Viernes...

724 29 0
                                    

Aqui les subo el siguiente capitulo, espero q les guste!!!!

************************************************************

-La cicletada estuvo increíble, qué manera de reírme. Creo que no me había reido tanto desde que vi a Elena llena de torta en la cara, tras hacerle un tortazo – llegó diciendo Andréa.

-Estuvo demasiado entretenido, deveríamos repetirlo – coloboró Alicia.

Durante el resto del día fue el único tema de conversación, incluyendo el de mi supuesto romance con Jake, ya que decían que habíamos pasado demasiado tiempos juntos y además había pedido mi número de célular. Querían saber qué me había mandado, si me había pedido juntarnos de nuevo y si se me había declarado.

-Pero si lo acabo de conocer, apenas sé quién es él. Además ustedes saben que nunca me voy a casar, quién va a poder soportar pasar toda la vida conmigo si ni siquiera yo soy capaz.

Ante esto todas se rieron y fuimos cambiando de tema.

Evitaba todo lo posible a la profesora Antonia, cada vez que estaba cerca de mí bajaba la cabeza y si estaba apunto de toparmela en el pasillo me metía en la primera puerta que encontraba.

Jake me había confirmado que había una espía en el colegio, aunque no alcancé a preguntarle quién era. Algo me decía que no tenía que tener miedo, porque Jake me había prometido que no se lo iba a decir a nadie, pero ¿quién me podia confirmar que no me mentía?

La semana pasó demasiado rápido para que me diera cuenta del paso de los días, y en apenas un pestañeo ya era nuevamente viernes. No sabía dónde había tenido la cabeza toda la semana, pero lo que si sabía era dónde no había estado: preocupada por los estudios y las proximidad de los exámenes, aunque lo más probable es que no hiciera ninguno, ya que tal vez me eximiera de todo.

Ese viernes iba a ir a la casa de Andréa, ya que mi papá me dio permiso, pero ese mismo día en el almuerzo me contó que no podría ser, porque su mamá le acababa de avisar que tenían una reunión familiar en la casa de su abuela. Se paso todo el almuerzo deciendo que se moría de aburrimiento ir, pero que no podía hacer nada, porque su mamá la estaba obligando. Y me sorprendería mucho sino hubiera alguien en el colegio que no supiera su “desgracia”, porque lo propago por todas partes a voz de grito.

Una hora antes de salir me llego un mensaje de Jake preguntandome si tenía libre la tarde para que pudieramos salir, me invitaba a tomar un helado a algun lugar. Tendría que haberle respondido que no o simplemente omitir la existencia de ese mensaje, pero mi curiosidad ganó y accedí. Acordamos juntarnos en la heladería El Emporio de la Rosa, en el Portal la Dehesa.

No sé realemente por qué accedí, pero se cuales fueron unas de las causas: Una, curiosidad. Dos, por fin me habían dejado salir de mi casa, por lo que no desaprovecharía la oportunidad. Tal vez no fueran razones con mucho peso, pero lo fueron suficientes para convencerme.

Tome el transantiago junto con Alicia que tenía una cita con Agustín, que habían empezado a mandarse mensajes desde el paseo en bicicleta. Me baje antes que ella, porque ella antes iba a ir a su casa y después al Portal. Me invito a que me fuera con ella a su casa primero y despues juntas al Portal a llevar a cabo nuestras “misiones”, como dijo ella. Yo le dige que no se preocupara por mi, porque solo iba a comprar un libro y después me iría a mi casa, por lo que no tenía tiempo. En parte era verdad, no tenía tiempo para ir a su casa y volver porque me estaban esperando y era verdad que tenía que comprar un libro que por fin había llegado a Chile, tras meses de espera.

Camine por los pasillos repletos de adolecentes. Hace tanto tiempo que no iba a ningun mall un viernes por la tarde, que se me había olvidado como era y la cantidad de gente que iba, por lo que era casi imposible no encontrarse con alguien. Aun así recé con todas mis fuerzas no encontrarme con alguien.

Adelfa, mi historia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora