Lucy suspiró cuando entró al paraíso. Algunos ángeles custodios la saludaron y ella hizo un movimiento con la cabeza, desde que las cosas se habían aclarado, ya no tenía que pedir permiso para entrar al paraíso, y ya nadie la miraba con odio. Su padre levantó la cabeza cuando Lucy entró, estaba completamente solo y ella se detuvo a una distancia prudente.
--Luzbe, ¿qué tal has estado?
--bien.
Su padre se puso de pie y caminó la poca distancia que los separaba, para después comenzar a caminar juntos y salir del castillo de luz.
--¿cómo va Gabriel?
--es desdichado, odia lo que hace y en necio, demasiado.
Dios sonrió, el ambiente en el paraíso había cambiado desde que Gabriel había sido desterrado.
--se acostumbrará.
--lo dudo, han pasado casi treinta años y creo que aún tiene la esperanza de que recapacites y lo perdones.
--no se puede perdonar a alguien que daña a alguien más.
--lo sé.
Ella suspiró, aun después de que su nombre ya estaba limpio y era aceptada, aun no lograba perdonar del todo a su padre, la había lastimado y olvidar todo lo que le hizo era difícil.
--¿qué tal está tu humano?
--está bien, es feliz en el infierno.
--creo que es más feliz porque está contigo.
--nunca dijiste nada al respecto.
--no está bien, pero no está contigo por obligación, él quiere estar contigo en el infierno, no puedo hacer nada contra eso.
Lucy metió sus dedos en los bolsillo delanteros de sus jeans y se mordió el labio. Cuando Lucy le explicó a Tyler la forma en como el tiempo avanzaba en el infierno, él estaba dispuesto a quedarse, aun sabiendo que tal vez dentro de veinte años en el infierno, todos sus amigo y familiares estarían muertos.
--él te quiere Luzbel, y no de forma malévola, él realmente ama tu alma.
--lo sé, y yo amo la suya.
Su padre sobó su espalda y sonrió. Lucy se sentó en si trono y se sobó la frente, la cabeza le dolía horrible. Belcebu entró y tomó asiento, arregló su saco y la miró.
--no te ves bien.
--no lo estoy, la cabeza me quiere explotar.
--¿es por la plática que tuviste con tu padre o por...?
Belcebú no acabó la frase y sonrió divertido cuando Lucy levantó la cabeza.
--¿se lo dijiste? ¿Le dijiste que dentro de tu vientre crece una abominación?
--no, dame tiempo.
--creo que es lo que menos tienes, según la anatomía humana, un bebé humano tarda nueve meses en desarrollarse completamente. ¿Cuánto tiempo crees que le tomará desarrollarse aquí? ¿un mes o dos?
--sabré que hacer cuando llegue el momento.
--no lo dudo.
Lucy cerró lo ojos y volvió a sobarse la frente, lo único que quería era tirarse en la cama y dormir hasta nuevo aviso.
--¿qué harás si Él despierta? No le gustará nada lo que estará pasando.
--no tiene porqué despertar, no tiene razones para despertar.
--a menos de que sea necesario causar una catástrofe que se lleve vidas en masa.
--no estamos en épocas de Noé, o en Sodoma y Gomorra.
--entiendo.
Ella suspiró, la verdad no le interesaba ver las consecuencias a futuro, solo le interesaba una cosa, y era traer a su futuro hijo al mundo, tal vez no lo demostraba, pero estaba feliz.
--¿dónde está Tyler?
--fue con Belfegor y algunos demonios a pescar.
--bien.
Ella se puso de pie y se fue, tenía demasiadas almas que enjuiciar. Después de un largo día, ella subió a la habitación y se dejó caer en la cama, estaba hambrienta y también demasiado somnolienta. Tyler subió media hora después y sonrió al verla tirada en la cama.
--¿estás cansada?
--no tienes ni idea.
--¿se lo dijiste a tu padre?
--no, se lo diré después de que haya nacido.
--como quieras.
Ella se incorporó en la cama y se acercó a él para besarlo. Tyler sonrió y ambos se dejaron caer en la cama.
--ordené que nos trajeran la comida aquí.
--¡sí! Justo lo que necesito.
Tyler soltó una carcajada, había dejado absolutamente todo por ella, y si le dieran la oportunidad de regresar y cambiar algo, no lo haría, dejaría todo exactamente igual, porque él, estaba perdidamente enamorado de Lucifer.
ESTÁS LEYENDO
Lucifer
FantasyEl antiguo testamento narra que Lucifer, era un ser divino y perfecto que anhelaba el poder de Dios. Decidida a obtenerlo, se rebeló ante su creador. Pero... ¿qué tal si todo fue un malentendido? ******** Los hechos que se narran son meramente fict...