Amar en silencio

22- No es lo que crees... no te vayas...

Llevaban tres días sin saber de Kanon, Saga estaba desesperado y había pedido ayuda a todos sus amigos para que lo ayudaran con la búsqueda...

No había ido a trabajar, su celular estaba apagado, el GPS del auto estaba desconectado...

Aioros fue el primero en enterarse de lo que había ocurrido y puso el grito en el cielo...

-No diré "te lo dije", porque lo hice hace tiempo... no debieron ocultarle algo tan importante...

Ahora no sabemos lo que está pasando por su cabeza... se está recuperando recién y recibe el peor de los golpes y de tu mano...

-Yo sólo lo quería proteger... darle tiempo...

-Eres abogado, Saga... piensa con el cerebro y no con el corazón... ¿qué crees que Kanon esté pensando en estos momentos?

Lo conoces y sabes que si hay algo que odia es la traición... no lo puedes proteger por siempre...

-¿Dónde lo busco ahora? No fue a la casa de ninguno de sus amigos...

Iré al cementerio, tal vez fue al único lugar que le da paz... o a la casa que compartió con Asmita...

-Vé rápido y tráelo de nuevo a casa... quiero que esté aquí cuando nazca su sobrino...

Saga se sintió aún peor... le había negado a su hermano la posibilidad de vivir el embarazo y parto de su hijo.

Llegó al cementerio y todo allí estaba desierto... había rosas rojas frescas sobre la tumba de Asmita... de seguro había estado hacía poco...

Ninguno había ido aún a la casa que había compartido con el rubio, pues quedaba en las afueras de la ciudad.

Se dirigió allí sin perder tiempo y estacionado en la puerta se hallaba su auto.

La tranquilidad volvió a su alma pero no fue por mucho tiempo... escuchaba ruidos raros y se aventuró a entrar...

Cajas por todos lados, las paredes y muebles vacíos, todo embalado...

-¿Qué haces, Kanon? Te hemos estado buscando todos estos días pero ni siquiera tenías el celular prendido...

-He estado aquí todo el tiempo, en el único lugar donde nadie me mentirá ni me hará daño...

Dices conocerme tanto y no se te ocurrió que buscaría refugio en el recuerdo de Asmita?

Saga se dio un golpe mental porque tenía razón en cada palabra...

-Me voy de la ciudad... tal vez ponga en venta la casa...

-¿Qué? ¿Por qué? No!

Saga no podía creer que todo se le estaba yendo de las manos muy de prisa...

-¿Y por qué no? Tú tienes tu vida... o más de una... yo puedo hacer lo mismo y empezar de nuevo como le prometí a Asmita al morir...

Saga sintió que se tenía que contener para no golpearlo, pero no era quién para juzgarlo y tampoco el momento correcto...

-Kanon... hermano... piensa mejor las cosas, lo que viste no es lo que parece...

-¿Y qué vi que te pone tan a la defensiva? Quería acercarme a Shaka, conocerlo mejor y tal vez, si se daba, empezar una relación de forma normal...

Pero ya ves, el amor para mí se murió con mi Asmita... no deseo volver a sufrir...

Creí que Shaka era la persona correcta, por eso me alejé de Shura... me equivoqué pero no volveré a cometer el mismo error... me voy para siempre...