δώδεκα

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El amor es eso: cuando alguien aun conociendo tus cicatrices se queda para besarlas.

- Benjamin Griss.

- YoonGi, quiero... Hablar contigo. -

Habló JiMin con suma seriedad, el palido estaba acostado sobre la cama compartida, boca abajo, su cabeza apoyada en la suave almohada. El palido no hizo más que un suave ruido para la continuación de las palabras del menor. Ese chico se puso sobre él y se acercó a su oído, pegando su entrepierna contra el trasero de su acompañante. YoonGi comenzó a ponerse alerta y a tensarse.

- Calma. Solo quiero... Experimentar algo con tu ayuda. -

- Muchos ya lo hicieron, no quiero que tu lo hagas. -

- Por favor. -

Susurró besando la mejilla de YoonGi, el chico palido lo miró de reojo y notó lo que al parecer el menor deseaba esconder. Su celo y justo había coincidido con el suyo, no ayudaba en nada ese detalle. Y pensar que el otro si sabía de los cambios en su acompañante daba algo de ternura.

- Permíteme ser egoísta contigo. -

El calor se apoderó de YoonGi y suspiró, JiMin ya lo había tocado antes, estaba bien, confiaba en él; pero no de una manera traumatizante para él.

- Bien. -

Cuatro letras bastaron para que JiMin atacara el cuello lechoso. YoonGi cerró sus ojos sintiendo los suaves labios del chico en todo lo largo de su cuello hasta su mandíbula, escuchaba los pequeños 'gracias' de JiMin.

- Gracias... Gracias... Te necesito, YoonGi. Gracias. -

- Me alegra. -

Sonó frío, JiMin se dirigió a su nuca la cual besó con suavidad y ternura. Punto débil de YoonGi, sus ojos se aguaron y dejó su cabeza caer, exponiendo más su nuca llena de cicatrices.

- Te dejaría hacerlo; pero yo quiero tomarlo. -

JiMin asintió, había ignorado las palabras de YoonGi, concentrado en sus besos, eso hasta que el pálido de alguna manera lo hizo a un lado y subió sobre él.

- Yo tomaré tu cuerpo. -

El alfa se asustó; pero la sensación de cosquillas en su estómago lo hizo enloquecer, esa corriente fue hasta su entrepierna, le recordó que no era normal, que YoonGi no era un simple lobo, era un Delta y tanto como él, hacían lo que más les pareciera adecuado. El palido desabrochó el pantalón de JiMin, no se dedicó a nada mas que hacer eso y bajar un poco el pantalón; pero JiMin quería que con sus labios recorriera su cuello, que lo tocara y marcara, su lobo quería lo mismo, más que nunca, no protestó cuando el chico quiso ser él quien brindara placer. La luz de la luna entró por entre las cortinas, ante los ojos del menor YoonGi parecía completamente hermoso.

- YoonGi -

Lo tomó de las manos, se sentó sobre el colchón y besó su palido pecho, lo mordisqueó con suavidad y besó. Luego se atrevió a dejar una marca rosada cerca de su pezón. Subió la mirada para sonreírle al Delta.

- Será mi primera vez, ¿Puedes ser cuidadoso? -

El chico suspiró y acarició el cabello de JiMin, el más jóven sonrió cerrando sus ojos. El palido no sabía que JiMin deseaba. El no supo de dulzura durante el sexo, bueno, ni que aquello lo fuera; pero no hubieron caricias lindas, no hubieron besos, solo mordidas y una marca tras otra que le causaban dolor. JiMin nunca había sentido ser necesitado por alguien diferente, no creyó que al alguien saber que había algo distinto en él lo necesitara.

Love Me Flawed Under The Stars Of The ForestDonde viven las historias. Descúbrelo ahora