One Shots de Eldarya

Gitana (Valkyon)

Autora: Quiero aclarar, (sí 10 años después de publicar la historia -<-) que estos son los gitanos de mi cabeza, sé muy bien que los gitanos reales no son así :v, pero meh ¡VIVA LA IMAGINACIÓN XDXD!

Y ahí están, frente a frente, pero… ¿Cómo llegamos a esta situación? ¿Cómo llegamos a el punto donde una Erika vistiendo un top y pantalones holgados con puños, ambos de colores despampanantes enfrente de un Valkyon temblando y al borde del llanto? Para eso deberemos volver un año en el tiempo, donde todo comenzó.

= Un año atrás =

Una Erika destrozada estaba llorando en su habitación, no se creía que la guardia le hubiese hecho esto, que Valkyon, un ser al cuál adoraba, la hubiese apuñalado de esa forma por la espalda, nunca pensó que la guardia sería capaz de borrarla de los recuerdos de su familia. Pero no iba a quedar lamentándose, no no no, ella podía con eso, solo necesitaba irse, así que con los cachetes húmedos junto sus cosas y escribió una carta a su mejor amiga.

"Querida Karenn:
Debo irme, pero no quería irme sin despedirme de ti, si te preguntas el motivo de mi ida te lo explicaré, los jefes de guardia, Leiftan y Miiko se les dió la "brillante" idea de borrarme de los recuerdos de mi familia.
Espero que puedas entenderlo y te juro que cuando esto esté superado y haya empezado una nueva vida vendré a visitarte.
Siempre tuya:
Erika".

Y tras dejar la carta debajo de la puerta de la vampiro se fué, se perdió en el bosque, se fué sin rumbo, buscando empezar de nuevo.

Karenn se despertó al otro día y vió la carta, la leyó y lloró a lágrima viva, no podía creer que su propio hermano fuera capaz de tal atrozidad, lo buscó por todo el cuartel hasta que se cruzó con Kero, el cual le dijo que estaban en una reunión, ella le agradeció y se fue rumbo a la sala del cristal.
- ¡NEVRA! - gritó Karenn nada más entrar.
- ¡Karenn estamos en reunión! - la regañó su hermano.
- ¡Dime qué no le hiciste eso a Erika! - gritó Karenn al borde del llanto, nadie decía nada.
- ¿C-cómo lo sabes? - dijo Nevra finalmente.
- ¿¡ENTONCES SÍ LO HICISTE!? - le dijo Karenn indignada.
- Sí - contestó Valkyon.
- Lo hicimos - siguió hablando él, se podría ver la tristeza y el arrepentimiento en su voz, de no ser que lo ocultaba en un tono seco.
Karenn estaba estupefacta y enojada, viendo como todos agachaban la  cabeza, finalmente habló.
- ¡ESPERO QUE ESTÉIS ORGULLOSOS! ¡PORQUE SE FUÉ! - dijo y le tendió la carta a Nevra para luego irse, no quería verlos, y mucho menos a su hermano.
- ¿S-se fué? - dijo Valkyon con la voz temblorosa. Nevra leyó la carta y luego le contestó.
- Sí - dijo mientras cerraba el párpado con fuerza para no llorar.
Valkyon solo atinó a apretar los puños, la boca y los párpados, para luego dirigirse hacía su habitación y cerrar de un portazo.

Cuando estuvo allí adentro golpeo una pared con fuerza y se tumbó en su cama, llorando y abrazando a su almohada, deseando que está fuera Erika, repitiéndose lo idiota que había sido al herir de tal manera a una persona que quería, y que quería mucho.

Pero ¿Qué era de Erika? Fácil, vagó por un par de días, hasta que, encontró a un muchacho mientras tomaba agua en una laguna.
- Hola… - dijo el muchacho.
- Hola… - dijo Erika.
- ¿Quién eres? ¿Y que haces aquí? - dijo el muchacho sentándose a su lado.
- Soy Erika, ¿Y tú? -
- Erik, mucho gusto - le tendió la mano con una sonrisa, Erika la aceptó mientras reía internamente de la coincidencia de los nombres, y Erik hacia lo mismo.
- ¿Y que haces aquí Erika? -
- Busco comenzar de nuevo -
- ¿Comenzar de nuevo? - Preguntó Erik, ella solo asintió.
- ¿Y sabes hacia donde te diriges? - Erika negó.
- Pero si tú estás aquí es porque hay un pueblo cerca ¿No? - dijo Erika y él negó sonriendo.
- ¡EEERIIIK! - se escuchó una voz a lo lejos llamando a Erik.
El elfo de pelo negro y corto se paró y antes de irse le agarró la mano a Erika para llevársela con él, ella no se resistió, no se la había visto venir y además, ese chico el cual aparentaba tener su misma edad le transmitía confianza.