Love Me Flawed Under The Stars Of The Forest

τριάντα επτά

La venganza es el manjar más sabroso condimentado en el infierno.

- Walter Scott.

Al llegar a Busan, YoonGi miró a su alrededor, extrañaba ese lugar, su hogar. JiMin al verlo solo sonrió, sus ojos brillaban a pesar de ser tan oscuros como la noche.

- ¿Extrañabas el lugar? -

JiMin preguntó ya sabiendo la respuesta a ello.

- Claro que sí lo extrañaba, este lugar es mí hogar. -

YoonGi sonrió.

- Nuestro hogar -

Miró a JiMin y lo abrazó.

- Estoy tan agradecido de volver a estar contigo. -

El palido sollozó suave, sintiendo los brazos pequeños alrededor de su cintura, sosteniendolo tan fuerte como se pudiera. El de cabellos plateados suspiró y acarició el cabello de su novio.

- Yo tambien estoy feliz de que estes a mi lado, Seoltang. -

YoonGi sonrió feliz al escuchar a su Alfa.

- Te amo, te extrañe mucho -

El palido sonrió mientras se acomodaba en los brazos de su novio.

- Yo tambien mi amor -

Habló JiMin.

Días pasaron desde entonces. Esta vez, JiMin solo se concentró en complacer y básicamente mal criar a YoonGi. El pálido a principio se negaba a los cuidados extremos y los mimos; pero ahora sonreía por ellos, le encantaba que JiMin fuera tan atento a él.

- ¿Todo bien, Seoltang? ¿Necesitas algo? -

- No, gracias, JiMinnie -

Cantureó YoonGi, JiMin sonrió y se sentó a su lado a comer. Estuvieron agarrados de la mano todo el rato esa cena, toda la noche y en la cama. Las horas pasaron rápido, YoonGi dormía plácidamente mientras JiMin lo abrazaba con fuerza y ternura. Esa tarde la pareja despertó con una sonrisa; pero eso no duró mucho tiempo. Un hombre llegó a la casa, uno que YoonGi reconocía a la perfección.

- Joven Park... -

JiMin lo miró por sobre la mesa, su frente estaba en alto y su mirada parecía ver atraves de la persona frente a él.

- Diga -

El hombre miró YoonGi quien miraba abajo y tomaba a JiMin del brazo.

- Permítame decir que este chico no es conveniente para usted ni su reino. -

JiMin suspiro y acarició la mano de YoonGi y luego su cabello, acercandolo a su pecho cubierto por la elegante ropa.

- Es mi lobo luna, así que lamento informar que su opinión acerca de él no me interesa. -

JiMin mencionó en forma de un gruñido; pero el hombre volvió a tratar de hacer a JiMin cambiar de opinión sobre el palido.

- ¡Ese chico es un cualquiera, Joven Park! -

JiMin casi salto de su lugar golpeando la mesa a mano abierta. YoonGi se sobresaltó ante el fuerte golpe en la mesa y trató de calmar al Alfa.

- Amor, calma, no vale la pena te enojes...-

YoonGi habló tratando de tranquilizarlo.

- ¡YoonGi! ¡No puedo dejar hablen así de tí! El no te conoce com-... -

YoonGi lo intertumpió y lo apartó del lugar.

- Si lo hace: me conoce, conoce mi cuerpo... Él tanto como muchos otros -

JiMin lo miró preocupado.

- Hace un tiempo, antes de conocernos, lo volví a ver en ese lugar. Años antes el había roto el lazo más doloroso que tenía. -

Susurró YoonGi mirando al piso.

- El rentaba mi cuerpo por una noche también, y tambien fue participante de varios... "Eventos especiales" -

Hizo comillas con sus manos.

- ¿Que? -

La dulce voz de JiMin salió en forma de un fuerte gruñido. YoonGi tembló en su lugar y miró a otro lugar.

- Repite otra vez, YoonGi -

Ordenó JiMin, el hombre que se encontraba en el comedor tambien comenzó a temblar por los gruñidos a pesar que no escuchaba en lo absoluto. El menor hacia sonidos fuertes y agresivos, y eso hacía a la gente temblar y obedecer.

- É-Él... M-me violó... -

Los ojos de YoonGi se aguaron.

- Incontables veces... Él me violó -

Su voz se había quebrado antes de ver a JiMin caminar de vuelta, daba pasos grandes con sus piernas cortas, eso hasta llegar al hombre. La mano del palido había sido agarrada por la del de cabellos platinados con fuerza.

- ¿Es cierto? -

- ¿E-El qué, Jóven Park? -

Ese hombre que YoonGi tanto odiaba estaba muriendo de miedo y el lobo negro, lleno de cicatrices en su interior estaba disfrutando cada momento y se preguntaba: ¿Qué más haría JiMin aparte de plantar tanto terror en un cuerpo como el de un Alfa de esa clase?

- ¿Tocaste a mi Lobo Luna? ¿Llegaste alguna vez a tocar su cuerpo? ¿Con que maldito derecho osaste lastimar a mi Lobo Luna? ¿Eh? -

- Joven Park, no es lo que usted piensa, n-no es como su pareja lo interpreta -

El hombre puso sus manos frente a él.

- Y ahora lo llamas mentiroso... -

JiMin sonrió de lado, estaba realmente hastiado.

- Mire, solo es una pregunta de sí o no. ¡Responda! ¿Llegó a tocarlo de alguna manera perversa? -

El hombre no contestó, JiMin tomó eso como una respuesta afirmativa, y su ira creció más.

- Bien... Arrodillate, -

Ordenó con un gruñido.

- Suplica por su perdón... -

Ambos se miraron a los ojos, los más pequeños desprendían odio. El hombre se arrodillo y unió sus manos suplicando el perdón de YoonGi.

- Por favor, le suplico acepte mis disculpas...-

Repitió el hombre; pero YoonGi solo miró a JiMin quien solo daba ordenes al hombre a sus pies. Esta vez el hombre besó sus zapatos, los que pronto impactaron contra su mejilla. Inconscientemente lo había golpeado, bueno, su lobo había tomado en control.

- ¡Ni de ti, ni de nadie aceptaré sus sucias palabras! ¡Mereces lo peor, mereces ser humillado frente a todo el país! ¡Tú y todos los que me hicieron daño! -

YoonGi rió de su idea e hizo su cabello oscuro hacia atrás.

- ¿Qué demonios digo? Eso me tomaría meses, tal vez años... -

YoonGi mordió su labio, el hombre solo lo miró desde el suelo mientras su boca sangraba.

- Jiminnie~ -

JiMin lo miró volviendo a sus sentidos dulces y cariñosos. Lo mimó entre sus brazos pequeños y besó su hombro.

- Todos estos hombres, debieran estar en el calabozo, ¿No? -

- ¿Seguro, Seoltang? Creí querías dañarlos. -

- No, eso es mucho trabajo, además, ¿Qué podría ser mejor que ver su sufrimiento eterno? -

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