7. Tremendo cabezazo

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Anne

Mis músculos estaban agarrotados en el sofá, no es que fuera muy cómodo que digamos. Vueltas, vueltas y más vueltas, no pegue ojo en toda la noche.

Un guantazo en mis nalgas hizo que me despertara sobresaltada. Al enfocar los ojos vi que era Ashley con una sonrisa pícara en su cara.

-¿Cuál es la neurona que te falla? o mejor dicho la que te funciona.

-Jajaja muy graciosa pero aquí las preguntas las hago yo ¿qué haces aquí? y ¿qué hace Ethan en tu cama?

-Una larga historia... y yo quiero dormir...-dije mientras me tapaba la cabeza con un cojín.

Ashley me dio otro guantazo en las nalgas.

-¡Qué me respondas perra!

Me incorporé y la fusilé con la mirada.

-Vuelve a darme otra y te quedas sin mano.

-¡Valeeeee... pero respóndeme!

-Haber se metió en mi cama y no quería irse.

-¿Estaba ebrio?

-Por mi que estaba hasta drogado.

-Guau lo que se pierde una cuando bebe de más.

-¿Por cierto ahora que lo mencionas que te dije antes de ir a la fiesta...?

-Que...-se puso a pensar-que... ¿me lo pasará bien?

-No que no bebidas de más, y lo incumpliste.

-Ups-dijo inocente.

-Te dije que si lo incumplías te mataría-dije con tono sombrío para gastarle una broma.

-¡Anne para, que así me das miedo!

-Me acerqué a ella como un león a su presa y salió a correr. Se me metió el pie en el hueco del sofá, cosa que le dio ventaja. Salí corriendo como una loca detrás de ella ignorando por completo incluso que ya se había encerrado en su cuarto. Iba tan rápido que me resultaba imposible frenar, al llegar al pasillo un enorme obstáculo llamado Ethan se puso en medio inconscientemente. Lo que hizo que me pegara el ostión del año con él. Me caí encima de él. ¡Sería posible este tío está en todas partes! Me estremecí al tenerlo tan cerca y como ya podrás adivinar como se prepara el para dormir.
Para poder levantarme puse mi mano en su abdomen. Por milesima vez tierra tragame.

Ethan

Encima que me levanté con dolor de cabeza tremendo, misteriosamente en la habitación de Anne para rematar un pedazo choque con Anne era lo que me faltaba, mi cabeza retumbó y el pasillo comenzó a dar vueltas, por si todavía no era suficiente Anne hizo me empezó a apretar el abdomen, cosa que hizo que mi barriga se revolviese. Aparte a Anne y corrí al cuarto de baño, sin quererlo comencé a vomitar en el bater. Una vez que ya había dejado todo fuera me tiré rendido al suelo por el tremendo dolor de cabeza. ¿Por qué esto nunca me había pasado? no sería porque no hubiera ido a fiestas.

Anne pego dos veces en la puerta con los nudillos orar ver si podía entrar

-Anne no estoy de ánimos.

Volvió a pegar dos veces.

-Esta bien entra.

Anne entró tímidamente y sento en el suelo, junto a él:

-Perdón no era mi intención chocarme contigo, es que no pude frenar.

-No te preocupes, ¿para eso venías?

-Pués sí.

-Bueno ya que estás aquí si me ayudas a levantarme te perdono.

-A no dijiste que no me preocupara, chao.

-¡Anne!

-Esta bien...

Me cogió de las manos y me jalé, pero nada no podía conmigo.

-No puedes conmigo palillo.

-Te vas a enterar saco de patatas.

Jalo tan fuerte que por poco no me vuelvo a caer encima de ella, que fuerza tenía cuando se enfadaba.

-Olle tampoco nos pasemos Hulk.

Se rió y se fue hacia su cuarto el viernes teníamos un examen, y sabía perfectamente que si no empezaba a estudiar hoy, sábado, no aprobaría.

Me fui a mi cuarto y al igual que mis compañeras comencé a estudiar, lo bueno de tener a Anne es que lo que no entiendo me lo puede explicar, y lo que ella no entiende yo se lo puedo explicar, cosa que nos venía genial.

Era incómodo pero genial estar cerca de Anne. Ella era guapa, lista , amable, comprensiva, divertida y sobretodo risueña nadie le quitaba esa sonrisa de la cara. Me cuesta entender que no haya encontrado a nadie que la haga feliz. Yo no soy quien para decirlo, pero es que no lo entiendo.

Si no fuera un gilipollas máximo le diría lo que siento, si no fuera un capullo la haría feliz como nadie lo ha hecho y si no le fuera a hacer daño haría que todos los días de su vida fueran únicos, pero no, no puedo hacerlo, llamadme cobarde, idiota y lo que queráis, pero seré el gallina y idiota que no le hara daño y verá como es feliz. Lo prefiero así.

Mi infancia no fue fácil, mis padres murieron en un accidente de tráfico, y mi abuela tuvo que hacerse cargo de mi, y como no tenía para pagar todos mis gastos comencé a robar, lo que sea, cualquier cosa valía. En mi adolescencia fui un idiota más que por culpa del orgullo se acercó a aquellos amigos que te llevan a todos lados menos al buen camino. Una novia tras otra fueron cayendo y hasta hoy en día lo sigo haciendo. Por eso no quiero enamorarme, prefiero tragarme los sentimientos y pisarlos hasta que no existan, ¿pero por qué con Anne no funciona? ¿por qué no paro de sentir que mi amor crece en vez de desaparecer?

Y si está vez no puedo ocultar mis sentimientos, que será de mi, mi quiera creo que pueda ver a Anne con otra persona a su lado, ¿cómo lo haré? ¿y si por primera vez no me sirve el olvido?

100 MANERAS DE QUERERTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora