💚💚"Sigue Sin Mi"💚💚 (Zabdiel De Jesús y Tú)
Capitulo 6:
Cuenta ___(Tn):
En ese momento ví la muerte de cerca. Incluso más que cuando hablé con Allegra (que estaba muerta); porque si, hablé con ella, no estaba loca y eso podía asegurarlo.
El corazón me latía tan acelerado, que tuve la sensación de que se me saldría del pecho, además ya venía con los cables pelados de antes con todo eso del despido demasiado pronto.
Todavía no salía de mi estado de sorpresa y creciente furia, cuando ví bajar del auto al mismo chico de la plaza y del bar.
Rodé los ojos. ¿En todos lados me lo iba a cruzar? Y, siempre tenía que ser de este modo, a los golpes?Le grité cosas horribles, sin importarme absolutamente nada. Cruzó la calle como un animal, pudo haberme matado.
Recién después de varios segundos, me dí cuenta de que él no se defendía y le puse atención a su expresión. Se veía muy afectado, y estaba bastante segura que no era mi casi accidente lo que lo tenía así.
Si había algo en lo que era realmente buena, y lo sabía, era en reconocer los sentimientos de la gente con solo ver su expresión. Ese chico estaba triste. Infinitamente triste.
Me quedé en silencio. En verdad me sentí mal por andar gritándole cosas tan horribles cuando quizás él estaba pasando algo realmente feo.
De pronto, el hecho de que casi me hiciera volar por el aire me pareció insignificante; y las ganas de saber que le pasaba, la preocupación, me invadió de pies a cabeza.
Zabdiel: Disculpame. Estuvo mal lo que hice, tenía la cabeza en cualquier lado, estás en todo tu derecho de enojarte...
___(Tn): Yo... hum... sé más cuidadoso cuando manejes, podrías lastimar gravemente a alguien.
Zabdiel: Si, ya lo sé. (miró su reloj) Vamos, te llevo a que te vea un médico.
___(Tn): No hace falta para nada, estoy perfecta.
Zabdiel: Igual, vamos.
___(Tn): Pero si no me hiciste nada, no llegaste a impactarme.
Zabdiel: Quiero llevarte con un doctor, necesito quedarme tranquilo sabiendo que estás bien.
___(Tn): No quiero quitarte tiempo.
Zabdiel: Me estoy ofreciendo porque quiero hacerlo.Avancé, medio dudando, hacia la puerta del lado del acompañante de su auto. Abrí la puerta cuando él me dijo que podía hacerlo y entré, con un poco de dificultad por mis patines.
Si, señoras y señores, vivo con mis patines puestos.
Dentro del auto, me los quité despacio y los reemplacé por mis zapatos. Luego los metí dentro de mi bolso, y a este lo dejé sobre mis piernas.
Zabdiel se sentó al volante, a mi lado, y me miró con atención mientras me quitaba los patines y me ponía mis zapatos.
Mis mejillas estaban de un color rosa fuerte. Su mirada sobre mi me hacía sentir un poco incómoda. Tenía miedo de hacer alguna estupidez que me dejara en ridículo absoluto.___(Tn): ¿Qué pasa? ¿Por qué no arrancás?
Zabdiel: Nada, yo.. nada, ya arranco.Fue recién entonces que me dí cuenta de que él no me estaba mirando específicamente a mi durante todo ese rato, sino más bien a mis patines.
Que bonito, unos patines le parecían más interesantes que yo. Muy bonito.
___(Tn): ¿Te gustan? (murmuré, para llenar el silencio)
Zabdiel: Ah si, son muy bonitos.
___(Tn): Estás un poco pálido.
Zabdiel: No.. es mi color natural..
___(Tn): Si vos decís..Silencio otra vez.
No me gustaba el silencio. No con él. Me hacía sentir realmente incómoda y con ganas de abrir la puerta a mi lado y saltar a la calle nuevamente.