.

—...¿Curiosidad?... tenias curiosidad besarme...— susurró lo último.

—Tal vez— sonrió de lado de una forma coqueta. —Y también me da curiosidad hacerlo en otro lado— dijo bajando la mira a los labios del albino.

—La curiosidad mató al gato, Reaper— murmuró con ligera molestia.

—Pero murió sabiendo— dijo de la misma forma acercándose al albino pero éste se alejó.

—Ni se te ocurra intentarlo— hablo de manera seria.

—¿Por qué no?— habló acomodándose en su lugar.

—Porque... no— musitó imitando la acción del mayor, solo que un poco alejado de él.

—Está bien— dijo sonriendo con tranquilidad —Tampoco es como que te voy a obligar, al fin y al cabo... solo soy tu psiquiatra— balbucea incorporándose y alejándose del albino —Voy a buscar algo, por favor quédate ahí— dijo antes de ingresar a los pasillos, y dejar solo al Albino.

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~Aquel horrible vacío que sientes cuando una persona que era importante para ti, te cambia como si de una pequeña e insignificante página se tratase, ya no eres importante en su vida, ahora eres uno más en el cuaderno lleno de páginas con apuntes viejos y olvidados~