Capítulo 29 - "Tan rojo como un dulce de fresa"

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La idea de regresar a Los Ángeles no esta en mis planes, no ahora. No después de todo lo que he vivido aquí. Porque me gusta, me gusta mi vida aquí, sin juicios, todo es más sencillo, no soy la chica arrogante y engreída que creía que todo lo que tenía era porque me lo merecía, ahora sé el significado de las cosas, de las más importantes.

Pero quieren que deje esta vida.

Más bien, mi padre así lo desea y yo no quiero complacerlo esta vez.

- Yo no quiero regresar. Hablaré con él y le diré que estoy bien aquí.

- Dios. Bonnie, tu padre sabe que tu dirías todo esto, nos lo advirtió. El quiere que estés bien, y se asegurará de eso. El vendrá, hablo conmigo y me dijo todo lo que piensa sobre todo este asunto de que vivas aquí. Quiere llegar y saber en donde estas trabajando, y si no estas en un buen lugar, te llevará con el.

- Anna, ni siquiera tengo trabajo. ¿Cuándo vendrá? - necesito arreglar este problema de estar desempleada.

- No lo sé, no quiso decirme tal vez quiere llegar de sorpresa para que así no planees nada como obviamente ya lo estas haciendo. Bonnie, realmente no sé qué haremos, te ves tan feliz aquí, has cambiado mucho de una manera agradable y Harry... Harry te ama mucho pero no creo que soporte que te vayas. El tiene una vida aquí, toda su familia está aquí y no creo que lo dejen ir. Tenemos que solucionar este problema. - Anna toma mis manos para calmarme un poco.

- ¡Bonnie! ¡Ven, te tengo una sorpresa! - escucho a Harry gritarme desde el campamento.

Le volteo a ver con una sonrisa dandole una señal de que en un momento iré con el, pero antes de ir, miro a Anna severamente y le digo.

- Ni una palabra a Harry sobre esto.

Anna asiente y juntas llegamos al campamento. Notamos que hay un poco de viento y la arena empieza a volar con el aire así que decidimos entrar cada una a su respectiva casa de acampar.

- ¿Qué paso?- le pregunto al entrar.

- Abre esto - me indica mientras me entrega una pequeña caja de cartón color rojo carmesí.

Le regalo una sonrisa y tomo cuidadosamente la caja. Antes de por fin abrirla, mi vista viaja una vez más a Harry y el me mira impaciente y con una gran sonrisa. ''Abrelo'' me anima una vez más. No dudo un segundo más en hacerlo y la abro.
La caja trae dentro de ella un dulce color rojo en forma de anillo. Veo a Harry conmovida por su gran detalle. De repente la situación de hace unos momentos queda en segundo plano.

- Esto es muy tierno Harry - le digo poniéndome el dulce en el dedo.

- Pensé que no te acordarías

Flashback
La tregua entre Harry y yo a durado ya casi una semana. Por el bien de nuestras vacaciones y para no molestar más a nuestros padres hemos decidido poner un alto al fuego. El día de hoy fuimos todos al lago y para sorpresa de todos lo que estuvieron presentes, Harry y yo estuvimos juntos casi toda la tarde. Ahora nuestros padres y la hermana mayor de Harry están seguramente durmiendo en algún hotel algo lejos de aquí ya que el novio de Gemma tuvo un accidente y los ''mayores'' decidieron ir a verlo y nosotros nos quedamos en las cabañas.

- Estoy muy aburrida. Harry haz algo. - me quejo mientras me tiro en el sillón junto a el.

- Lee un libro, como yo. - me responde seco y sin perder la vista en su texto.

- Eres muy aburrido, ¿No conoces a nadie que pueda venir y hacemos una fiesta?

- No soy aburrido, simplemente sé disfrutar de todo, así como puedo ir a una fiesta o hacer una, prefiero leer un libro. Deberías ser un poco más culta. - dice dejando su libro en la mesa de café.

Beso Travieso.//Wattys 2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora