『Shigaraki Tomura』

11K 841 102
                                    

❝ 037; Cualquier lugar que tu alma gemela toque o pise, se iluminará ante tus ojos. Estas huellas desaparecerán después de algunos minutos. ❞

〝 Normal!AU

ღ No se me ocurrió ningún AU bueno para Shigaraki, LOL.

Camino con cautela por los pasillos de la preparatoria, riendo en voz baja y no queriendo hacer ningún ruido. Golpeo suavemente la linterna que sostengo en mi mano derecha, haciendo que esta encienda.

Apunto hacia el frente para poder observar hacia dónde voy, y reconozco rápidamente el lugar; al lado de las escaleras que llevan al segundo piso. Me apresuro para llegar y de esa forma subir, pues mi objetivo se encontraba en el tercer piso.

Son las dos de la madrugada, según marca el reloj de mi teléfono. Veo un mensaje de Toga en la pantalla de bloqueo, y alcanzo a leer un "¿estás dentro?". Decido no responder, igualmente sabe que lo estoy.

Si preguntas qué hago a esta hora en mi escuela, con Toga preguntándome si ya estoy allí, es fácil;

Todo inició con un juego de verdad o reto.

Todos nos encontrábamos reunidos en la casa de Dabi —ni siquiera recuerdo su verdadero nombre ya que siempre le llamamos así—, que vivía solo, pues se había independizado antes que los demás, y Shigaraki se negó a prestar su casa.

Twice estudia su tercer año en la Universidad. Es el mayor de todos, pero no puede ofrecer su casa porque duerme en los apartamentos de estudiantes.

Sako estaba en la misma situación, solamente que en su primer año. También vivía en los apartamentos de estudiantes.

El mayor de todos era Kurogiri. Un hombre extraño, a quien no le gusta decir su edad; se ve bastante joven, pero tiene maestría incluso, así que debe estar cerca de los treinta... Era algo así como el mejor amigo casi hermano de Shigaraki.

Y entonces estábamos Toga y yo; dos chicas adolescentes que viven con sus padres y que estudian en preparatoria. Mientras yo estoy ya en mi tercer año, Toga va en segundo.

A veces me preguntaba qué hacía un grupo como nosotros juntos; dos universitarios, dos chicas de preparatoria, uno que lo dejó en secundaria para independizarse, uno que no quiso estudiar universidad porque con preparatoria tenía, y otro que es el papá de todos nosotros.

También estaba el vecino raro que se nos unía de vez en cuando; tenía problemas con la limpieza, así que siempre llevaba un cubrebocas. Escuché que adoptó a una niña.

Terminábamos de colocar las cosas para comer sobre la mesa, cuando de repente Dabi alzó entre sus manos una botella de plástico como si fuese un trofeo.

— ¡Juguemos verdad o reto!

Todos terminamos accediendo, aunque los mayores se tardaron más, porque tienen que ser más maduros y blah blah blah.

— ¡Ok! Elijo reto —digo yo moviendo mis pies con emoción, que no se detiene incluso al ver la sonrisa macabra de mi mejor amiga.

— Te reto a que hoy mismo vayas a la escuela sola, por la madrugada y tomes del escritorio del profesor Aizawa las calificaciones del examen.

— ¿Me quieres ver morir, Toga?

Aún sobre las quejas —mías, de Tomura y de Kurogiri—, terminé aceptando, y por eso ahora mismo estoy haciendo esto.

Ya en el tercer piso, y con mis pasos haciéndose cada vez más lentos cuanto más tiempo pasaba, sosteniendo la linterna en una mano y mi celular en la otra.

Camino en dirección a la clase de 2B, una a las que Aizawa enseñaba ocasionalmente. La misma en donde estaba Toga; yo estaba en 3A.

Abro la puerta, que rechina ante el movimiento e ilumino todos los asientos hasta apuntar correctamente el escritorio.

Me acerco lo más rápido que puedo y, cuando estoy apunto de tocar la perilla para abrir el cajón, siento mi teléfono vibrar.

— ¡Mierda, Tomura! No sabes el susto que me diste —me quejo cuando respondo a la llamada. Él entonces me regaña, diciendo que no debería hablarle así cuando somos almas gemelas.

Oh, olvidé mencionarlo; hacía tres años que lo conocí. Él me encontró siguiendo las huellas iluminadas que dejaba a mi paso. Estaba en una tienda de ropa en ese momento, y fue bastante gracioso ya que estaba en la sección de "disfraces", justamente apreciando un babydoll.

— Oye, rápido sal de allí, te estoy esperando fuera.

— Estoy buscando... ¡Bingo!, lo tengo, estoy yendo fuera cariño.

— Sabes que es raro que me llames así —puedo escuchar su voz con un tono avergonzado, y río mientras camino fuera del aula, en dirección a las escaleras.

— Sabes que es raro que me llames así —puedo escuchar su voz con un tono avergonzado, y río mientras camino fuera del aula, en dirección a las escaleras

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¡Twice! ¡Dame esa sudadera!

— ¡JAMÁS! ¡ESTO ES POR COMERTE MI CHOCOLATE!

Doy un salto épico, aferrándome a la espalda de Twice para no caer y haciendo que él corriera más rápido que antes, conmigo colgando y ambos gritando por ahí.

Por esa razón, mi gran novio nunca nos presta su casa para las reuniones.

Toga toma el té junto a Sako y Kurogiri, hablando sobre quién sabe qué, y cuando Shigaraki sale de su habitación con un juego de mesa en las manos, nos observa bastante irritado debido a nuestro comportamiento.

— ¡Tomu-chan, dile que me de mi sudadera! —me quejo, aún sin soltarme del cuello, probablemente ya casi asfixiándolo.

— Twice, dale la sudadera, por favor —casi veo en su rostro "terminen ya con sus tonterías y sean normales", pero eso es imposible.

El mencionado asiente mientras me bajo de su espalda, dándome la sudadera de Tomura que me tuve que quitar un momento porque me dio calor, pero que aún así quería tener conmigo para abrazar.

— Muchas gracias, cariño —llamo con aquél apodo cariñoso que lo hace sonrojarse, especialmente estando frente a personas. Me mira con un mohín, sonrojado.

Y mientras jugamos Clue —ya casi gano, woah—, apoyo mi cabeza sobre el hombro de Tomura, quien con cautela y tratando de no ser descubierto, junta su mano con la mía.

Río ante eso, alzando mi vista y dejando un corto beso sobre sus labios.

— No coman pan frente a los pobres —todos reímos (menos kurogiri, que es muy serio) ante el comentario de Dabi. Él era alguien coqueto, así que le molestaba el hecho de no haber encontrado a su alma gemela aún.

Solamente para molestarlo más, me aferré al brazo de mi peliblanco, quien no pudo contener una sonrisa ante las muestras de cariño. Dejé otro beso sobre sus labios, recordando comprarle un bálsamo.

✧ Realmente me gustó escribir esto, LOL. Me encanta Shigaraki, pero desarrollar a un villano con Soulmate es algo complicado, así que esto fue mucho más fácil, ejé.

❝ BNHA: One Shots ➥ Soulmate ❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora