Capítulo 39 - Convertirse en polvo.

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Despierto en la camilla de un hospital, es de noche y hace frío. Mi hombro esta vendando y tengo algunos tubos conectados al cuerpo, tengo vagos recuerdos de lo que paso ayer, hoy, no lo sé, estoy confundida. Me cuesta trabajo acomodarme y siento mi boca seca, necesito agua. Leves gemidos salen de mi boca en mi esfuerzo para hablar pero la anestesia me hacen muy débil y tonta. Al parecer llamo la atención de Harry, estaba acostado en el sofá pero ahora viene preocupado a verme.

- Que bueno que despertaste, estaba muy preocupado por ti - me dice Harry mientras toma mi mano.

Le sonrío agradeciendole que se haya quedado conmigo.

- Tengo sed - logro decir después de intentar varias veces.

Harry se apresura a mi lado y toma una jarra de agua, llena un vaso y con su ayuda comienzo a tomar. Finalmente, cuando me siento mejor para seguir hablando le pregunto como es que estoy aquí y desde cuando estoy inconsciente.

- No te acuerdas de nada, ¿Verdad? - asiento. - Esta bien, espero que te acuerdes de todo lo que paso en el departamento con Ian porque la verdad no quiero recordarlo, en fin, tu te sacrificaste por mi cuando Ian jalo del gatillo, por suerte te dio en el hombro pero te quedaste en shock y tu cuerpo reacciono de esta forma. Hoy en la mañana llegaste aquí justo cuando llegaron los guardias. Tu padre esta afuera y los demás igual, ¿Quieres verlos?

- Solo deja que entre mi papá - me trato de incorporar en mi lugar pero fallo y Harry me ayuda antes de salir por mi papá.

Segundos después entra Harry con mi padre y este luce completamente demacrado, tal vez no ha dormido. Se acerca a mi y me abraza con fuerza.

- Lo siento - se disculpa.

Lo veo confundida.

- Perdoname, nunca tuve que haberlo traído, no sabía que estaba loco. Te expuse a un peligro muy grande y terminaste lastimada, de verdad me arrepiento mucho. ¿Cómo te sientes ahora? Le pedí a Harry que se quedara contigo aquí en la habitación porque estarías preguntado por el si no lo veías.

- Ya estoy mejor, gracias de verdad. No tienes porqué sentirte culpable por esto.

Y es en serio, mi papá no tiene la culpa de esto, para nada, el solo trataba de cuidarme pero espero que ahora acepte lo mío con Harry porque después de lo que acabamos de vivir estoy segura que ya no puedo separarme de el.

- ¿Qué pasó con Ian? - pregunto tratando de recordar algo que me ayude a entender más.

- Murió, se dio un tiro en la cabeza al ver que su plan no funcionó. Me siento terrible Bonnie, estaba demente. La morgue se lo ha llevado de regreso a Los Ángeles, su familia esta devastada - al igual que yo, bueno un poco pero siento tanta lastima de que alguien que yo creía conocer finalmente resultará otra persona. - Me pidieron que te dijera que están apenados y que espera que los perdones.

- No deberían pedir disculpas por algo como esto, supongo que lo mejor sería llamarlos, quiero hablar con ellos y darles mis condolencias - digo rápidamente.

Harry me mira con un poco de disgusto pero finalmente acepta que es lo mejor que puedo hacer ahora que esto ya acabo.

- ¿Cómo es que Ian entró al departamento? Pensé que estaba fuera del radar de los policías - pregunto para cambiar de tema.

- Estaba en los conductos de aire - esta vez Harry me explica. - Al parecer nos estuvo siguiendo, y cuando yo salí en la mañana por el desayuno el aprovechó para seguirnos, para cuando Anna nos llamó ya era muy tarde porque el ya estaba adentro del edificio. Supongo que estuvo escondido viéndonos desde la rejilla de ventilación de la sala hasta que nos quedamos dormidos y ahí fue cuando me ataco pero no quiero contarte eso tan solo podríamos dejar esto a un lado - Harry se veía notablemente molesto y quería entender porqué.

Beso Travieso.//Wattys 2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora