Capítulo 7

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— Car— y noto que me están zalandeando el brazo, es Justin a medida que voy abriendo despacio los ojos— Justin, son las 7:00a.m de la mañana, ¿qué quieres?— y me mira con mirada pícara— no, no y mil veces no— ¿por qué no? Tengo muchas ganas, hace mucho que no te veo y los dos sabemos que lo necesitamos— dice intentando convencerme— y yo te estoy diciendo que no, además que seguro que nos oirán esos dos— y pasa de mí advertencia, pero parece que no lo va a... — no, no, no te lo suplico—replico—no, por favor— y me dice gritando— cosquillas, ahora estas atrapada— y nos reímos los dos hasta no poder más, así que decido coger la almohada y no parar de darle hasta que al final se rinde— vale vale, tu ganas Car. Me has vencido— y hago un gesto de victoria—¿qué quieres que hagamos? Hoy tu eliges— me dice con la vos todavía ronca— Pues hoy tenía pensado ir al gimnasio, quiero decir, que los viernes voy siempre, vente, pídele pantalones a Josep y unas deportivas y vamos— le digo, y acepta— vale, desayunamos y nos ponemos en marcha.
Después de venir del gimnasio decidimos comer por el centro y después ir al cine, hace mucho frío, así que decido ponerme unos vaqueros, jersey de cuello alto y unas botas, mientras que Justin se ha puesto unos vaqueros, sudadera y zapatillas.
— No ha estado mal la pelicula eh— me dice con un tono cansado— Pues la verdad es que si que has tenido razón, yaves hemos acertado por un error— le digo riéndome— es que hay que fijarse en la cartelera antes— me dice, ahora es él quien se ríe— no es mi culpa que la página ponga una cosa y después haya otra— la verdad, estoy muy a gusto con él, bastante,— creo que lo que necesitábamos era despejarnos de todo, y de todos— le digo y él asiente— tienes razón, esto era lo que teníamos que hacer, tanto aquí como allí— me hace una caricia en la mejilla, y otra en la segunda mejilla y se acerca a besarme y lo hace, no me acordaba de sus besos la verdad, la verdad es que no me acordaba de lo que era estar con él, de una forma muy sencilla y a la vez estable. De repente pasan unos niños y nos interrumpen, y me asusto— ¿qué es lo que tendrán las plazas— y no puedo evitar sonreír— ¿cómo es que tienes la voz ronca? Nunca la has tenido— y me mira cabizbajo— Justin J Smith ¿qué has hecho? Tranquilo, puedes contármelo— le digo con toda la confianza del mundo— está bien, la otra vez salí de fiesta— y lo interrumpo— tú, ¿¡a una fiesta?! Eso está bien, bueno sigue perdona— y bebí y fumé, pero solo fueron dos cigarros, me gustaron y ya fumé. Lo siento de verdad, iba a contártelo, pero al estar tan bien no quería estropearlo— y le digo que se calle, que no importa y que gracias por habérmelo contado.
Llegamos a la casa y están Spencer h Joseph en casa, tumbados en el sofá, haciéndolo, de nuevo— hola, perdonad creíamos que llegarías más tarde— dice Joseph— pero si son casi las once de la noche, hemos estado prácticamente dos horas fuera— y se queda asombrada de la hora— vaya, pues si que hemos hecho... Cosas productivas y se ríe como si tuviera la impresión de que no la entendemos, y nos miramos Justin y yo sorprendidos — bueno, ¿cómo os ha ido, ha estado bien la peli?— pregunta Spencer para cambiar de tema— pues al parecer tu amiga se equivocó de hora, así que hemos visto otra y nos ha gustado— y lo interrumpo— no es culpa mía, es del cine el que la tiene— eso es muy típico de ti— y no podemos evitar reírnos los cuatro a la vez— bueno, creo que me voy a duchar, tengo frío y me ayudará otra ducha— anuncia Justin— vale, después me voy yo— y se quedan todos mirándose entre sí y a la vez a mi extranados— ¡quiero decir, en el segundo turno!— y sus miradas se calman.
Cuando tenemos todos los pijamas puestos: Spencer lleva su pijama rosa entero liso, Justin su pijama de cuadros y Joseph lleva otro pantalones de cuatros y una sudadera muy peculiar de Los Simpsons, del  show de Rasca y Pica, idéntica al de la serie y no uno liso rojo burdeos así que decidimos ponernos a hablar de todo y sacamos los vasos y una botella de Bourbon y Tequila, todas las cosas que se nos curren hasta las tres de la mañana y ya nos vamos a nuestros cuartos— madreee miaa, que colocooonnnnn— nos tropezamos Justin y yo y nos caemos yo encima de  él, mientras que cogemos el edredón y   nos proponemos llegar a la cama, cuando.
Son las 12:00pm y no veo: a nadie en la cocina, ni nota, ni post It, esto es muy raro. De prente veo que se levanta Joseph, genial— buenos días — me dice y yo le devuelvo el saludo— ¿donde está todo el mundo?— tu novio no lo sé pero Spencer si, se ha ido a correr— y me sorprendo, normalmente Spencer no sale a correr, pero mejor la verdad.— ¿Tú que vas a hacer?— me pregunta Joseph— pues había pensado en quedarme aquí a leer ¿a qué hora se ha ido más o menos?— le pregunto a Joseph— Pues a las 11:00 a.m, creo, no lo sé, me ha dejado una nota— dice aclarandomelo— bueno boya ducharme, desprendo alcohol y no me gusta nada— le digo aununciandoselo creo que esa ha sido la razón por la que se ha ido Spencer a correr.
Mientras qu eme dirijo y me pingo la música a todo volumen, abro el grifo y me pongo el agua caliente que sale vapor de agua en gran cantidad, y dejando un poco la puerta para que no se llene tanto en el baño, y cuando miro por el espejo, por un segundo veo que alguien me está observando, y creo que ese alguien ¿es Justin?

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