Anne
Vaya dilema me tenía Ashley en la cabeza que si el vestido rojo, los pantalones negros con no se que, que mareo. Yo me vestí rápido y mira que lo diga yo. Realmente no sabía cuánta ropa tenía la chavala está parecía que tenía ahí el armario de la Barbie. Yo llevaba un top negro con mi falda que me llega a las rodillas rosa palo bastante normal. Pero Ashley parecía que iba a la boda de la reina, ella como no. Salí de la habitación de Ashley para preparar el picoteo. Ethan no daba signos de vida supongo que estaba dormido. Quedaba media hora para la fiesta y por fin los dos lentorros estaban listos.
Los invitados iban llegando, y el silencio que antes había en el piso se iba yendo de vacaciones. La gente se fue directamente a la bebida, cosa que me parece bastante humillante. Todos se ponían ebrios para divertirse mas. Yo empezé bailando con Ashley , pero al rato la perdí. Fui en su búsqueda y me encontré con Riley iba muy guapa, pero no me pude parar con ella ya que estaba hablando con un chaval, tampoco es para aurruinarle el ligué. Me fui a una zona más despoblada y observé que la fiesta iba yendo genial todo el mundo parecía comportarse medianamente normal. Allí de pie esperaba ver a Ashley para bailar con ella, pero una mano en mi hombro me sobresalto.
–Hola Anne.
–Hola...
–Soy Kyle el mejor amigo de Ethan.
–A sí ,que bien, querías algo en especial.
–La verdad es que sí, estaba por ahí bailando cuando me percate de ti, ¿que hace una chica tan guapa tan solita?
Como se notaba que era el mejor amigo de Ethan.
–Nada simplemente espero a mi amiga.
–Para que esperar a tu amiga si ya estoy yo aquí contigo.
No señor, esto no es lo que me hacía falta, otro gilipollas.
Antes de que pudiera responder Ethan me agarró de mano y me jalo hacia él, lucia tan bien esa noche, no pude evitar quedarme embobada mirandolo.
–No gracias no puede bailar contigo porque yo me la pedí antes.
Ethan siguió jalándome de la mano hacia el centro de la multitud. Una vez parados le mire y le dije:
–Me la pedí, ni que fuera el mando de la tele.
Él se rió.
–Tenía que improvisar algo, Kyle será mi amigo pero hay que reconocer que es el triple de cabrón que yo.
–Permiteme que lo dude.
–Buena jugada señorita Smith pero no estamos aquí para discutir–me estira la mano–¿quieres bailar?
Un rotundo no rebotaba en mi mente pero un pequeño sí latía intensamente en mi corazón. Normalmente me dejó llevar por la lógica, y no sé porque está vez me deje llevar por el corazón.
–Sí, ¿por qué no?–le di mi mano y empezamos a bailar.
Ahí que ver lo bien que se mueve, este chaval es una caja de sorpresas.
Bailamos un rato hasta acabar agotados. De pronto perdí de vista a Ethan y decidí humedecer mi garganta seca. En el salón por fin encontré a Ashley hablando con un grupito de gente. Intente incorporarme en el grupo. Estaban haciendo juegos de retos, cosa que no me llamó la atención pero Ashley me suplico que me uniese, cuanto me arrepiento de haberle hecho caso.
Ethan llegó con Kile después de un rato de retos de otra gente que la verdad que yo no conocía. A Ashley le tocó el turno, y su prueba era una de las peores. Emborracharse ella y cuatro personas más elegidas por ella. La muy idiota me eligió a mi, a Ethan, a Kile y a una tal Rose que no conozco. No sabía cómo pero ya sabía que esto terminaría mal. Ashley acabo mega borracha y Kile también, Ethan y Rose continuaron y pues yo dudaba entre hacerlo o no, nunca me había emborrachado y no sabía que se sentía ni tampoco que consecuencias tenía. Sin pensarlo más comencé a beber. Y bueno supongo que sabeis como termine.
Mejor que Ashley por lo menos, ella se comenzó a morrearse con Kile apasionadamente. Mientras que todos los demás bailábamos, de pronto empezé a sentir manos que tocaban mi cuerpo, me empezé a agitar y sin pensarlo dos veces deposité ostias a quienes me tocaban. Uno tras de otro salían del piso. Hasta que el piso se quedó casi solo.
Ethan estaba bastante tranquilo, puede que ya estuviera acostumbrado. Sin conciencia ninguna agarré a Ethan y me lo lleve lejos de la multitud, a una habitación, él no se quejó ni movió en ningún momento.
De pronto comencé a besarlo, no sé si era por los efectos de el alcohol que me habían vuelto loca o porque el alcohol había hecho que por primera vez en mi vida escuchará a mi corazón.
Sus brazos me cubrieron la cintura, mientras yo acariciaa su pelo. De pronto el me tiro en la cama y me miró. Pero algo pareció hacerle ver de verdad lo que estaba a punto de hacer.
–Lo siento...
–Que es lo que sientes, eres él único por el que mi corazón a latido intensamente, eres él único que eres capaz de sacarme una sonrisa aunque no tenga ni ganas ni fuerzas de sacarla, eres el único que me hace hacer locuras como ahora. Así que no, no tienes que sentir nada.
Él se quedó atónito y creo que él también sentía lo mismo.
–Eres grande, Anne Smith.
–Dime algo que no sepa.
Ambos nos reímos.
El comenzó a besarme de nuevo, nuestros ojos se conectaban con miradas que lo decían todo. Puede que la liara parda pero no me arrepiento de haberlo besado.
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100 MANERAS DE QUERERTE
DragosteMi enorme dolor de cabeza hizo que mis ojos se abrieran como platos. Me costó unos segundos enfocar la vista, y otras décimas de segundo más para darme cuenta que no estaba en mi cuarto, mierda, ¿que hago en el cuarto de Ethan? y ¿porque estoy en ro...