8. Cumpleaños

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George

Me encuentro sentado al borde de mi cama, en mi mesa de noche que se encuentra frente a mi están los tulipanes que me dio Lynx; a pesar de que ya pasaron tres días se encuentran intactos, a lo mejor los encanto para que no marchitaran.

—¿Aún no sabes quién te las dio? —preguntó Fred quien viene saliendo del baño, secando su cabello con la toalla y negué lentamente.

—Nop —mentí.

—¿Enserio? —cuestiono alzando una ceja.

—Te lo juro —mentí nuevamente—. No tengo ni idea de quien me los dio —aseguré.

Me siento muy mal al mentirle a Fred, es a la única persona que nunca jamás le he mentido, porque me es completamente difícil.

Pero no quiero que me de un sermón.

—¿No habrá sido Maisie?

—Y dale con Maisie... —suspiré un tanto cansado.

—Solo trato de ayudar a resolver el misterio de quien te dio esas flores —dijo alzando las manos—. Aparte, bueno... Maisie me dijo que te iba a invitar a salir —abrí mis ojos sin creer lo que Fred dijo.

—¿Qué? ¿Cuándo te dijo eso? ¿Cómo? —pregunté confundido—. ¿Maisie te lo dijo? ¿O lo escuchaste? —interrogué.

—Oye tranquilo —murmuró—. Lo hablamos hace como una semana, me dijo que le gustas mucho y que iba a intentar salir contigo, ya sabes, una cita o algo así. Obviamente le prometí no decirte, pero tenía los dedos cruzados y aparte no puedo no decirte algo, eres mi hermano gemelo, por Merlín —él negó rodando los ojos.

Genial, eso me hace sentir mucho peor.

—Gracias por decirme Freddie —susurré—. Ahora tengo que encontrar una manera para que Maisie no me invite a salir —Fred me miro alzando una ceja con los brazos cruzados—. Enserio no quiero arruinar nuestra amistad —suspiré e hice una mueca.

—Bueno, te ayudare, hoy hablaremos de chicas en el desayuno, así se pondrá incomoda —alzo los hombros Fred—. Aunque ahora me siento mal por Mai.

—No te preocupes Fred, yo me las arreglaré —asegure sonriendo.

—Quien te manda estar tan guapo —comencé a reír y el también.

—Somos hermosos.

...

Al llegar al gran comedor caminamos a la mesa de los leones, tomamos asiento junto con Ron, Harry y Hermione, claro yo como todos los días me encuentro mirando en dirección a la mesa de las serpientes, pero Lynx no ha llegado, solo se encuentran sus amigos Farley y Davies.

—¿No están emocionados por el Torneo? —preguntó Ron causando que dejara de ver a la mesa de las serpientes.

—Claro que lo estamos —aseguró mi gemelo—. George y yo vamos a participar.

—Pero ni siquiera tienen 17 años —nos recordó Hermione.

—Pero lo lograremos —aseguré, ella rodó sus ojos.

—No lo creo, no pueden hacer a Dumbledore tonto, pero igual me avisa para ver su fracaso —Harry y Ron comenzaron a reír.

—Diablos Hermione, creí que te caíamos bien —bufo Fred.

En ese momento, vi a Lynx entrar al gran comedor acompañada de Rachel, captaron miradas de algunas personas por que ambas a donde quiera que entren llaman la atención. La morena se adelantó para darle un fuerte abrazo a Farley y después tomar asiento al lado de su novio, Lynx por su parte le dio una pequeña caja antes de darle un abrazo.

𝐍𝐨 𝐌𝐞 𝐃𝐞𝐜𝐞𝐩𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 (g. weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora