-CAPITULO 16- CASTLE ROCK

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MIKE

Al salir de la fiesta, tomo la avenida principal, todavía no llegamos a los límites de la ciudad y mi mal humor ya ronda el nivel Dios. Nos tomará una hora y media llegar a Castle Rock, eso si no hay complicaciones.
─ Relájate hermano, te va a terminar dando algo ─me dice Chris mientras juega con la pantalla táctil de mi estéreo, buscando que música escuchar.
─ Juro que si sigues haciendo eso voy a dejarte en medio de la carretera ─mi voz suena baja y amenazante al salir a través de mis dientes apretados.
─ ¡De acuerdo!...no toco más ─me contesta elevando ambas manos y frunciendo el ceño ─ ¡gruñón! ─ murmura por lo bajo, pero para su mala suerte, alcanzo a oírlo.
─ ¡¿GRUÑON?! ¡¿ME LLAMASTE GRUÑON?! ─mis manos se cierran con fuerza sobre el volante y resoplo como un toro embravecido ─CONVENCI A ELIZABETH PARA QUE ME ACOMPAÑE A LA PUTA FIESTA Y LE PROMETI QUE NO LA DEJARIA SOLA Y ACA ESTOY CONTIGO LLENDO A LA MISMISIMA MIERDA Y NOS VA A LLEVAR TODA LA PUTA NOCHE Y LA DEJE SOLA ¿ENTIENDES? SOLA ─largo todo de corrido y a los gritos ─ ¡MALDICION! ─grito golpeando el volante con ambas manos.
─ ¿Terminaste?...gruñón...
─ No vallas por ahí Christian...
─ A mí no me intimidas...gruñón...
Siento que voy a romperme un diente de tanto apretar la mandíbula, mi sangre fluye al extremo de hacerme palpitar las sienes y tengo los nudillos blancos de tanto apretar el volante. Saco el cambio y apreto el freno, haciendo chirriar los neumáticos contra el asfalto.
─ ¡Uuuuuuu! A alguien no le gusta que le digan verdades...gruñón...
─ ¡BAJA DEL PUTO AUTO YAAAA! ─le grito mientras siento mis venas a punto de explotar.
─ ¡NO ME BAJO UNA MIERDA! Y ME VAS A ESCUCHAR...
─ ¡QUE TE BAJES MALD...
─ ¡CIERRA LA BOCA DE UNA PUTA VEZ! ─muy a mi pesar hago lo que me dice mientras resoplo enfurecido maldiciendo por lo bajo.
─ Si la loca te vio en algún momento con Liz irá tras ella, entonces si no resolvemos esto y la encontramos, todo se va a ir a la mierda. Me dijiste que enviaste a Stev para que la cuide, entonces no la dejaste sola, así que tienes que tranquilizarte de una puta vez y concentrarte en llegar lo antes posible allá ─me explica con vos pausada, logrando como siempre calmar mis demonios.
─ Es que tú no entiendes...
─ Y si me lo explicas...
Cierro los ojos, mientras me paso las manos por el cabello inhalando profundamente.
─ Iba a besarla Chris...por primera vez...iba a besarla ─le confieso a mi amigo resignado.
─ ¡¿ACASO VAS A DEJARME?! ─ exclama con exageración llevándose una mano al medio de su pecho.
─ ¡DEJATE DE ESTUPIDECES! ─le digo bajando de un manotazo su brazo.
─ Con que ahí estaba la madre de todos tus males...
─Me está volviendo loco Chris...nunca me sentí así con una mujer...tú lo sabes mejor que nadie.
─Te pego fuerte eh...
─Uff...fue un perfecto knockout hermano.
─Me alegro por ti, ahora que largaste lo que tenías adentro. Acelera este maldito cacharro y lleguemos a Castle Rock de una vez ─me dice mientras me da una palmada sobre el hombro.
En una hora y diez minutos estoy estacionando frente a una cabaña, enclavada en la ladera de la montaña. Afuera de la propiedad están las dos camionetas de Jackson y su equipo, más una de la policía local.
Bajo del auto, seguido de Chris, cuando Jack sale de la casa y camina hacia nosotros.
─Mike...Chris ─saluda con un movimiento de cabeza mi jefe de seguridad.
─Jack...─contestamos casi al unísono.
─Vamos adentro, necesito que veas esto Mike ─me dice con su mirada fija en mi cargada de preocupación ─ Les voy a pedir que no toquen nada por favor, todavía estamos recolectando huellas.
Asentimos con la cabeza ambos y lo seguimos al interior. Efectivamente al entrar, al menos media docena de hombres y mujeres están trabajando. Unos sacan fotos, otros toman huellas y otros recolectan distintos objetos, que colocan en bolsas plásticas, para luego sellarlas.
«Parece la escena de un maldito crimen»
Observo todo a mi alrededor y solo veo una casa normal, como cualquier otra, cuando Jack me hace una seña para que lo siga. Atravesamos la sala y nos conduce por un amplio pasillo, pasamos dos habitaciones y al llegar al final, ingresa por una puerta sobre su derecha.
─ ¡Santo Dios! Esto no puede ser cierto...─logro articular cuando mis ojos chocan con las paredes de la pequeña habitación.
─ ¡MIERDA! Sabía que la loca estaba loca...─suelta Chris detrás de mí.
─Necesito que me confirmes esto cuanto antes, por eso te hice venir ─me dice Jackson señalándome las paredes de la habitación.
Doy unos pasos para poder acercarme y ver en detalle con mis propios ojos, lo que hay allí, una perfecta recopilación de fotografías, recortes de periódicos, hojas de rutas, folletos de hoteles, etc. Todo con fechas, horarios y ubicación de mi viaje de tres meses por Europa.
─ Y eso no es todo...ven a ver esto ─me señala con un gesto, una notebook que está sobre una pequeña mesa al fondo.
Me acerco arrastrando los pies, de repente, me siento como si me hubiesen molido a golpes. Jack hace que me siente en una silla, frente a la mesa y abre la computadora. Mi cara se descompone en un gesto, que mezcla asombro, ira, preocupación y lástima. Y si...no puedo dejar de sentir lástima por Melissa...
Las fotos del salvapantallas se mueven en una danza cruel frente a mis ojos, reconociéndome en todas y cada una de ellas. De vez en cuando un corazón rosado y un "TE AMO" en distintos caracteres, se entremezclan con los momentos de mi día a día.
No puedo dejar de sentir culpa al ver que se enamoró de mí, siempre fui claro con ella en nuestra relación, jamás le mentí o le di esperanzas de algo, que no fuera meramente físico entre nosotros. Ella había aceptado sin cuestionamientos de ningún tipo, pero al tiempo se volvió cada vez más posesiva y exigente con algunas cosas. Sus escenas de celos hasta con mis amigos, su intolerancia a mis tiempos...« ¿Cómo no lo vi? ¿Cómo no me di cuenta? A su manera, aún perdida dentro de los recovecos de su mente...me ama»
─Mira esto ─la voz de Jackson me saca repentinamente de mis pensamientos.
Mueve el mouse para quitar el salvapantallas y me muestra una serie de archivos con direcciones de sitios de internet, capturas de pantallas de teléfonos, videos, fotos y hasta detalles de vuelos y aeropuertos, de cada lugar que visité.
─ ¡GUAU! ¡Alguien se ganó el premio a la psicópata del año! ─suelta Chris con su particular forma de decir las cosas.
─ Hay algo más ─me dice Jack mientras abre una de las carpetas del escritorio, en ella se puede ver el anuncio del periódico local, sobre la gala de mi madre, rodeado con un círculo rojo.
─ Puede que haya asistido a la fiesta Mike...
─ Pero era solo con invitación...aunque cada invitado, podía llevar un acompañante... ¡MALDICION! Debemos volver y revisar las cámaras de seguridad... Elizabeth...─mi pensamiento vuela directo a ella al saber que la dejé sola, sé que Stev la cuidará, pero yo tendría que estar con ella.
─ Mike...no hay una sola foto de ella, ningún tipo de referencia ─me dice Chris, quién también ha visto en detalle, todo lo que se encuentra en la habitación.
Sé que Chris tiene razón, pero eso no evita que se me cierre el estómago, de solo pensar que Liz puede llegar a estar en peligro.
─ Stev está con ella ¿quieres que mande a alguien más contigo?
─ No Jack, se cuidarme solo.
─ Ok...Ya mandé reforzar la seguridad en la casa de tus padres. Igualmente aunque no quepan dudas, ya que hay suficiente evidencia de que estuvo aquí todo este tiempo, sabes que para tener un caso necesitamos los resultados de las huellas y las pruebas recolectadas. Un perito informático, se encargará a primera hora de hacer un informe detallado de los archivos. Mañana en cuanto tenga los resultados te aviso Mike, ahora ve a tu casa y trata de descansar.
─ Vamos Mike, no tenemos nada más que hacer aquí ─me dice Chris poniendo una mano sobre mi hombro.
─ Tienes razón, vamos ─cuando me levanto, siento caer sobre mí todo el peso de lo que acabo de ver y me sigo preguntando como fui tan estúpido para no verlo antes.
Nos despedimos de Jack y volvemos sobre nuestros pasos, para salir de aquella de aquella casa, cuando a mitad de la sala la pregunta de Jack me paraliza por completo.
─ ¿Stev se comunicó contigo?
Chris se gira a mi lado para mirar a Jack y vuelve su vista hacia mí. Sabe al igual que yo, que no hablé con Stev en todo el camino.
─ ¡Rastrea el teléfono de Stev! ─le ordena Jack a uno de los agentes al entender la situación.
Pasados unos eternos minutos, el agente vuelve y le extiende un papel a Jack.
─ Mike ¿conoces esta dirección? ─me dice mostrándome el mismo papel.
─ No puede ser...es la casa de Elizabeth...se supone que tendrían que estar en mi casa... ¡MALDICION! ─salgo corriendo hacia la puerta, llevándome por delante a un agente y con los gritos de Chris a mis espaldas. Me monto en mi BM y acelero a fondo derrapando sobre la carretera hacia River Valley, nada me importa solo hay un pensamiento en mi cabeza...Elizabeth.

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Hola queridos lectores, gracias como siempre por leerme y apoyarme con sus estrellitas. Comenten, pregunten, no hay nada más lindo que interactuar y poder ver la mirada del otro lado de la historia.

Besos 💋💋💋💋

Mariamercedes 💖

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