La típica Nerd (Harry Styles y Tú)

Capítulo 15

Después de una tarde con los chicos me dirigía con el coche para dejar en casa a Tiffany, el camino había transcurrido silencioso, pero lo agradecía ya que creo que no podría soportar su aguda voz atosigándome como siempre lo hacía.

Bueno, nos veremos en la escuela – dije aparcando.

Mis padres no están – dijo haciendo una pausa, otra vez no –Si quieres entrar… - dijo mirándome con una sonrisa traviesa, yo resoplé.

Tiffany… nada ha cambiado – dije intentando no decir más palabras y que su pequeño cerebro captase lo que le estaba intentando decir.

Lo sé… pero creía que… - dejó de hablar cuando la miré con una cara seria.

Se acabó – dije al fin.

¿Sí? ¿Para siempre? – dijo aún insistiendo.

No respondí, mirándola serio, después de unos segundos ella resopló, cogió su bolso y salió del coche refunfuñando y cerrando la puerta con toda la rabia y fuerza que tenía. Ouch.

Oh Dios… - dije poniendo mi mano sobre mi frente. Era para pillar un dolor de cabeza. Al menos por fin era viernes.

(…)

Buenos días Harry –dije escuchando la voz de mi madre a mi lado – Harry – dijo llamándome de nuevo. Arrugué mi nariz y apreté más mis ojos al sentir la luz proveniente de la ventana de mi cuarto.

Despierta, vamos, arriba, arriba, arriba – dijo esta vez aplaudiendo, acabé abriendo los ojos de golpe.

Es sábado y no hay clase – dije dándome la vuelta de la cama. Mi madre resopló.

Tutoría… ¿recuerdas? – no la veía pero sabía que tenía una sonrisa juguetona, supongo que sería divertido verme en ese estado.

Aunque no le haya sentado nada bien la llamada que recibió del director ayer, estaba contenta con el castigo que me había puesto y a la vez enfadada conmigo lo que llevó a un castigo de no ir con los chicos y salir por ahí con ellos durante una temporada. Abrí los ojos vagamente mirando a mi madre quien seguía sonriendo. No tenía opción.

(…)

Intentémoslo otra vez… - dije colocándome bien en la silla- ¿Qué triángulo es el equilátero? ¿Ese o el otro? - dije señalando los dibujos del libro - ¿Tú qué crees?

Lo que yo creo es que es una bobada – dijo el chico de unos 13 años levantándose de la silla frustrado sin entender nada de lo que estaba diciendo.

Yo no es que sea un as en geometría como Jessica en todas las asignaturas pero hasta yo sabía cómo era este ejercicio. Con lo de estar retrasado en comparación del resto de la clase me lo creía. El chico salió andando de la sala llamando la atención de todos los presentes, incluida Jess que me miró seria matándome con la mirada, ella también estaba de tutora, voluntaria supongo.