Habit

Capítulo 25

PDV LOUIS.

Hoy me habían dado el día libre, cosa que agradecía, ya que la noche anterior acabé muy cansado. Hacía mucho tiempo que el bar no se llenaba como ayer.
Ahora me encontraba en la tienda con mi padre, aunque la verdad que no estaba siendo de mucha ayuda, ya que me dormía por las esquinas.
- Louis, te lo he dicho dos veces, no tienes por qué estar aquí. Hoy no hay mucha cosa que hacer y puedo arreglármelas yo solo.
¡Gracias a Dios!
Asiento, quitándome el delantal y dejando el pan en el cesto.
- Eso sí, antes de pasar por casa compra el periódico y la revista de tu madre.
Ruedo los ojos, cogiendo mi mochila y saliendo de la tienda, despidiéndome de mi padre.
Ayer no hablé en toda la tarde con Harry. Tampoco he querido llamarle hoy porque de seguro estaba durmiendo, bueno, con la resaca.
- Buenos días- dice el quiosquero.
- Buenas- digo ojeando todo- ¿el periódico?
Asiente, metiéndose dentro para buscarlo.
Observo todas las revistas ordenadas, buscando la que siempre compra mi madre, una de cotilleos.
Me detengo en una en particular, ya que la cara de uno de los recuadros se me hace conocida.
Frunzo el ceño, cogiéndola y leyendo el pequeño titular.
"Harry Styles vuelve a las andadas". Y debajo una foto de él con un chico.
- Aquí tienes- dice el quiosquero sacándome del trance.
- Me llevo también esta revista- digo cogiéndola rápidamente.
- Son dos libras.
Asiento, dejando el dinero y cogiendo ambas cosas, dirigiéndome lo antes posible a casa.
Ni diez minutos tardo en llegar, entrando y dejando el periódico en la mesa, sentándome en el sofá.
- ¿Ya llegaste, Louis?- grita mi madre desde la cocina.
La ignoro, abriendo la revista y buscando la noticia de Harry.
El mundo se me cae encima.
"Harry Styles, noche divertida con un chico rubio a las afueras de la discoteca Fabric"
Mi cabeza no asimila lo que está leyendo.
Observo las imágenes.
Harry besando el cuello de ese chico. En otra se están besando, y el chico tiene sus manos en su pelo. Según ponía había hasta un video en Internet, el cual preferí no ver en ese momento.
Los ojos se me humedecen y leo la noticia entera.
Harry salió de la discoteca con ese chico de la mano, y al parecer fueron al coche de éste, donde estuvieron un rato tocándose y besándose hasta que se metieron dentro.
En la siguiente página había unas fotos de nosotros juntos.
"¿Relación fugaz? Harry Styles comenzó hace meses a salir con un chico londinense que trabaja en un pub. En las fotografías se puede observar lo felices que estaban ¿Cuál habrá sido el motivo para que rompiesen? ¿Tendría Harry una doble relación y ésta ha sido el causante de su ruptura?"
Lagrimas se deslizan por mis mejillas, incrédulo ante toda esta información.
- Louis, cariño, ¿Qué ocurre?- pregunta mi madre en cuanto me ve, sentándose a mi lado.
No articulo palabra, a lo que ésta me arrebata la revista, viendo todo y llevándose una mano a la boca, sorprendida.
- Oh mi niño- susurra atrayéndome hacia ella, abrazándome- no llores, cariño, ese chico no te merece.
Lloro en su pecho, desahogándome.
Mi madre intenta tranquilizarme, pero yo no puedo dejar de llorar.
¿Cómo ha podido hacerme algo así? Maldita sea, yo le quiero, y pensaba que él a mí también.
Me reincorporo, secándome las mejillas y levantándome del sofá.
- ¿Dónde vas?- pregunta mi madre preocupada.
- Luego vengo- respondo saliendo de casa.

