La charla se alargó bastante y pronto se hizo demasiado tarde, el tío Evan se marchó y prometió volver pronto a verme.
Marie había caído rendida mucho tiempo antes, por lo que la llevé en mis brazos en dirección al cuarto de Dante.
- Puedes llevarla a mi cuarto - dijo Emma - si quieres puedes dormir tu también conmigo - negué e intenté sonreír.
- Está bien, dormiremos en la habitación de Dante por ahora - Emma sonrió tristemente y me dejó hacer lo que yo quisiera.
Dormir en el aroma de Dante, tranquilizaría un poco mi corazón, por lo que prefería mil veces dormir ahí, que en cualquier otro lugar.
Al día siguiente, Emma nos llevó hasta la comisaría, a presentar nuestras declaraciones, el resto de niños ya lo habían hecho el día anterior, por lo que Marie y yo éramos los únicos ahí.
- Emma - me acerqué después de terminar - ¿qué sucedió con el resto de los niños? - era otro tema que no dejaba mi cabeza en paz, el resto habían salido ilesos, pero no me dijeron a qué clase de lugar serían enviados.
- No te preocupes, por el momento están en el refugio de la ciudad, una vez que todo este proceso termine, el estado los asignará a algún lugar, tal vez una casa hogar, en lo que se define su situación, al parecer no todos son huérfanos, por lo que podrían volver a ver a sus familias - sus palabras me hicieron muy feliz, si la mayoría eran capaces de encontrar a sus familias entonces sería suficiente.
- ¿Qué va a pasar con Marie? - ella había estado con nosotros casi por casualidad, por lo que no era seguro que permaneciera con nosotros.
- Aún no lo sé, ella estaba ayudando a Dante a andar, cuando salieron de la mansión del señor Colombo y no ha querido separarse ni de él ni de ti en todo este tiempo, ya pensaremos qué sucederá con ella más adelante, lo consultaré con Dante una vez que despierte - si se lo preguntaba a Dante, de seguro querría que se quedara con nosotros, pero no estaba seguro si sería demasiado pedir.
Después de la comisaría, Emma nos llevó por un camino muy diferente, no íbamos a casa, por lo que quise preguntar a dónde nos dirigíamos, pero al girarme para hacer la pregunta, pude ver el edificio del hospital de frente, iríamos a ver a Dante, mi corazón se hundió y después no pude hacer que se detuviera.
- Pasaremos a ver qué nos dicen los médicos, pero es probable que no los dejen entrar a ver a Dante, dado que son menores de edad - dijo y entonces la emoción que había sentido se esfumó. Emma se acercó a la recepcionista y nosotros la seguimos de cerca.
- El paciente Dante Costa sigue inconsciente, el día de ayer fue sometido a cirugía, ya que las costillas rotas le perforaron un par de tejidos, por el momento está estable pero todavía está en terapia intensiva - respondió al preguntarle sobre Dante.
- Está bien, muchas gracias - dijo Emma - parece ser que esperaremos un poco más para poder verlo - sentía que el tiempo que había pasado desde la última vez que lo ví, se volvía eterno, si no era capaz de verlo, probablemente iba a morir de preocupación.
Emma dijo que era muy probable que no pudiera llevarme a ver a Dante al día siguiente, por lo que le pedí que me dijera como llegar por mi cuenta, iba a estar todos los días visitándolo hasta que despertara.
El primer día me aterraba salir a la calle por mi cuenta, Emma había llevado a Marie con ella para revisar su caso, había indicios de que Marie tenía una familia, por lo que era probable que estuvieran buscando a esas personas.
Como Marie no estaba, no había ningún tipo de soporte moral, el simple hecho de abrir la puerta por mi cuenta era todo un reto, jamás salí solo antes, las pocas veces que lo hice, siempre fue acompañado ya sea de mi madre o de Dante, por lo que no solía prestar mucha atención al caminar.
Tomé el mapa con indicaciones que me dió Emma y caminé hacia la puerta, la abrí y después la cerré con llave, Emma me había dado las llaves de Dante, dijo que después tendría unas propias, pero que podía usar estas hasta entonces.
Miré alrededor y había muchas personas paseando por fuera, ninguna de ellas me prestó mucha atención, por lo que comencé a caminar. Según las indicaciones de Emma, el hospital quedaba a tan sólo algunas cuadras, así que no tuve que caminar mucho. Me acerqué a la recepcionista y pregunté por él.
- El paciente Dante costa... parece que saldrá de terapia intensiva por la tarde, sin embargo no creo que autoricen las visitas hasta el día de mañana - suspiré, con lo mucho que me había esforzado para llegar hasta ahí, le dí las gracias y me dispuse a volver.
Al volver a casa, me sentía tan agotado, como si hubiera caminado durante horas bajo el sol, aunque realmente no había sido tanto.
Por la tarde Emma y Marie volvieron, al parecer la familia de Marie vendría pronto a buscarla y ella estaba muy feliz, por que sería capaz de ver a su madre de nuevo, yo también me sentí muy feliz por ella, esperaba que Dante se despertara pronto y pudieran despedirse.
- Dante es mi héroe - dijo esa noche antes de dormir - él hizo hasta lo imposible por nosotros, hoy vi a Mirna y dijo que él había tirado la puerta del cuarto de Daniel, dijo que lo salvó de que muriera, golpeó a un hombre gordo y después ayudó a que otros niños salieran de las habitaciones, arriesgó su propia vida por la de un montón de niños que no conocía ¿no lo convierte eso en un héroe? - yo había estado pensando lo mismo.
- Claro que lo convierte en un héroe, también es mi héroe, él me dió mucho cariño durante el tiempo que cuidó de mí, a pesar de no conocerme me protegió y cuido hasta el último día - los ojos de Marie brillaron.
- Dante es genial, quiero agradecerle por todo, de no haber ido por nosotros hasta el último piso, tal vez hubiésemos muerto quemados en el incendio ¿verdad? Tu también debes de agradecerle por eso - sonreí y asentí, en definitiva quería agradecerle, pero era imposible verlo, si tan sólo pudiera tenerlo frente a mí, podría decirle cómo me sentía y lo agradecido que estaba.
- En cuanto despierte y se sienta mejor, debemos decirle gracias, pero hasta entonces seamos pacientes - estuvo de acuerdo y poco después por fin se durmió.
Dante no sólo era mi héroe, era la persona más preciada que tenía en el mundo entero, mi corazón y mi cuerpo lo anhelaban tanto que me era imposible dormir, tenía que volver pronto, realmente esperaba que despertara pronto, de otra forma mi corazón iba a desbordarse.
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Quédate a mi lado
Teen FictionYo, no estoy muy seguro de cómo fue que llegué hasta aquí, pero no parece ser un mal lugar, después de escapar del infierno, cualquier lugar estaba bien, pero nunca creí llegar al cielo, con gente que me quisiera y me protegiera de la manera en la q...