Madame Butterfly 🦋 [TodoBaku].

Capítulo 15: Gracias Por Esta Noche.

Subieron al ascensor, ambos llevaban una bandeja con su cena respectiva.

-Vas muy callado- le dijo Todoroki mirándolo.

-Ideas tuyas, idiota.

-Ajá.

Bakugō lo miró con un tic en el ojo. Las puertas se abrieron.

-Vamos- Shotō caminó y se detuvo frente a su dormitorio. Sacó la tarjeta con ayuda del cenizo y abrió- Adelante- le dijo con una mirada algo perturbadora. Katsuki tragó saliva y pasó. Todoroki dejó la bandeja sobre una mesita y fue a cerrar la puerta con seguro- Katsuki, deja la bandeja ahí- le dijo.

Más tiritón que virgen en luna de miel, el ojirubí hizo caso. Sólo dejó la bandeja y no hizo más. Pues apenas sus manos quedaron libres, fue jalado por el bicolor a sus brazos. Sus rostros quedaron frente a frente.

-Oye- le susurró el bicolor. Bakugō no sabía sí se iba a derretir o le iba a dar un infarto ahí mismo.

-¿Va...mos a comer?- preguntó sin saber quién sería el platillo principal. Trató que su voz saliera normal.

-Claro que vamos a comer- le dijo Shotō, besando su cuello- Te voy a comer entero.

-Ahg...- ahogó un gemido, mordiendo su labio inferior. Tenía el corazón acelerado, su mente confundida y sus sensaciones a flor de piel.

Las manos de Todoroki viajaron hasta las prominentes caderas de Katsuki, las dejó atrás, mientras le agarraba con fuerza el culo. Qué pedazo de nalgas se gastaba el cenizo.

Ya no había que pensar mucho, él sabía a lo que había ido a la habitación de Shotō y a pesar de que su cerebro le dijo mil veces que no, su corazón y cuerpo, dijieron que sí. Rodeó con sus brazos el cuello del medio albino e intensificó el beso que ya se había echo presente entre ellos.

-Mm, mh, ngh...

Shotō agradecía en su interior haber visto Google, internet ayudaba a sacar las dudas de encima, además de pedirle una ayudita extra a Midoriya al notar que la vez pasada, caminaba medio raro.

El ambiente subió de intensidad, ambos cuerpos jóvenes comenzaban a reaccionar a las caricias y lujuriosos besos.

-Soñé con éste momento hace mucho tiempo- le dijo Todoroki una vez liberó sus labios- Eras un sol lejano.

Bakugō estaba rojo hasta el cuello, de todas las cosas en su vida, jamás creyó tener a Shotō besándolo y diciéndole ese tipo de cosas, sentía que el culo se le derretía. Su mente era peor que un caos, ni siquiera sabía lo que estaba haciendo, y cómo iba a afectar esto en su vida. Sí quería quedarse con Shotō, ¿debía decirle la verdad acerca de Madame Butterfly o mejor debía seguir guardando el secreto?.

-Regresa a mí- le susurró mientras tomaba de su barbilla y acercaba sus labios, para darle otro jugoso beso.

Las piernas de Bakugō temblaban, los nervios se lo estaban comiendo y ni siquiera sabía que vergas estaba haciendo.

Todoroki, aún abrazado al cuerpo del ojirubí, se encaminó hasta la cama, ambos cayeron sobre ésta.

-Katsuki- escuchar su nombre en labios de aquél sensual bicolor, lo descolocada. No podía entender cómo carajos Shotō lo hacía sentirse así.

-Qué mierda quieres- no pudo mirarlo a los ojos. Tenía las mejillas completamente rojas.

-Quiero hacerte mío- dijo mientras levantaba la polera del rubio para besar su piel.

-Ah...- la lengua del bicolor saboreó las tetillas del cenizo, mordiéndolas, dejó notorias marcas que pronto se verían.

Shotō no se detuvo, sus labios buscaban más, mucho más. Sólo pensaba en lo visto por internet y todo lo que su juguetona mente quería.