the truth; jingyeom

parte treinta y tres

— Hey —murmuró Kunpimook entrando—, vayamos, ya está comenzando —le dijo suave, notando que el contrario estaba un poco ido—. Recuerda Gyeom, habla —dijo en voz baja pero sonando firme—. Espera aquí hasta que te llamen, yo estaré en el otro lado. Debes decir todo, esto es lo definitivo —sonrió apenas y lo abrazó, intentando darle ánimos pero el contrario se separó de él de una forma fría, acomodó su traje y se preparó para entrar a su puesto cuando sea nombrado.

Divisó a Jinyoung también listo a unos metros, Park le hizo seña con sus pulgares arriba y una sonrisa, queriendo darle ánimos, pero Yugyeom apenas pudo responderle aquello con un intento de sonrisa, su cabeza no sabía cómo mierda actuar.

Una vez que fue llamado, entró sin levantar su vista del suelo, tenía miedo, y mucho. Todas esas personas juzgándolo, murmurando mierdas en cada paso que daba y sus miradas de desprecio le dolían, le dolían tanto que incluso creía que lloraría en ese mismo momento pidiendo perdón.

— Kim Yugyeom, acusado de ocho asesinatos y tráfico ilegal de sustancias y armas... —el Juez leía pero él ya no le prestaba atención, se sabía aquello casi de memoria.

— Alegatos de culpabilidad, pueden hablar ahora —el Juez le cedió la palabra a Lee y su gente. Su madre y padre adoptivos y junto a ellos se encontraban ahora los dos guardias.

Ellos argumentaban y Yugyeom cruzó miradas un par de veces con Dongjun, sintiéndose pequeño y asustado. La voz cínica de Lee lo aturdía y las expresiones de sus padres adoptivos parecían que le transmitían todo el odio posible.

Los escuchaba hablar y su labio temblaba apenas, informando que no podría aguantar mucho tiempo más sus ganas de llorar.

— Tenemos testigos que afirman haberlo visto horas antes con las víctimas mencionadas, resultados de ADN que afirman que fue él la única persona que estuvo en la vivienda de la víctima de sexo masculino Choi Seungho —pausó Lee—. Incluso tenemos grabaciones de cámaras de seguridad donde se ve claramente a Kim Yugyeom saliendo de esos lugares y su mochila con pertenencias fueron encontradas en una de las escenas de crimen —finalizó leyendo su informe.

Jinyoung lo oía atento, Lim también. Yugyeom los notó raros, preocupados. ¿Entonces es cierto que le mintieron respecto a las evidencias que le presentaron a Jinyoung? Suspiró apenas.

El abogado de Yugyeom presentó sus evidencias, demasiadas, por cierto. Asombrando al mismísimo Juez pero Kim notó que Lee no se inmutaba para nada.

Jinyoung comenzó a leer las acusaciones que presentaron por escrito y enumeró las objeciones.

— Número doce, objeción —dijo al micrófono, el Juez buscó en su copia.

— Grado de alcohol en sangre como resultados de análisis en el hospital, ¿tiene una objeción con eso? —Cuestionó el Juez.

— Si. Los resultados fueron entregados a mi por la enfermera, no tenía nada de alcohol. De hecho gracias a esos análisis pudimos saber que no le estaban dando la cantidad de comida necesaria y que eso conllevó a que tenga enfermedades —argumentó y continuó leyendo.

La mano de Yugyeom temblaba por lo que la llevó a su falda para que no pudiesen ver aquello o dirían que estaba drogado.

— Número dieciséis, objeción —pausó y leyó la acusación en voz alta—. "Mal comportamiento desde el primer momento en que fue privado de su libertad" —levantó su vista de los papeles y observó al Juez—. Choi Youngjae, enfermero de la prisión, contó que desde que Yugyeom entró en aquel lugar fue golpeado y recibió maltrato tanto físico como psicológico. Incluso yo y el psicólogo Mark Tuan presenciamos uno de esos maltratos e intervenimos deteniéndolos —justificó.