***

Cuatro veces he llamado al timbre y nada.
Sé que Harry estaba, y me daba igual si se encontraba durmiendo.
Volví a presionar el botón del timbre seguidamente, hasta que oigo unos pasos.
La puerta se abre, dejándome ver a un Harry somnoliento.
No se me ocurre otra cosa que estampar mi mano en su mejilla, propinándole un tortazo.
- ¿Pero qué narices, Louis?- dice frunciendo el ceño, llevándose la mano a la zona golpeada.
Entro sin pedirle permiso, colocándome detrás del sofá.
- ¿A qué ha venido eso?- dice cerrando la puerta.
- ¿Todavía tienes la cara de preguntármelo?- pregunto con los ojos húmedos.
- Estaba durmiendo, Louis, no sé qué narices ha pasado.
Saco mi móvil y pongo en el buscador "Harry Styles" encontrando el video.
Se lo pongo, a lo que él coge el móvil, observando la pantalla.
Frunce el ceño, a lo que yo muerdo mi lengua, evitando las lágrimas.
En el trayecto a su casa decidí autodañarme, poniendo el vídeo para ver con exactitud qué había pasado entre ellos dos.
- No recuerdo nada de esto- comenta entregándome el móvil, frotándose los ojos.
- ¿Y me lo dices así?- carcajeo, alucinando con su aptitud- os metísteis en su coche, seguramente hasta follásteis, ¿no te acuerdas?
- No, Louis- responde serio.
- ¿No vas a pedirme perdón? Me has engañado con uno a la mínima de cambio, ¿va a ser siempre así cada vez que salgas de fiesta?- escupió enfadado, cruzándome de brazos.
No entendía su aptitud.
- Louis, no exageres tanto, además no grites, me duele la cabeza- dice restándole importancia.
- Pues te jodes- escupo- ¡me has engañado! Pensé, no sé, que estabas enamorado de m-
- Hey frena. Yo nunca he dicho que esté enamorado de ti. Nos estamos conociendo- dice serio.
Abro los ojos, sorprendido ante sus palabras.
Eso ha dolido.
- No vuelvas a acercarte a mí, Harry. Eres una basura- le digo con rabia, dándome la vuelta dispuesto a salir.
- Louis joder, lo siento. Te juro que no recuerdo nada, ni siquiera su cara. Yo solo estoy interesado en ti- dice acercándose.
- No sé cómo tienes la cara de decirme eso- escupo frunciendo el ceño- que te vaya bien- digo saliendo se su casa, encaminándome a la mía sin mirar atrás, con lágrimas en los ojos, a pesar de que Harry gritaba mi nombre.

PDV HARRY.

Maldije una y mil veces por haber sido tan idiota con Louis.
Después de marcharse me metí en la ducha para despejarme un poco, para después comer algo y tomarme una pastilla para el dolor de cabeza.
No recordaba absolutamente nada de lo que pasó con ese chico. Lo último que recordaba era a Steph yendo al baño a vomitar.
Me vestí y cogí las llaves del coche, encaminándome a casa de éste.
Aporreo la puerta, la cual se abre mostrándome a un Steph con el ceño fruncido.
- ¿Tú eres idiota? Son las doce de la mañana, todavía ni soy persona.
Entro y cierro la puerta, sentándome con Steph en el sofá.
- ¿Qué pasó anoche?- le pregunto.
- Que fue la mejor de mi vida- dice riendo.
- ¿No recuerdas al tío con el que me fui?
- ¿Qué tío?- pregunta extrañado.
Resoplo, apoyando mi cabeza en el sofá.
- Busca en internet mi nombre.
Steph me mira extrañado, cogiendo su ordenador y haciendo lo que le dije.
- ¿Qué narices?- exclama carcajeando.
- No te rías- respondo enfadado- Louis lo ha visto y ha venido a casa a montarme una grande.
- La cosa es que su cara me suena- dice entrecerrando los ojos- recuerdo que el chico te miraba y tú fuiste hacia él, pero después seguí con los demás a mi bola.
- Mierda- susurro.
- Tío no te preocupes- dice apoyando su mano en mi hombro- explícale a Louis que no te acuerdas de nada.
- Ya lo hice, y no me cree.
- Pues insiste. Ve a su casa a hablar con él. Deja que te insulte un poco y asiente a todo lo que te diga.
Río, incorporándome.
- No sabía que eras doctor Amor.
- No lo soy, créeme. Sólo quiero que te vayas para poder seguir durmiendo.
Le doy una colleja, frunciendo el ceño.
- Suerte, anda- dice levantándose.
Le agradezco, despidiéndome de él, poniendo rumbo a casa del ojiazul.

***

Después de unos veinte minutos llego a su casa. Suspiro, nervioso, y llamo a la puerta.
Pasan unos seis segundos cuando la puerta se abre, mostrándome a su madre.
- Buenos días, ¿está Louis?- pregunto amable.
- Ha salido- responde un tanto seca.
Lo sabe.
- ¿Sabe dónde puedo encontrarle?
- Estará en casa de Mark. Lo mejor es que te vayas.
- Si, tiene razón. ¿Sobre qué hora estará aquí?
- Harry, no vuelvas- dice intentando sonar amable, sin éxito- mi hijo es muy joven para sufrir por amor. Es mejor que tú sigas con tu vida y él con la suya. Se merece a alguien mejor.
Eso ha dolido.
Su madre se queda un par de segundos mirándome, para apto seguido cerrar la puerta, dejándome chafado.
Me quedo ausente, sin moverme, asimilando las palabras que su madre acababa de decirme.
Puede que tuviese razón.